DOS CACHORROS, DOS ALFAS

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-Build-

Movía mis piernas rápidamente, al igual que frotaba mis manos sobre mis propios brazos intentando conseguir un poco de calor, pues a pesar de tener el abrigo del Señor Bible la humedad de mi ropa hacía imposible mantenerme cálido.

— Ten toma esto. –dijo el Alfa mirándome fijamente mientras extendía un vaso de café.

Miré el vaso por algunos segundos y después lo tomé solo por cortesía pues el café no era de miagrado.

Mi espalda chocó con fuerza con el respaldo de la silla en la que me encontraba sentado cuando, lo vi ponerse de cuclillas frente a mí.

— No te haré nada. – susurró y yo tragué pesado.

— Gracias... - él sonrió y suspiró. – por ayudarme.

— Te dije que lo haría ¿no? – mordí mi mejilla interiormente.

— ¿A cambio de qué? – pregunté nerviosamente y sus ojos se volvieron solo un tono más claro.

— Solo confía en mí. – susurró – No te haré nada, no espero nada a cambio solo quiero ayudarte. – miré el contenido del vaso el cual tenía entre mis manos. – Tómalo aún está caliente...

— No...

— Juro que no puse nada en él, bueno solo azúcar. – sus palabras me hicieron sonreír. – Es la primera vez que sonríes. – dijo y yo le miré para sentir como mi rostro comenzaba a sentir calor.

— Bueno últimamente no tengo mucho por lo cual sonreír. – susurré más para mí.

— Bueno yo haré que esa sonrisa aparezca más seguido. – nuestros ojos volvieron a conectarse y sentí a Omega gruñir molesto.

~Está coqueteando con nosotros.

Carraspeé mi garganta y me enderecé un poco.

— Lo siento si te incomodé. – dijo y yo negué mirando al suelo nuevamente. – Bueno yo regreso en un momento. – dijo y yo lo miré asustado. – Tranquilo solo iré a la entrada. – mordí mi labio internamente y él suspiró. – Regreso, no te preocupes, no te dejaré.

Aquello último fue como una promesa, como muchas de las que había escuchado en el pasado y de las cuales ninguna había sido cumplida.


-Bible-

Caminaba por el pasillo hacia la salida cuando recibí un mensaje de Khao, avisándome que ya se encontraba en la entrada con las cosas que le había pedido.

— Hermano... - dijo dando unos pasos a mí

— Khao. – dije y el extendió una mochila hacia mí. – Gracias.

— También te traje esto. – dijo dándome una bolsa de papel de un restaurante de comida rápida. – Son unos emparedados para que cenen, Té caliente y para ti un Café. – le mire atentamente.

— ¿Té? – pregunté y él suspiró.

— A muchos Omegas no les gusta el sabor del Café. – dijo y recordé a Build quien solo miraba el vaso que le había entregado. – Eso pasa cuando sales con puros Alfas. – dijo y yo arrugué el entrecejo. – Bueno me voy, Boun está de malas y espera en el auto. – suspiré.

— Por favor sean cuidadosos con ellos, los extraños no les gustan. – Khao sonrió y asintió.

— Lo tendré encuentra, te llamaré cuando ya los tengamos. – asentí y él se giró para salir.

Me giré regresando por el mismo pasillo cuando vi a Build quien corría hacia mí.

— ¿Qué sucede? – pregunte mientras él llegaba al frente de mí.

SÁLVAME DE MI INFIERNO - BIBLEBUILDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora