CAPÍTULO DOCE.
la cornucopia.*
Antes de que mi nombre saliera en la cosecha y estuviera a horas de entrar a los juegos, había muchas más cosas a las que les tenía miedo: le temía a los dentistas, a los tiburones, a los roedores y bichos grandes, a las alturas y a los robos. Ahora, que mi situación es deplorable y un único miedo me acecha cada segundo, los demás parecen cosas de niños. Por supuesto, ante mí inminente muerte, sería un honor intercambiarla por una visita al dentista, lo soportaría. Sin importar cuanta fe pongan en mi personas como Columbae, Damon, Charles y Finnick, ellos no pueden asegurarme que volvería a casa, y yo tampoco estoy segura de querer volver. Puede sonar como una locura pero en realidad tiene bastante sentido, no me imagino volviendo a casa sin mi mejor amigo y sin mis nuevos compañeros. Quizá mezclar amistades con los juegos fueron la peor decisión que podría haber tomado, pero ya es demasiado tarde para arrepentirse.
Ahora sé que los padres de Jake murieron por una fiebre que azotó el distrito cuatro hace tres años, desde entonces él tuvo que encargarse de su hermano menor por su cuenta. Ahora sé que los vencedores del seis le regalaban a Kilyan montones de comida y ropa que él se encarga de repartir por todo su distrito intentando mejorar un poco su pésima calidad de vida. Ahora sé que Jake tiene una novia llamada Annie, una dulce chica pelirroja que lo acompaña en sus largas jornadas de trabajo e incluso aprendió a arreglar barcos para ayudarlo a ganar más dinero. Ahora sé que el hermano mayor de Kilyan era un rebelde que fue cosechado en los sexagésimos terceros juegos, y murió ante una pelea contra los tributos del distrito dos. Para mi desgracia, dos tributos dejaron de ser solo rostros aliados, ahora sé que son personas que merecen volver a su hogar tanto e incluso más que yo.
Por otro lado, la parte más egoísta de mi quiere volver a casa. Quiero volver a ver a mamá y seguir pasando fines de semana con películas y galletas, quiero pasar horas en el mar jugando con Lyos, quiero adoptar un perro y llamarlo Vinnie, pero sobre todo, quiero volver al distrito cinco, con Theodore. Desde que llegamos al capitolio no hemos tenido esa conversación. Por desgracia, ambos sabemos lo que haríamos por proteger al otro.
Porque si tuviera que dar mi vida por la suya, no lo pensaría dos veces.
—Columbae le dijo lo mismo a Theodore, y se que ambos lo tienen claro, pero me siento en el deber de repetirlo. —Damon habla en el ascensor, la hora de encontrarnos con Lahos para entrar a la arena ha llegado, y mi mentor sigue siendo un fantasma sin emociones. —En cuanto suene el cañón, corres tan lejos cómo puedas, te alejas del baño de sangre.
¿Por qué siento que piensa que no puedo seguir un consejo tan importante?
—Ni se te ocurra saltar antes de que empiece el juego, tu cuerpo volará por los aires en un millón de piezas. —Explica, lo observo con atención, quizá sea la última vez que pueda hacerlo. Damon es interesante, es considerado uno de los vencedores más aclamados y famosos en el capitolio por ser joven y atractivo. Además de todo eso, por lo poco que he conocido de él, puedo añadir que si bien es serio, amargado, cruel y extremadamente directo, también es, a veces, algo gracioso. Es inteligente de la cabeza a los pies y, aunque lo controle, odia tanto a Snow como todos en el distrito.
—¿Algún otro consejo? —Pregunto.
Damon asiente. —Sí notas algún comportamiento raro por parte de alguno de la alianza, por más mínimo que sea, corres. —Su voz se queda en mi cabeza por instantes, habla de la famosa traición que siempre se da en todas las ediciones con los profesionales. —Incluso si se trata de Theodore, si no puedes matarlo, lo dañas y huyes.
ESTÁS LEYENDO
GODDES OF THUNDER, finnick odair
Fanfiction"Un trueno solo no causa una revolución pero una tormenta eléctrica debería". Finnick odair x FEM!Oc ❪ hunger games ❫ ❪ © cleocupids 2023/24 ❫