Culiacán, Sinaloa | Tiempo actual
Arianna Fernández
— ¿Ya me vas a decir qué pasa? — Dije mirando a Teresa — Todo el camino te vi hablando por teléfono y susurrando cosas que no logro entender.
— Que Vicente te diga — Dijo y entro a la casa.
— Tere, ¿por qué tanto mi.. — Me quede callada al observar cómo se encontraba la casa.
Los muebles estorbaban nuestro paso, la pantalla estaba completamente rota y la ropa estaba regada por toda la casa. Sin olvidar las manchas de sangre y algunas balas.
— ¿Quién hizo.. qué pasó aquí? — Dije mirando asombrada la escena.
— Teresa — Escuché la voz de Vicente, quien emitía quejidos.
Ambas subimos corriendo las escaleras. Teresa inmediatamente corrió hacia Vicente, él se encontraba tirado en el piso y con una grande herida en su abdomen. Su cara estaba llena de sangre.
— ¿Quién te hizo esto, hermanito? — Dijo entre sollozos.
— Fue.. — Tosió — Fue Néstor. Néstor y su gente me hicieron esto.
— ¿Por qué?.
— Agarraron a Iván. Ahorita lo deben estar llevando para la Ciudad de México — Dijo Teresa.
Sentí como mi sangre se bajó al piso. Solté un suspiro.
— ¿Quién.. — Suspire — Fuiste tú, Vicente? ¿Seguiste con ese estupido plan de delatarlo? ¡Te dije que no siguieras buscándole más leña al fuego!,
— Lo hice por ti, para salvarte. Tú sabes que él y nunca nos iba a dejar en paz.
— Iván ya no iba a acercarse a mi. Yo se lo dejé muy claro la última vez.
— ¿Tú crees que él iba a hacerte caso? Tú sabes que el es capaz de todo con tal de tener lo que quiere — Tomo aire para seguir hablando — Yo, te quiero y nunca voy a quererte ver mal.
— Vicente, no debiste. Mira lo que lograste. Ahora estás aquí... — Teresa me interrumpió.
— ¿Que más da? ¡Mi hermano está grave y otra vez por ese pendejo! — Gritó Teresa — Él nunca nos va a dejar en paz.
— Teresa, cal.. cálmate.
— Voy a hacer una llamada — Avise y me aleje.
— No Vicente, no me voy a calmar. ¿Ves como a ella no le importas? No desaprovecho la oportunidad para saber cómo se encuentra su amado. Ella nunca va a quererte Vicente. Tú aquí, al borde de morirte por ella que no valora nada.
Me dolió escuchar eso de mi amiga, pero en parte me lo merecía. Todo este tiempo había estado dándole esperanzas a Vicente, había estado haciéndole creer que algún día podríamos formar un futuro juntos. Lo único malo que él ha hecho, es amarme y apoyarme infinitamente.
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Deseo | IAGS
Science FictionDeseo que nunca duermas con la incertidumbre si aun sigues siendo suficiente para tu pareja. Deseo que nunca tengas esa necesidad de comprobar su fidelidad. Deseo que tus ojos jamás se llenen de lagrimas al descubrir otra infidelidad