𝐑𝐔𝐍, 𝐆𝐈𝐑𝐋────𝐓𝐇𝐄 𝐌𝐀𝐙𝐄 𝐑𝐔𝐍𝐍𝐄𝐑

17 | PREPARED

La reunión estalló en un coro de discusiones. Newt caminó lentamente hasta Thomas, lo tomó del brazo y lo llevó a la puerta, con Megan siguiéndolos.

--Ahora vete.

--¿Irme? ¿Por qué?--preguntó sorprendido.

--Pienso que ya hablaste más que suficiente para una reunión. Debemos conversar y decidir lo que vamos a hacer sin que estés presente--le explicó, empujándolo con suavidad hacia afuera--. Espérenme junto a la Caja. Cuando esto termine, tendremos una charla.

Comenzó a darse vuelta, pero Thomas lo sujetó del brazo.

--Newt, tienes que creerme. Es la única forma de salir de aquí. Te juro que podemos hacerlo. Tenemos que hacerlo.

Newt lo miró y le susurró con voz ronca.

--Ya lo sé, la parte que más me gustó fue cuando te ofreciste para morir.

--Estoy totalmente dispuesto a hacerlo.

Megan lo miró horrorizada, podría sonar egoísta o desalmada, pero prefería que alguien más se ofreciera a hacerlo en vez de él.

--¿Por qué?--preguntó Megan una vez que se encontraban caminando hacia la Caja.

--Tengo muchas razones personales para hacerlo. Además, en cierta forma, estamos aquí por mi culpa--se detuvo y tomó aire para calmarse--. No soporto saber que arruiné tu vida--se lamentó, mirándola con los ojos cristalizados.

De pronto, los ojos de Megan se inundaron de compasión.

--Tom, si es cierto que colaboraste en la creación del Laberinto, no es tu culpa. Eras un niño, te obligaron a hacerlo--sabía que no podía quitarle el sentimiento de culpa, pero quería que supiera que ella no lo creía totalmente responsable.

--Siento como si.... tuviera que salvarlos a todos. Para redimirme.

Megan sacudió su cabeza, sonriéndole.

--Tom, ¿sabes qué es lo gracioso?

--¿Qué?--preguntó, con cautela.

--Yo realmente te creo. No hay ni una pizca de mentira en tu rostro. Y no puedo creer que vaya a decir esto--hizo una pausa--, pero prefiero luchar contra los Penitentes antes que quedarme sentada permitiendo que se lleven a uno por uno--aseguró Megan y luego levantó el dedo--. Pero escúchame una cosa, no quiero ni una maldita palabra más acerca de morirte y de todo ese plopus. Me vas a hacer llorar. Si lo hacemos, todos vamos a correr los mismos riesgos. ¿Está claro?

Thomas llevó las manos hacia arriba, sintiendo que se había sacado un peso de encima.

--Como el agua. Yo solo trataba de decir que valía la pena correr el riesgo. Ya que de todas maneras alguien va a morir cada noche, me pareció que al menos podríamos aprovecharlo.

Megan se puso seria otra vez y rodó los ojos.

--Qué comentario más alegre.

Se sentaron en el pasto, frente a la Caja y se quedaron mirando hacia las Puertas.

--Si Newt los convence, creo que sería mejor ir de noche, es posible que muchos de los penitentes estén vagando por el Laberinto y no cerca de la Fosa.

--Buena esa--contestó Thomas con un gesto de aprobación.

Megan apenas esbozó una sonrisa en su cara de preocupación, tragando saliva.