10

170 12 2
                                    

Capitulo 10

Siento como la sangre me hierve, incluso empiezo a temblar de coraje. No soporto si quiera saber que ella habla con el, no soporto que piense en darle otra oportunidad, lo detesto porque le rompió el corazón, no soporto que haya salido con el esta noche, no soporto que la haya besado pero lo que menos soporto es que le haya tocado el trasero. No quiero a este cabrón cerca de ella y yo no lo voy a permitir.

—¿Tu quien carajos eres?—. Me dijo muy arrogante. ¿Quién se cree?

—¿Tío que haces aquí?

—¿Tío? ¿Este tipo es tu tío?

—Si yo soy su tío—. Le dije fulminándolo con la mirada, tome a Lali del brazo y la jale hacia mí.

—Awwch, me lastimas.

—Tú y yo nos vamos a casa ya.

—Suéltame—. Chillo tratando de zafarse de mi agarre—. Me lastimas.

—¿Qué no escuchas? que la sueltes idiota—. Maldito, que no tiente a la suerte porque justo ahora me siento con unas enormes ganas de embarrarle mi puño en su maldita cara.

—Cierra la boca idiota.

—Basta—. Grito y se zafo—. ¿Quién te crees tú para venir aquí y darme órdenes?

—Tu tío, eso me creo. Nos vamos ya.

—Yo no voy contigo a ningún lado. Yo vine y me voy con Pablo.

—Tú te vas conmigo y punto. Y tú—. Me dirigí al idiota ese y lo señale con el dedo indice—. No te quiero cerca de ella—. El idiota empezó a reír, no puedo creer que ahora se este riendo de mi, estoy por perder la poca cordura que me queda.

—Ya te dije que no, Pablo puede estar cerca de mi cuando quiera—. Listo me canse. Me agache y la tome de las piernas y la cargue sobre mi hombro, chillo cuando la levante, di media vuelta y empece a caminar de vuelta a mi auto.

—¡Bájame!

—¡¿Hey que te pasa?! Bájala ahora mismo idiota—. Me grito ese cabrón, solo gire y lo fulmine con la mirada, perfecto logre intimidarlo, mas le vale que se largue de ahí ahora mismo. Seguí mi camino.

Lali comenzó a pegarme en el trasero, pero esta tan ebria que ni fuerza tiene así que ignore eso.

—¡Que me bajes te dije!—. Empezó a patalear así que con una mano la tome de ambos tobillos para evitar que me pegue en mi parte mas noble, mientras con la otra mano la tome del trasero, pues el aire levantaba su vestido y no voy a permitir que algún idiota que ande por aquí le este viendo lo que no debe. Su hermoso y redondito trasero, me encanta y el solo recordar que ese cabrón se lo toco me da mucho coraje, gracias a dios llegue a tiempo que si no, no quiero ni pensar en lo que le estaría tocando ahora.

Maldito oportunista, se aprovecha de que esta borracha, seguro es lo único que quiere, llevarla a la cama, pero eso no lo voy a permitir nunca. Nadie le pondrá un dedo encima jamas.

Llegamos al auto y vi que Eugenia y sus amigos seguían afuera del canta bar. Al vernos todos giraron y nos observaban, genial, ahora somos el centro de atención, lo siento por Lali, mañana sera la comidilla de todos. Ella seguía chillando y peleando por que la bajara y así lo hice. La baje lentamente.

—Eres un idiota.

—Y tú una borracha.

—Como te atreves a cargarme como si fuera un costal o no se que—. Abrí la puerta del auto.

—Súbete.

—No voy contigo a ningún lado.

—Perfecto, tú lo quisiste—. La cargue en mis brazos y grito, la metí al auto y con un poco de trabajo logre abrocharle el cinturón de seguridad, pues ella seguía luchando conmigo. Loca, eso es lo que esta, completamente loca. Cerré la puerta y rodee el auto y subí. Metí la llave y lo prendí arrancando de inmediato.

En contra de todo Where stories live. Discover now