Construyendo el amor - HyunMinSung

Parte Final

Sales del cuarto en el que no sabes ni cuánto tiempo llevas dentro. Arrastras tus pies que pesan toneladas, deslizándote, tu cuerpo levemente encorvado.

Miras con pereza al sillón, donde ves a Minho y sonríes, dejándote caer hasta quedar recostado contra el mayor, poco a poco llevando tu nariz hasta su cuello, el cosquilleo familiar haciendo acto de presencia y terminando en un pequeño estornudo al sentir el familiar olor a naranja.

- Hyung... hoy huele muy dulce - susurras aun con tus ojos cerrados, refregando tu cara en el hueco entre su cuello y hombro.

- Hyunjin - dice Minho, y notas que su voz había salido levemente nasal, por lo que te fuerzas a alejarte, quedando sentado y miras al rostro del beta.

El mayor te mira con sus ojos brillosos y todas las alarmas se prenden en tu cabeza.

¿Le había pasado algo a Minho? ¿Se sentía mal? ¿Te tenía miedo de nuevo?

Oh... realmente esperabas que eso último no fuera. Dios sabe que no podrías vivir si el beta te temía.

- Pensé que era broma - susurró Minho con voz temblorosa.

- ¿De qué habla Hyung? ¿Se siente mal? - preguntas y la mirada de Minho baja hacia abajo, por lo que sigues el recorrido, mirando como en sus manos sostiene un test de embarazo.

Positivo.

- ¿Jisung está embarazado? - preguntas sorprendido, y es que recordabas que el omega había dicho que se estaba cuidando.

- Jisung no - responde Minho.

[• • •]

Minho llevaba tres meses de embarazo.

La noticia había impactado más al beta que a Jisung, quien cuando se había enterado unos meses atrás luego de que vos te enteraras, le había pedido perdón, lo cual te resultó hilarante, porque era obvio que el que había embarazado a Minho habías sido vos, no el omega.

¿Dónde se había visto que un omega embarazaba a un beta?

Solo Jisung podía ser tan extraño.

De todos modos, Minho pasaba varias horas del día en el hospital, y es que al ser un beta, y sobre todo un beta macho, corría un gran riesgo. Jisung era quien lo acompañaba la mayor parte del tiempo, y te dejaban al cuidado de Yeji.

No era la primera vez que se veía que un beta quedara embarazado a causa de un alfa puro, pero de todos modos, eran pocos los casos en lo que las cosas no se complicaban. Lo sabias, aun si Minho y Jisung no te contaran nada y dijeran que todo iba bien.

Veías como Minho lucía cada vez más ojeroso, como se veía cansado y sin fuerza.

Solo eso te hacía sentir la peor persona del mundo.

Te culpabas. Minho trataba de no quejarse, pero veías como sufría. Su cuerpo no estaba preparado para tener un cachorro, y a pesar de que tu alfa se había enojado contigo, le habías hasta sugerido interrumpir su embarazo.

Dios sabe que no podrías vivir sin Minho; Jisung no podría. Ustedes lo necesitaban, necesitaban al beta con ustedes.

- No es una opción Hyunnie, si lo peor llega a suceder, sé que ustedes cuidaran bien a nuestro cachorro - te había respondido Minho cuando lloraste en sus brazos a la madrugada, pidiéndole que lo hiciera, que lo interrumpiera.