°•°Bajo la sombra del Cerezo°•°

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"En la lluvia y en la angustia"

Pasaron entonces si n par de días más donde el sol estuvo escondido casi todo el tiempo, el cielo estaba nublado casi todo el día y aveces aires fríos soplaban en el ambiente, sin embargo la lluvia no había caído hasta ese momento.Durante la noche nubes oscuras empezaron a invadir la inmensidad del cielo infinito tiñiendolo de gris, truenos que sonaban como tambores y ráfagas de luz era parte de ese fenómeno natural, había mucha oscuridad en el ambiente y la temperatura había bajado abruptamente en un tono mucho más frío y desolado, pronto empezó el calvario cuando los truenos y relámpagos tomaron más fuerza y sonaron por todas partes haciendo vibrar incluso el suelo, pronto las gotas frías caían en el suelo y poco a poco empezaron a tomar más fuerza envolviendo todo el lugar en la fatiga, y en la más profunda desolación.

Pronto las gotas empezaron a filtrarse por el pequeño agujero en el suelo , si bien era un medio muy útil para poder beber , era muy probable que muriera por la inclemencia del clima que poco a poco era más violento si se quedaba ahí, pero tampoco tenía a dónde ir, tenía mucho miedo de entrar a aquella estructura, temía que tan solo entrar ahí era posible que le atravesarán con esas armas peligrosas , pero tampoco quería estar en el frío y la desesperanza que estaban sometiendo a la naturaleza , tomó una bocanada de aire y salió corriendo bajando por la colina, sintiendo como la lluvia la bañaba y el frío la golpeaba , debido a la intensidad de la lluvia el suelo estaba resbaloso y no pudo evitar caer en las piedras que habían estaban amontonadas en la entrada lastimando sus rodillas y parte de sus piernas. Un quejido de dolor escapó de sus labios al sentir el ardor de sus heridas , poco a poco se acercó a regañadientes a la puerta principal a la residencia donde tanto puertas y ventanas estaban cerradas , probablemente debido a la intensidad de la lluvia. Cerca de la residencia habían cosechas y pequeños jardines que se veían sometidos por el viento y la tempestad, pero grande fue su sorpresa al ver qué debajo de la casa había un poco de espacio para esconderse debido a que la estructura era elevada.

— hace frío — pronunció la jovencita abrazándose asi misma , vio que debajo de la casa estaba lo suficientemente oscuro como para pasar desapercibida al menos por esa noche donde asechaba el peligro y la desesperanza ,entro a la parte baja de la casa en el área del subsuelo donde el agua no entraba y se acurrucó ahí escondiéndose De quien pudiera, el sonido de las gotas chocando contra el techo se prolongó junto al canto oscuro del viento y ella solo quedó ahí escondida para escapar al día siguiente al lado del amable cerezo que también estaba siendo abatido en la lluvia y la angustia.

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— Parece que lloverá un tiempo más — comentó Yamatonokami cubriendose con una bufanda. — si alguien debe salir a alguna misión deberá usar el dispositivo que está en el subterráneo.

— no hay problema, no me gusta mojarme así que si el amo se le ocurre enviarme de expedición estaré agradecido mientras sea por dentro. — comentó aliviado mientras pintaba sus uñas de un bonito color rojo — ¡Mira! ¿No se ve bien?.

— ¿Es bonito no?.
— ¡Oye! ¿Puedes darme un alago más específico? ¿No notas algo diferente en mis uñas? ¡Esfuérzate un poco más!. — sonrió divertido al ver como su hermano entrecerraba los ojos tratando de buscar la diferencia.

— uh ... El color.. ¡Es diferente!.
— ¡Exacto! ¡Tengo que ser más lindo para que el amo quiera utilizarme! ¡Una espada debe verse bien para el ojo del amo!.

Un par de golpes de escucharon en la puerta corrediza y un joven entro por ella, ambos se pusieron de pie y reverenciaron al joven que había entrado con un par de dulces para acompañar el té.

— ¡Amo! ¡Que gusto verlo!.

— ¿Esta todo bien? El clima está muy frío allá afuera . — comentó con una sonrisa mientras servía té para sus subordinados acompañado de unos dangos.

Yasusada envuelto en júbilo se acercó a la mesa tomando un poco de los dulces y metiendo los a su boca para saborear el dulzor del azúcar de la capa superficial y la pasta del relleno.

— ¡Amo, usted es el mejor! .

— ¡Yasusada, no seas mal educado!. — regaño a su hermano mientras servía el té.

Ambos en compañía de su amo conversaron cálidamente mientras escuchaban la tempestad de la lluvia, pronto las luces empezaron a parpadear debido al viento y pasados un par de minutos la luz se fué debido a la fuerza de la tormenta.

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Por lo general lo poco que había visto del bosque era agradable, flores, árboles y pequeñas bolitas de colores que habían sido un agradable alimento junto al cerezo habían conformado un pequeño paraíso, sin embargo en esa situación el temor y la desesperanza acariciaba cada centímetro de su piel y enrollaba lo profundo de su alma aunque todo esto eso martilleaba junto al peligro de ser encontrada y la mataran por pensar en ella como un peligro hacia que todo se pintara del color del infierno , pero al final de cada tormenta y tempestad, seguía siendo un paraíso.

Dió un vistazo hacia las flores del jardín que se movían en ritmo del viento, aún entre todos esos límites temporales las pequeñas bellezas naturales conservaban su ternura y delicadeza en cierta desesperada honradez por mantenerse tal cuales eran, bellas.

Poco a poco empezo a sentir pesar en sus ojos y tan lentamente como caemos dormidos la pequeña jovencita quedó dormida al igual que las luces de esa gran casa ante la fuerte lluvia.