Deseo que nunca duermas con la incertidumbre si aun sigues siendo suficiente para tu pareja. Deseo que nunca tengas esa necesidad de comprobar su fidelidad.
Deseo que tus ojos jamás se llenen de lagrimas al descubrir otra infidelidad
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Tiempo actual | Badiraguato.
Un mes después.
Arianna Fernández
— ¡Feliz cumpleaños mi amor! — Bese sus labios tiernamente — ¡Que felicidad tenerte conmigo otro año más y los que faltan!.
— Gracias mi reina. Mi mejor regalo será siempre tener tu amor.
— Eso jamás te faltará mi amor. Yo siempre te voy a amar ante todas las cosas.
— ¡Muy enamorados! ¡Así me gusta verlos! — Alfredo se acercó a nosotros con Alondra, mi mejor amiga — Carnalito, feliz cumpleaños — Alfredo palmeó la espalda de Iván.
— Gracias Carnal. Te quiero.
— ¡Alo, te extrañe! — Corrí a abrazarla — ¿Cuándo pensabas venir a visitarme, mendiga?
— Yo también te extrañe, pero tuve que ir a Guadalajara a visitar a mis papás y presentarles a Alfredo — Abrazo a mi cuñado.
— ¿Y qué dijeron? — Los mire esperando una respuesta.
— ¿Te aceptaron carnal o te mandaron a la chingada? — Iván comenzó a carcajearse.
— Pue' al principio no les agradó la idea de tenerme como yerno, pero después no les quedó de otra más que aceptarte.
— ¿Y ustedes? ¿Cómo sigue su noviazgo? — Alfredo nos miró atento.
Iván y yo habíamos decidido dejar los preparativos de la boda. Para él no era importante casarse y en cierto punto llegó a pensar que le teme al matrimonio. Y yo por mi parte, tengo que hacer las cosas a su manera para que no haya problemas.
— Bien, mi chula y yo estamos mejor que nunca — Me abrazo por los hombros.
— ¿Y hoy qué plan?.
— Pues fiesta, carnal. Hoy se festeja el doble.
...
La noche había llegado en Badiraguato con ella la fiesta de Iván. Por el lugar se podía escuchar el grupo que amenizaba el evento.
Iván y yo nos encontrábamos terminando de arreglarnos para salir a saludar a nuestros invitados.
— ¡Mira, nomás que chulada de mujer la mía! — Dijo entrando a la habitación.
