012.

1.1K 136 23
                                    






" Planetas Olvidados y
Templos Antiguos "
✼  ҉  ✼  ҉  ✼


Even Piell nunca ha sido un creyente ferviente de las profecías. Cuando Qui-Gon Jinn llegó con Anakin Skywalker y afirmó que se trataba del Elegido, Piell, como muchos otros miembros del Consejo Jedi, se mostró escéptico. El muchacho sin duda posee las cualidades de un Usuario de la Fuerza muy poderoso, pero eso apenas significó algo en aquel momento. Un recuento alto de midiclorianos podría llegar a colocarlo en el nivel de Yoda, quizás, con la orientación adecuada. Pero, ¿ser el Elegido?

La profecía, en su punto máximo, no revela mucho sobre nada además de que el Elegido debe restaurar el balance en la Fuerza.

No es algo muy alentador, no lo fue entonces y no lo es ahora. Pero Piell no se había quedado enfrascado nunca en la profecía del Elegido, ni se obsesionó con ella, quizás porque no había estado en el lugar de Qui-Gon, ni tampoco en el de Obi-Wan, con respecto a su fe en Skywalker, siempre tan creyentes de que el niño se convertirá en lo que la profecía indica y lo que la galaxia necesita que sea, pero ahora Even está en un lugar similar al de ellos. En una versión mucho más fácil de creer, si Even se permite decir, porque Helia Potter definitivamente es alguien merecedora de una profecía de una forma en que Skywalker no lo fue en aquel momento para sus ojos y sentidos.

Tras verla practicar su magia –esa rama de la Fuerza–, lo difícil sería no creer en que ella formará parte de algo grande.

Y es tan fácil creer en ello que Even pone de lado momentáneamente su rango como General para buscar respuestas que le otorguen veracidad a la profecía olvidada. Los cuentos, antiguos y todo, son cuentos, en eso no se han equivocado sus compañeros Jedi, pero Even les dará forma y sentido.

Así que, después de todo lo que ha presenciado, después de todo lo poco que ha escuchado, Even no protesta cuando Yoda y Mace le proponen hacer una pequeña búsqueda.

Él va a donde todo comenzó: a las cenizas de los primeros, de los precursores, de todo aquel que ha murmurado a la Fuerza con pequeños rezos y ha ofrecido filosofía espiritual en su nombre.

Viaja a planetas llenos de grietas en la Fuerza y llanuras en vez de construcciones sólidas, de ruinas en lugar de muros y signos de prosperidad.

No es una tarea sencilla, y lo primero con lo que se cruza es pistas falsas o incompletas –como si sólo lo guiasen a medias–.

Los Archivos de los Jedi tienen registros de muchos lugares y mucha gente, pero son inservibles cuando se trata de los sentimientos de la Fuerza, cuando se trata de eso sólo se puede confiar en un Usuario de la Fuerza. En el caso de Piell, en sí mismo.

Le lleva un par de días percatarse de que lo que busca –aquello que pretende encontrar para entender la profecía– no se le mostrará en forma de palabras escritas en los Archivos o en los viejos textos que llega a encontrar en los lugares abandonados en los que los precursores dejaron parte de sí mismos y sus conocimientos de la Fuerza. Para empezar, no parecían saber más que los Jedi actuales sobre la Buscadora de Todo. O tal vez no se afanaron en grabarlo en ningún lado. Sea cuál sea la respuesta, Even no la tiene –o mejor dicho: no la encuentra en los vestigios de los antiguos adoradores de la Fuerza–, así que, por lógica, y un sentimiento, Even deduce que está sólo en la Fuerza misma.

Deja que la Fuerza lo conduzca hasta donde le alcance la mano, e incluso más allá de ser necesario.

A las penumbras de un mundo que ningún ser vivo ha pisado en demasiado tiempo.

Lo poco que logra captar de la Fuerza, al menos, le trae hasta aquí.

El planeta le recuerda a un cascarón oscuro y olvidado. No parece mucho desde la distancia –y la vista tampoco mejora cuando se acerca lo suficiente.

ENDLESS BURDEN  [HP][Star Wars]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora