Como si fuera la primera vez

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Ya estaba atardeciendo y Shikamaru por fin se había librado de sus deberes, normalmente le gustaría llegar a su casa y dormir pero ahora quería ver a su rubia favorita, aunque no había gran distancia que los separara ambos estaban muy ocupados y no podían verse tan seguido, eso le molestaba.

Supuso que estaría en su habitación de hotel durmiendo así que se dirigió allá, el camino fue algo silencioso, solo eran el y sus pensamientos mientras miraba el cielo, las nubes empezaban a "desaparecer" por la oscuridad del cielo.

Pensaba en lo rápido que pasó el tiempo, hace 3 años fue cuando su reencuentro con Temari se llevó acabo, en ese tiempo tenía 16 años. Se le hizo curioso como desde un inicio se entendieron tan bien, siempre estuvo esa conexión.

Aún recordaba la primera vez que recibio un beso de su parte, fue en la mejilla y ese día no pudo dejar de pensar en eso, ahora se casaría con ella en un mes, parece que Temari no es la única nerviosa.

Sus pensamientos hicieron que pasara rápido en tiempo, en un abrir y cerrar de ojos ya se encontraba delante de la puerta de su habitación, se limitó a solo tocar.

...

El escuchar la puerta siendo tocada hizo que la rubia despertara de su siesta, no tardó mucho en dirigirse a ella y abrirla, ahí lo vio a él, la tomó por sorpresa ya que pensó que ese día no se verían, estaba despeinada y echa un desastre pero lo que mas le preocupo fue que su vestido estaba a su vista, rápidamente le tapó los ojos. — ¿Lo viste?

El estaba confundido, no entendía a qué se refería, el solo la estaba mirando a ella. — ¿Qué cosa? — Preguntó el chico de igual forma.

Temari solo cerró la puerta y lo escondió bien, no quería que el lo viera, luego solo escucho su voz a través de la puerta. — Alístate, te llevaré a cenar. — Se escucho por parte de Shikamaru, ella sonrió, tenía hambre.

Poco tiempo después la rubia salió de la habitación, salieron juntos del hotel y se dirigieron al restaurante de BBQ, sabía que a ella le gustaba mucho. — ¿Descansaste bien? — Preguntó el chico mientras la tomaba por la cintura.

Ella asintió con la cabeza. — Si, desde temprano había estado con las chicas, duramos horas buscando el vestido para la boda pero al final encontré el indicado. — Dijo con una sonrisa.

— ¿Así que eso era lo que no querías que viera? — Como respuesta consiguió unas risas de su parte.

...

Ya se encontraban comiendo en el restaurante, mientras lo hacían tenían una agradable plática en donde recordaban con nostalgia varios momento. — Me es gracioso como antes eras un Chūnin inexperto y ahora ya eres todo un Jōnin prodigio, te superaste a tú mismo. — Dijo Temari con algunas risas de por medio.

— Cada vez tengo más obligaciones, es un fastidio pero no me queda más que dar lo mejor de mí. — Respondió el chico que en su infancia solo quería ser una nube para no hacer nada en todo el día.

Mientras comían se dejaron ver unas caras conocidas, eran Naruto y Hinata, los saludaron con gusto y los invitaron a comer con ellos. — ¿Como van con la vida de casados? — Preguntó Temari con una sonrisa.

— Me acostumbre a ella muy rápido, saber que veré a Hinata siempre que llegue a casa es lo mejor. ¡De veras! — Respondió Naruto, Hinata solo río un poco por sus palabras.

Después de un rato empezaron a tomar un poco de sake todos, todos menos Hinata, sabía que no era muy fan de tomar alcohol pero nunca rechazaba un trago. — ¿Hinata no quieres un poco de sake? — Ella negó algo apenada.

Después la pareja cruzó miradas y decidieron soltar lo que tenían entre manos con una sonrisa. — No creo que al bebé le guste que tome sake. — Después de decir eso los dos se quedaron sorprendidos, solo se escuchaban felicitaciones de su parte.

— Felicidades a los dos, estoy seguro de que serán unos excelentes padres. — Dijo muy seguro Shikamaru.

Naruto asintió con gratitud. — Aún falta mucho para que conozcamos a nuestro bebé pero el tiempo está pasando rápido.

— ¿Cuantas semanas tienes Hinata? — Preguntó curiosa Temari.

— 6 semanas, pero nos enteramos apenas hace unos días. — Se veía muy feliz diciéndolo.

Siguieron disfrutando de la comida, ahora la cena se había convertido en una celebración para los dos próximos padres, cuando terminaron de cenar se despidieron las dos parejas y cada quien siguió su camino. Mientras los prometidos se encontraban caminando por las calles de Konoha mantenían una conversación.

— No se que haría sin Yoshino, planear una boda es muy difícil. — Dijo la rubia con pesadez, el río un poco.

— Las dos lo están haciendo muy bien, estoy seguro de que todo saldrá como lo imaginas. — Sus palabras la tranquilizaron un poco. — Pasado mañana tendré el día libre, ¿Quieres que salgamos a ver casas en venta? — Ella asintió con felicidad.

— Por fin le despediré de esa habitación de hotel, una casa propia suena bien. — Shikamaru río un poco.

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Cada vez más cerca de la vida de casados, espero les gusten todas las actualizaciones.

También decirles que empecé con una historia NaruHina la cual está en mi perfil, si le dieran la oportunidad estoy segura de que les gustara ;)

Siguiendo tu sombra..Donde viven las historias. Descúbrelo ahora