Por la mañana, luego de escuchar el despertador miraba el techo, sentía mi garganta seca, mi corazón inquieto y mi cuerpo listo para correr pero intentaba ocultarlo con medicamentos, incluso vitaminas o sustitutos de carne como el huevo, legumbres o pescado pero esa picazón en mi nuca solo me hacia recordar lo que yo era... Un carnívoro, con problemas de autocontrol.
Las terapias que tomaba eran bastantes y muy diversas, incluso me sugirieron no ir a un colegio mixto dada mi condición pero mis padres al ser personas importantes en las relaciones públicas, insistian en que debía asistir y que no pasaría nada, ya que "era un buen chico", "alguien tranquilo" e incluso "inofensivo" pero cada que podía, mi mente solo pensaba en... ¿Cómo sabría la carne y sangre recién obtenida de alguien?, no importaba quien, pero lo necesitaba, deseaba poder probar aquello por lo que los antepasados se volvían locos... Y no me refiero a la carne sino, a la presa, saber que conjunto de aroma, sabor y textura tendría, el cómo se sentiría experimentarlo o disfrutarlo era realmente una fantasía tentadora incluso en sueños pero...
solo se mantenia como una fantasía, algo que no era posible, o accesible para mi, o almenos eso pensaba... En los vestidores donde me ponía mi uniforme para poder jugar en el gimnasio se me acercó un carnívoro muy conocido y popular, llamado "Bill", el se acerco a mi y noto mis rasguños en la espalda, asi que cuando todos se fueron me mostró un frasco y lo abrió sin más.
De inmediato sentí un cosquilleo en mi nariz, mi boca empezó a emocionarse y cuando menos me di cuenta aquel pequeño frasco se había vaciado en mi boca regalándome una de las sensaciones más saciadoras y tentativas de mi vida, pero también al percatarme de lo que habia ingerido corrí a un inodoro y termine vomitando todo sin más.
—Lo sabía, eres uno de los míos... No podemos ignorar a la naturaleza, ¿verdad?— dijo con una sonrisa ladina mientras guardaba el frasco —No deberías de resistirte a esto Riz, si fuera algo malo, ¿por que nuestro cuerpo reacciona de forma tan impulsiva?— me tiró una tarjeta luego de decir eso y se fue a la cancha, yo solo me metí a la ducha y toque mi boca.
—Necesito más— murmure mirando el suelo y mire mi mano, necesitaba hacerlo de nuevo, beber más, conseguirla de donde fuera, no podía vivir de nuevo sin volver a disfrutar de ese manjar, pero ahora, era un hambre aún mayor, más profundo y más exigente, lo necesitaba vivo... Estos pensamientos, realmente solo confirmaban una cosa: Nunca sería normal, yo no podía luchar contra mi mismo, no podía hacer algo así.
Salí de las duchas y me vesti para ir a mi habitación, no podía concentrarme en nada más, no debía hacer algo sospechoso, solo irme lo antes posible, pedir un permiso para ausentarme e irme lejos. Pero a medio camino, escuché a alguien hablar, era Legoshi y Tem...
—¿Ellos son amigos desde hace tiempo, no?— pensé mientras me acercaba un poco escondiéndome detrás de un pasillo y me recargue para tratar de escuchar si Legoshi también tenía algún problema como el mio, pero... No era nada relacionado a Legoshi
—Yo... Quiero entregarle esto, por favor, dáselo de mi parte— decía Tem dándole una carta a Legoshi el cual luego de recibirla se fue.
Yo envidiaba a Tem en varios aspectos, pero lo que más envidiaba, era lo fácil que era para él hablar y comunicarse con los demás, no recibir miradas de odio ni miedo, solo... Lo miraban y sonreian, conmigo, giraban la mirada o apresuraban el paso.
—Eres realmente afortunado Tem...— Solte en un momento dejando un rasguño en la pared —¿Si como tu carne, podría ser tan feliz como tú?— pensé mientras me alejaba sin poder dejar de pensar en terminar de una vez con su vida fácil, eliminar su existencia y finalmente, obtener todo de él, que nadie más pudiera hablar de nuevo con él, solo quería desaparecerlo, a cualquier costo...
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INEVITABLE (RIZ×TEM)
Fanfiction¿Acaso las bestias se guían solo por instinto o hay algo más dentro de su ser que los orienta a actuar de maneras inesperadas? [La redacción mejora en el CAP 7]