Cristian Anthon

Capítulo 8

Sonó mi alarma. Las 6:35 de la mañana, aunque no quiera, decidí levantarme de mi preciada cama, fui al armario y cogí una sudadera que me quedaba un poco grande, me puse mis leggins negros y mis air max blancas. Me miré al espejo y me solté el pelo, largo y liso. Hoy no pensaba maquillarme nada, me puse mis gafas de pasta, por que si no no podría ver nada y bajé a desayunar. Estaba bajando los escalones cuando una risa familiar se escuchó. ''¿Cristian?'' pensé, bah serán imaginaciones mias. Baje la escalera y giré hacia la cocina. Y no, no eran imaginaciones, ahí estaba Cris. Me miró y seguidamente me sonrió. Mi madre empezó a reir.

- Que cara has puesto - dijo mi madre

- Hombre, - miré a mi madre - no suelo encontrarme a amigos por mi casa a las 6 de la mañana, ¿como quieres que reaccione? - dije

- Buenos días - dijo Cristian entre risas - He de decirte que eras muy mona de pequeña.

- ¡¿Que?! - me acerqué hacia la encimera - ¡Mama!

Todas, todas, todas las fotos de cuando era pequeña estaban en la encimera, miré a mi madre con cara de asesina mientras recogía todo aquello.

- ¡Eh eh! - dijo Cristian mientras me quitaba una foto de las manos - Esta es mía - dijo mientras se guardaba una en la mochila.

- ¡¡No!! - dije intentando quitarsela de la mochila, pero era imposible, sus brazos me impedian coger su mochila

- Natasha desayuna que son ya las 7 - interrumpió mi madre mientras que salía de la cocina y nos dejaba solos a Cristian y ami.

Asentí.

Cogí la leche y la vertí en un cuenco y también cogí cereales. Ese sería mi desayuno, a si que me senté en la islita de la cocina y Cris se sentó delante. Empecé a comer mientras que Cris me miraba. Cada dos por tres me sonreía y yo le ponía caras de confusión.

Terminé mi vaso de leche y lo dejé en la mesa.

- ¿Podrías dejar de mirarme y decirme que haces aquí? - pregunté

- Estoy aquí para llevarte al instituto en mi coche - dijo

- Ah.. ¿y por eso tenías que entrar a mi casa? No podías haberme dicho: ''A las 7:50 paso a por ti'' pues no.. el señorito viene a mi casa a las 6 de la mañana. - dije con tono burlon

Cristian rió y miró su movil.

- Anda ves al baño, cepillate los dientes y lavate esos bigotes de leche que vamos a llegar tarde.

Obedecí, subí al baño y me lavé la cara, me cepillé los dientes y me eché perfume. Seguidamente bajé las escaleras y cogí mi mochila.

- ¡Adiós mamá! - alcé la voz haciendo que se me oyera por toda la casa.

- ¡Adiós chicos! - gritó mi madre.

Salimos de casa y nos montamos en el coche. Eran las 7:43 a si que llegaríamos bien. El camino se nos hizo corto, no hablamos apenas. Cuando llegamos al instituto, aparcó el coche y fuimos a la entrada, se despidió de mi con un beso en la frente y me dijo '' Nos vemos luego pequeña'', asentí y fui directamente con mi amiga.