Parte II. O4

170 25 8
                                    



- La última vez que hablamos, me contaste que llevaban un largo tiempo en que dormían juntos los tres - asentiste - ¿cómo te hace sentir eso?

- Siempre me dejan en el medio - susurras, sintiendo como tus labios tiraban hacia arriba, formando una sonrisa que no podías controlar – Hyunjin siempre se prende a mi lado derecho y Jisung a mi lado izquierdo...es extraño, pero no en un mal sentido... es que ellos dicen que no se agradan, pero cuando estamos los tres juntos, sus aromas se vuelven muy... - te relames los labios, sintiéndote un poco avergonzado.

- ¿Muy? - te pregunto tu terapeuta, para incentivarte a seguir hablando al ver que te habías quedado sin palabras.

- Hacen que quiera algo más... - admites en un suave susurro, tus mejillas ardiendo – últimamente, cuando estamos juntos, mi cuerpo se siente caliente, y me encuentro pensando que quiero que sus manos me toquen... no se... Jisung es más atrevido que Hyunjin, sus manos siempre se cuelan entre mi ropa - le comentas, tu estómago comenzando a revolverse - acaricia mi abdomen, besa mi cuello.

- ¿Te desagrada cuando pasa? – negaste – y entonces, ¿podrías describirme en palabras como te hace sentir?

Frunciste tu nariz, pensando alguna palabra que pudiera explicar en su totalidad lo que te había preguntado tu terapeuta, pero no encontraste ninguna.

- Supongo que... no se... me hace querer corresponderle - admites, mirando tus dedos entrelazados sobre el pantalón de tu jean.

- ¿Que te lo impide?

Te quedaste en silencio, intentando recordar que podría ser, pero no encontrando una respuesta. Era tan frustrante.

- Cuando... cuando siento la sangre bajar... ya sabe... cuando... cuando...

- Cuando tienes una erección - completa tu terapeuta, pero niegas.

- Diría que es más bien una semi erección - susurras, sintiendo como tus mejillas comienzan a arder de nuevo – no sé qué comienzo a pensar, pero... solo sé que... que no puedo... me da miedo, sé que tengo mucho miedo, y simplemente se baja - comentas.

Era vergonzoso admitirlo. Decirlo en voz alta te hacía sentir un fracasado. Pero era algo que sucedía desde hacía semanas, y tu terapeuta decía que no tenías que sentir vergüenza por contarle lo que te pasaba.

- ¿Qué sucede con los celos del omega?

Hiciste una mueca.

Hacía cuatro meses que vivían juntos. Desde que vivías con ellos, habías presenciado tres celos de Jisung, o algo así.

Cada vez que Jisung sabía que su celo estaba cerca, te avisaba –aunque realmente no necesitaba hacerlo con palabras, ya que comenzaba a usar el collar grueso y negro en el cuello para no der marcado-. Cuando eso sucedía, simplemente en esos momentos te ibas.

Alquilabas una habitación en los días que duraba el celo del omega, y cuando este terminaba, ya sea Hyunjin o Jisung, te mandaban un mensaje para que volvieras.

- Yo... bueno, ellos saben que yo... bueno, nunca les conté, pero creo que llegaron solos a la conclusión, o al menos tienen una idea - tratas de explicar, rascándote la nuca - me preguntaste porque venía hace dos meses... es porque, es que quiero poder darles lo que se ellos quieren de mi - admites, tus ojos ardiendo – yo también quiero, yo, bueno, quiero poder, quiero... quiero... quiero quedarme y hacerlos sentir bien sin sentir que... que yo estoy haciendo algo malo, incorrecto, o sucio.


[• • •]


Construyendo el amor - HyunMinSungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora