INEVITABLE (RIZ×TEM)

XIII. Lo siento, Riz.

Al despertar, pude notar que me encontraba en un hospital, e incluso pude ver qué había policías afuera de mi habitación, me levanté sin que me notarán y me agache escuchando a través de la puerta sobre lo que hablaban.

—Lo sé, es una locura, si se sabe incluso podrían llegar a atacarnos, al parecer ha habido varios ataques de descendientes de carnívoros como nosotros en ese colegio...— dijo uno de ellos el cual era un zorro —En las cámaras pudieron ver a un lobo, un tigre, un coyote y también a un oso llegar a atacar a los que son descendientes de herbívoros, hicieron una simulación de incendio para sacarlos y que la prensa no se enterará del arresto de los que los atacaron...—

Era claro que el oso podría ser Riz o que incluso el lobo podría ser Legoshi, estaba preocupado y asustado por lo que podrían hacerle a cualquiera de ellos pero aún más sobre que pasaría si esto se sabía en todas partes... El odio y miedo se apoderarian de nosotros y eso a su vez crearía un caos aún mayor al creer que incluso alguien decente por ser de una especie clasificada como carnívora pudiera matar a alguien en cualquier momento.

Escuché pasos venir hacia mi habitación y corrí a mi cama para sentarme. Cuando se abrió la puerta ví a una enfermera empezar a revisarme mientras un oficial se sentaba a mi lado mirándome con atención.

—Supimos que tienes un amigo muy cercano, se llama Riz, ¿Verdad?— me preguntó de manera sería antes de dejar su cuaderno a un lado —¿Por qué no denunciaste la herida que te hizo?, lo que pasó aquella noche en el auditorio...—

Al escuchar eso me quedé frío, no sabía cómo se habían enterado hasta que mire que en su celular tenía un vídeo donde se ve la mano de Riz con sangre mientras me acorralaba en el auditorio, llegando a verse también cuando iba a morderme pero terminó mordiendo su brazo hasta que se calmó y pudo llevarme a la enfermería.

—Se que debe ser aterrador hablar de esto y que te pudo amenazar pero, debes hablar de esto y denunciarlo— continuó diciendo mientras yo veía el vídeo. —Solo dinos la verdad y te protegeremos—

Dicho esto yo solo mire el video y toque mi herida, pensé en que decirle pero estaba asustado por él... Mire al oficial y suspiré nervioso —¿Todo lo que hicieron, fue para atrapar a los que atacaron a otros, verdad?, ¿Dónde está Riz?— pregunté mirándole seriamente, quería respuestas pero el no parecía querer decirme nada.

—Se que pudiste llegar a desarrollar un afecto por él, aunque debes ser conciente de que puede ser algo similar al Estocolmo, debió ser algo que debiste aceptar para sobrevivir a él, ¿No es así?— pregunto mientras me miraba preocupado.

Yo solté lágrimas y negué —Él jamás me lastimaria, debe ser algo diferente algo ajeno a él, Riz no es malo, es muy dulce y sincero, por favor, debe investigar a Bill, el debe saber algo... Por favor, dígame dónde está Riz, deben escucharnos— suplique mirándole antes de que él bajara la mirada y se levantará.

—El joven Riz está siendo interrogado, harán unas pruebas e intentarán saber que está pasando... Tem, tu amigo es un descendiente de carnívoros, sabes la historia que conlleva eso.— me miro atento y me dejó su número —Si cambias de opinión, llámame—

Salió de la habitación y observé su tarjeta... No podía creer que en este momento él estuviera siendo tratado como un criminal y que entre los sospechosos ni siquiera estuviera Bill, debía saber que es lo que estaba pasando para poder ayudar a Riz y saber el por qué de todo esto antes de que fuera muy tarde.

Me vestí como pude y dejé la bata en la basura, salí de mi habitación mezclándome con otros visitantes del hospital hasta que pude ver a aquella gacela de la que hablaba Riz en una de las habitaciones, parecía preocupado pero también ansioso... Entre a su habitación y cerré la puerta mirándole.

—¿Llevaron a Riz al mismo lugar a dónde llevaron a Onhi?— me preguntó entre lágrimas mientras abrazaba una almohada contra su pecho, yo no sabía dónde estaba así que negué acercándome a él.

—¿Sabes dónde esta Onhi?, ¿Sabes si tenía alguna relación con Bill?— pregunté esperando su respuesta pero el solo ladeó la mirada tocando su mordida.

—No sé, dijeron que lo llevarían a psiquiatría pero sus padres no lo encontraron ahí... Algo raro está pasando— susurró preocupado —Pero sin duda va a estar junto a Riz y los demás...—

El sabía sobre lo que había pasado, sobre los demás, me acerque a él preocupado —¿Sabes lo de los demás?, ¿El lobo es Legoshi?— Pregunté para entender que tanto sabía. Inesperadamente el negó y suspiró —Es otro lobo... No hagas muchas preguntas Tem, podrías ponerte en peligro—

Salí de la habitación con cuidado y me dirigí a la sala de espera para buscar información, pregunté sobre Riz pero no estaba aquí, no sabía dónde más preguntar, me estaba quedando sin opciones o ideas. Cuando levanté la mirada pude observar a un médico moviendo sangre para transfusiones pero no al área de pacientes, sino hacia el estacionamiento.

Al seguirlo pude ver qué había otras personas ahí y empezaron a subir la sangre a una camioneta blanca donde estaba un tigre firmando algo, aunque cuando pude acercarme más note que en el asiento del pasajero estaba uno de nuestros profesores, que era el de deporte... Ellos se fueron y no parecía que fueran a un hospital... Esto estaba muy mal, esa sangre no iría a un hospital, había cosas muy raras...

Retrocedi para poder ir a buscar a un oficial pero choque con alguien, no supe quién era pero recibí un golpe tan fuerte que quede inconsciente nuevamente. Solo pude ver entre el recorrido a aquel lugar a dónde me llevaban luces de un túnel, algún tipo de coche y finalmente desperté en una especie de bodega. Podía escuchar pasos cerca, mis manos estaban esposadas y había murmuros que podía escuchar por debajo de la puerta, no sabía en dónde estaba, ni con quienes, no quería morir, pero lamentablemente todo indicaba que tal vez hoy mi vida estaría en peligro una vez más.

—Lo siento, Riz...— susurré soltando lágrimas —Debes estar más asustado que yo...— mordí mi labio escuchando pasos acercándose a mi, no supe que más hacer más que bajar la mirada, sentía como si estos fueran mis últimos momentos, no podía verme fuera de esta situación, solo quería cerrar mis ojos y volver a estar en esa banca del jardín junto a él mientras hablábamos de cosas tontas o quejándonos de la escuela —Perdon por no valorar esos momentos...— la puerta se abrió, y solo pude ver un destello seguido de un ruido ensordecedor que retumbó en ese pasillo tan oscuro y vacío...