Dos destinos (Reencarnación en Kung Fu Panda)

Peligro inminente

Días antes de que Kai llegara al reino de los vivos, en el palacio de jade, Po y los 5 furiosos llegaron para su habitual entrenamiento, pero Po recibió una noticia que no esperaba, y que no le agradaba del todo, a partir de ese día, él iba a ser el encargado de entrenar a los 5 furiosos.

No estaba de acuerdo, pues le parecía absurdo que él tuviera algo que enseñarles a los 5 furiosos, y justo como lo temía, así era.

En un intento por enseñarles algo nuevo, terminó haciendo un desastre total, dando como resultado que su primera clase fuera un total fracaso.

Después de eso, fue a hablar con el maestro Shifu, para informarle lo mal que le fue y que nunca volvería a enseñarles.

—Po: Sinceramente no sé porque creyó que yo podría hacerlo.

—Shifu: Nunca creí que podrías hacerlo.

—Po: ¡¿Qué?! ¿Quería que fallara?

—Shifu: Claro. Si solo haces lo que ya sabes hacer, no vas a llegar a ser más de lo que eres hoy.

—Po: Pero yo no quiero ser más. Me gusta lo que soy.

—Shifu: Tú ni siquiera sabes quién eres.

—Po: ¿Qué? Claro que sí, soy el guerrero dragón.

—Shifu: ¿Y qué significa ser el guerrero dragón?

—Po: Pues... que venzo a los malos... y protejo el valle... y cosas así.

El tono con el que lo decía parecía más de pregunta, era obvio que no tenía ni idea.

—Shifu: El maestro Oogway fue quien te eligió, en contra de mi criterio. Él vio grandeza en ti, más de la que vez tú.

Po no parecía estar del todo convencido.

—Shifu: Po, tú estás destinado a algo mucho más grande de lo que te imaginas.

Al decir eso, juntó sus dos palmas, deslizándolas entre sí. sus manos brillaron con un tono amarillento, luego apunto con ambas palmas a una flor que estaba por marchitarse, pero de pronto la flor comenzó a brillar y recuperó su vida.

—Po: ¡Wow! ¡¿Qué fue eso?!

—Shifu: Eso fue el chi.

—Po: ¿Chi?

—Shifu: El chi es la energía que fluye en todos los seres vivos.

—Po: Ah, por eso Gelián también podía hacerlo.

—Shifu: Espera, ¿qué? ¿Gelián puede usar el chi?

—Po: Es que cuando enfrentamos a Shen y destruimos sus barcos, él estaba diciendo algo sobre el chi, aunque no le entendía, pero con eso fue que él detuvo los ataques del arma de Shen.

—Shen: No puedo creerlo. ¿Y por qué no dijiste nada en todo este tiempo?

—Po: No me preguntó.

—Shifu: ¡¿Y cómo esperas que pregunte si no tenía idea de que...?!

El maestro Shifu trató de calmarse, respiró profundamente y suspiró.

—Shifu: Eso solo es una razón más grande para que sigas intentándolo. Para poder dominar el chi, el maestro Oogway estuvo 30 años en una cueva preguntándose una sola cosa, "¿Quién soy yo?".

—Po: ¡¿Tengo que estar 30 años en una cueva?!

—Shifu: No, primero tienes que dominar la enseñanza.

—Po: Eso es imposible, jamás voy a poder convertirme en usted.

—Shifu: No quiero convertirte en mí, quiero convertirte en ti.