Ella acaba de terminar sus estudios en la universidad tiene toda su vida planeada.
El también tiene todo planeado.
Una noche loca dónde los dos se encuentran y....¿esa noche traerá consecuencias?.
°Historia 100% mía°
Hoy es el gran día en el que me caso. Un giro dramatico que dió mi vida hace un mes. Estoy embarazada, me voy a casar con un hombre que medio conozco y que trata que nos llevemos bien por el niño que cargo en el vientre genial.
- Creo que sería mejor con el velo, así cuando te vayas a besar en el altar te lo tendrá que quitar y yo obviamente voy a tomar unas fotos divinas.
- No quiero una sábana en mi cabeza, Gabriela.
- Pues, yo solo digo que se vería más bonito y elegante.
Me terminan de maquillar y ya estoy lista pero tengo la bata todavía. La boda es a las cuatro de la tarde y ya son las tres así que me tengo que apurar con el vestido.
- Aquí está, bello y hermoso - Mamá trae el vestido y lo pone encima de la cama - Tu padre está afuera, pontelo para decirle que pase.
Agarro el vestido con delicadeza y me meto al armario y me lo pongo.
Duro unos cuantos minutos en salir, admirandolo, es demasiado hermoso.
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Cuando salgo los dos pares de ojos se me quedan viendo y se que de aquí salgo llorando.
- Ay mi niña - Mamá me abraza y me da un beso en la mano, yo solo sonrió, ni se que hacer.
- Te vas a casar y no vamos a poder salir todos los viernes por la noche - Hace un puchero.
- Voy a buscar a tu padre - Mamá se alisa su vestido de gala y se va directo a la puerta.
- Te ves hermosa amiga - Me abraza y ya yo estoy apunto de llorar - Ey no, el maquillaje se tiene que quedar como está.
Veo a papá detrás de Gabriela y sus ojos se cristalizan.
- Sigues siendo mi niña así te cases tengas cuatro hijos, un perro y un esposo amargado - me río por lo último y sus lágrimas caen - Ven aca- Me abraza con ternura, los abrazos de papá son los mejores y solo espero que mí hijo tenga un papá como el mío.
Después de un poco de llanto y de un retoque al maquillaje ya bajamos al auto.
- No puedo creer que sea la misma mocosa que entraba a mí habitación a escondidas a jugar con mi computadora - Mí risa se escucha por todo el lugar y la de todos.
Mi hermano me ve y me abrazo igual. Tantos abrazos me dan ganas de llorar.
Entro al auto y todos mis nervios están a folte. Al llegar los periodistas toman fotos de la camioneta y todos se aglomeran.
Los guardias de mí papá y de Santiago abren paso para que no puedan interferir para cuándo yo salga.
- Todo va a estar bien - Gabriela me agarra las manos.
Le sonrió y por fin abren la puerta, pongo un pie afuera cuando terminó de salir, todos los flash me pegan en la cara pero trato de no ver dónde hay cámaras.
Un poco complicado la verdad.
Mí papá me agarra del brazo y nos disponemos a entrar a la iglesia.
- Todo está listo, ya el novio está en el altar. Solo debes caminar con precaución y evitar una caída que vaya a quedar en un periódico ¿Entendído?
- Que apoyo emocional el tuyo Espenzer - Lo miro de mala manera y el sonríe.
Papá me agarra del brazo y yo lo masajeo, no puedo con los nervios es como sí me estuviera casando por amor.
Pongo un pie adentro y empieza a sonar la música clásica y todas las personas se giran a verme con una sonrisa y otras con sus caras serías.
Veo al frente y ahí está el con su cara sería pero con el brillo en sus ojos que he visto estos últimos días. Me hace una pequeña sonrisa y yo hago lo mismo.
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Al llegar Santiago estira la mano y mí papá agarra la mía, la pone encima de la de el.
- Te estoy entregando mi vida entera, mí hija y mi nieto, cuidalos cómo sí fueran el mayor tesoro de tú vida - ay así mi padre me entrega al altar con los ojos llorosos.
Antes de irse me da un pequeño beso en la frente y se sienta adelante en dónde están sentados todos nuestros familiares y los de Santiago.
- Queridos hermanos, Estamos aquí junto al altar, para que Dios garantice con su gracia vuestra voluntad de contraer Matrimonio ante el Ministro de la Iglesia y la comunidad cristiana ahora reunida. Cristo bendice copiosamente vuestro amor conyugal, y él, que os consagró un día con el santo Bautismo, os enriquece hoy y os da fuerza con un Sacramento peculiar para que os guardéis mutua y perpetua fidelidad - Empieza con su charla dónde cree que lo estoy oyendo pero estoy más perdida que la mujer de acudes.
Veo a Santiago de reojo y se que esta fastidiado al igual que yo de esta charla.
-Así, pues, ya que queréis contraer santo matrimonio, unid vuestras manos, y manifestad vuestro consentimiento ante Dios y su Iglesia - Me pongo de frente a Santiago y agarramos nuestras manos y es él el que empieza.
- Yo, Santiago Durán te quiero a ti Emily como esposa y me entrego a ti, y prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte todos los días de mi vida - Soba mi mano por abajo.
- Yo Emily Rodríguez te quiero a ti, Santiago como esposo y me entrego a ti, y prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte todos los días de mi vida.
- Ya qué todos nosotros hemos Sido testigos de su amor y se han confesado antes Dios - Doy un suspiro - Yo los declaro marido y mujer, puede besar a la novia - Todos estalla en aplauso y le asiento a Santiago, me quita el velo con delicadeza y me ve.
Me acerco a el y el a mí. Un beso delicado y lento nos damos, dónde expreso mis nervios por el día de hoy.
