—Hija que bueno que... —mi abuela me vio y apretó los labios— ¿Qué pasó? —Ya no tengo novio... —ella se acercó poco a poco— soy una estúpida —No lo eres hijita —me abrazo— eres joven y estas cosas pasan —Pero duele —ella me guío al sofá de la sala y nos sentamos— Me recosté en sus piernas y empecé a llorar, mi abue solo me acariciaba mi mejilla y mi cabello. —¡Abuela! —se abrió la puerta principal y entro Ozzy— ¿Se enfermó? —Le terminaron —mi abuela lo dijo y retome mi postura— vamos a cenar Cenamos mientras Ozzy nos platicaba como le fue en su carrera, el estudia arquitectura y es bueno, en fin seguimos cenando hasta que mi abuela trajo una charola con güafles. —Terminaste al idiota ese —no dije nada— venga era un idiota —Era el único que me daba atención —mi abuela nos ví sin decir nada— era el único que se interesaba por mi —Pues consíguete a otro haber si para eso sirves —el empezó a reírse— —Deja a tu hermana —mi abuela nos vio— se suponen que son hermanos, se deben querer... —Ozzy me vio— es tu hermana y la tratas fatal Ozzy —Si tan solo ella hubiera muerto todo estaría bien... —Somy ve a tu habitación —¡¡Te odio, ojalá un día te mueras y dejes de joder mi vida!! —me levanté del comedor y subí al segundo piso— Entre a mi habitación la cual estaba ordenada supongo que mi abuela la organizo, me senté en mi escritorio y abrí mi ordenador.
Los recuerdos de la escuela, de lo que acaba de pasar y de toda la mierda que me a pasado invadieron mi mente, estaba tan frustrada nunca me he expresado de la mejor forma siempre callo todo pero ya basta de esto ya no más.
Me levanté de golpe del escritorio y avente todo lo que había en el, los libros, lápices y el ordenador. Cuando ví al costado derecho estaba la foto de la supuesta familia que algún dia fuimos, la tomé y avente, los vidrios quedaron en el piso.
Mi escritorio quedó vacío sin nada ví mi habitación y me di cuenta que ya no quería está basura de habitación todos los malos recuerdos estaban aquí.
*****
Sábado.
Sábado de estar recostada en la cama.
Ya solo falta una semana para que porfin salgamos de vacaciones e irnos a pasarla bien. Estaba sentada en mi cama cuando entro mi abuela y vio todo lo que hice en la noche. Se acercó a mi y vio mis brazos, solo negó a lo que yo aparte mis brazos. —Que fue lo que te hiciste cariño —Mira abuela esto es cosa que no te incumbe —ella se aparto— no quiero que te preocupes por lo que me pase —Hija —No abuela, sabes —me levanté de la cama— ya me canse y bueno solo quería sacar mis sentimientos —Esta bien hija —acomodo su cabello blanco— pero andando que está habitación no se remodela sola —¿Lo haremos? —ella asintio— abuela eres la mejor... Mi abuela se quedó unos minutos más y vendo mis muñecas para después salir a desayunar. Me bañé, me duché y salí para ponerme algo un poco cómodo un pants y una sudadera, no me puse ni una sola gota de maquillaje. Mi abuela y yo salimos aún Home Depot para comprar pinturas y cosas para mi habitación como cortinas y cobijas nuevas. —¿Negras? —Si abuela —tome las cobijas— me gustan —Bueno —lo fuimos a pagar— Siempre he pensado que las abuelas son las personas más comprensibles y consentidoras de este planeta sé que no todas son así pero la miel así que no es a pesar que sabe que mi padre no es el mejor padre ella siempre intenta estar ahí para nosotros sabe que no nos llevamos bien Y pues intenta mejorar esa convivencia entre mi hermano y yo aunque no se podría sabes, él y yo no nos llevamos desde que él empezó a culparme por la muerte de mamá solo tenía 3 años cómo sería yo la causante de una muerte siempre ha dicho que si yo hubiera muerto todo estaría bien a veces siento como si él despreciara saber es un sentimiento que duele es un dolor que está ahí permanentemente está dentro de ti y cuando alguien te lo toca eso explota y te decae te derrumba y se siente como la mierda.
Llegamos a casa y bajamos las cosas para subirlas a mi cuarto. Entré a mi cuarto y fue como ver un vistazo adentro de mí.. Todo desordenado, la cama destendida, mucha basura por el piso; Observé unos segundos y supe que tengo que hacer un cambio también dentro de mí, no solo en mi habitación y no solo con las personas también yo tengo que cambiar, tengo que darme mi lugar como persona, tengo que hacerlo porque eso de que me pisoteen y hagan conmigo lo que quieran se ha acabado que todos sepan que se ha acabado esa etapa de mi vida ya no me gusta esta mierda que estoy sintiendo... no me gusta cómo me hacen sentir todos.
Pasamos la tarde del sábado a bailando mi habitación pintando las paredes a pesar de que mi abuela tenga 73 años aún hace cosas sin cansarse claro que la tengo que ayudar pero pasar tiempo con mi abuela es como una escapada de todo lo que me ha pasado en este tiempo. —Abuela me a tronado la rodilla —ella me vio y empezó a reir— —A tus 16 años ya te truenan los huesos, como vas a estar a mi edad —No sé si llegué abue —nos sentamos en la cama— a quedado bien —Es mucho negro pero si haci lo quieres es tu decisión —me abrazo— que este cambio también te ayude a ti —Veras que si Abu —sonrei— sabes, deberíamos pedir la cena —¿Pollo KFC? —¡¡ME ENCANTA LA IDEA!! —sali para ordenar la cena— Espero que mi abuela nunca muera porque en verdad no sé qué haría sin ella.
La amo mucho es mi Abue, la señora que aún cree que su nieta está bien y no tiene pensamientos negativos.
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