LA NOVIA DEL ALFA MENOR

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-BOUN-

Khao había heredado sin dudarlo la personalidad dinámica y explosiva de mi abuela quien podía hacer amigos en el lugar que fuese y sus amigos eran todos idénticos en parte a él. No tenían problema con convivir con otros, por lo que no les era incómodo estar en mi casa en estos momentos.

— Tu abuela cocina delicioso. – dijo uno de ellos haciendo a Khao sonreír.

— La mía ni me quiere. – dijo otro haciendo reír a todos ellos.

Sin duda sabían cómo hacer de un ambiente pesado algo lleno de colores.

— P'Boun... - miré a Prem quien intentaba alcanzar su vasito.

— Ten, pequeño. – dije acercándoselo y mirando como bebía de el tranquilamente.

— ¡Abua! – todos miramos a Boss quien comía en su sillita mientras Irene la esposa de Jeff lo alimentaba a cucharadas pues por el momento sus padres estaban teniendo nuevamente una crisis.

~Como todos los días...

Sí, como todos los días...

El sonido del timbre nos hizo mirar a todos hacia la puerta observando como Khao se levantaba para caminar a ella mientras me daba una mirada rápida la cual comprendí del todo hasta el momento que abrió esta.

Nunew y Earth entraron con esa característica sonrisa que poseían, lo primero que hicieron fue entregarle un par de regalos a mi hermano que agradeció el gesto, para después colocar su mirada en mí.

— P'Boun, son sus amigos... - dijo Prem y yo suspiré.

¿Lo son?

Mientras los miraba acercarse a la mesa intentaba no soltar un gruñido o hacer algún gesto que diera a entender lo extrañado que estaba de esto.

— Bienvenidos, chicos. – saludó el abuelo.

— Gracias, señor Sumettikul. – dijeron y solté un pesado suspiro.

— Terminé... - susurré mientras tomaba mi plato y me alejaba de la mesa.

— Boun... - miré a Khao quien sonrió y después miré al par de Omegas que tenían la atención en mí.

— Phi, yo también terminé... - dijo Prem y sonreí.

— Siéntense aquí... les serviré. – dije mirando al par que sonrió y asintió frenéticamente. – Ven, bebé, acompáñame.

— Sí, Phi. – dijo mientras me pasaba sus platos.

— Boun...

— Más tarde... - dije y Earth asintió.

Ambos entramos a la cocina sin percatarnos que Khao nos seguía por lo que gruñí en su dirección mientras él solo mantenía una sonrisa.

— No me veas de esa forma... - dijo

— ¿Qué pretendes?

— ¿Yo?... la idea fue de Prem. – miré al cachorro quien sonreía.

— ¿Por qué?

— Todos nos dimos cuenta de que la estabas pasando mal respecto a ellos.

— Sí, P'Boun, yo no quiero que esté triste... ellos son sus amigos. – solté un pesado suspiro y miré a Khao.

— Lo que sea que haya ocurrido háblenlo.

— Bien...

Una vez serví ambos platos, Khao me ayudaba con ellos mientras Prem llevaba un par de vasos limpios.

SÁLVAME DE MI INFIERNO - BIBLEBUILDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora