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Cuando Harry encontró a Hermione, ella estaba sentada en la esquina de la escalera junto a la biblioteca, pensando sobre algo con una cara de pérdida y atormentada, y cuando vio a Harry, exprimió una sonrisa de impotencia:

-Siempre consigues encontrarme dónde estoy.-

Harry no respondió de inmediato, solo se sentó al lado de Hermione, tras un rato allí abrió la boca:

-Tú y Malfoy, algo pasó, ¿verdad?-

Esto no era nada de tono interrogativo, sonaba más como una afirmación. Hermione quedó inmóvil un momento, sin saber cómo debería responder. Técnicamente, no pasó nada entre ella y Malfoy, pero sin duda algo es diferente.

-Lo siento.- Hermione encontró incapaz de hacer una negación inmediata,

-Pensé que yo misma podría arreglármelo, Harry. ¿Recuerdas ese collar? Eso lo obsequió Malfoy.-

-Oh, Dios.....¡qué quiere de verdad!- Harry gritó indignado, -¿Le hizo algo encima de eso?-

-No.- Hermione dijo en voz ligera, -Lo he comprobado, no hay ningún maleficio. Tal vez solo fue una broma, como siempre ha hecho antes, sólo por diversión.-

-Este es su estilo habitual, ¿no es así? No hace falta que preocupes demasiado. Sabes......esto es demasiado fácil hacer que la gente malinterprete, de hecho, últimamente estuve escuchando muchos rumores sobre ti y Malfoy, si me preguntas yo digo que están locos......-

-Harry,- Sabiendo lo que Harry está a punto de decir, Hermione interrumpió, -Yo, yo siempre siento que esta vez es diferente......quiero decir, para mí. Siempre recuerdo este asunto, siempre recuerdo a Malfoy......-

-Hermione......-

-Harry, ¿tú por qué recodarás siempre a alguien?-

Harry sumió de repente dentro del silencio, como si estuviera pensando en una pregunta muy difícil, luego parpadeó sus ojos verdes, miró a Hermione seriamente y dijo:

-Será por gusto o odio.-

Hermione mirando a Peeves parpadeando en la distancia, que estaba escondiendo la persecución de Barón Sanguinario, en trance verdaderamente añoró un poco aquellos días de ir contra Draco, ella soltó un largo suspiro:

-Entonces yo seguramente será, que le odio demasiado.-

Harry tranquilamente viendo a Hermione, no dijo nada. Él sabe que para "recordar siempre a alguien", indudablemente es porque te importa, si atribuías este tipo de que te importa al "odio", entonces también debe ser un odio extremo. Y está muy claro que Hermione no odia a Malfoy hasta ese punto.

-Gustar en cambio es diferente.- Harry dijo silenciosamente en su mente, -En caso de gustar, en el momento donde no ha convertido en "amor", ya importaba mucho.-

Así pensando, él al llegar a pensar en Ginny, dio cuenta de la magnitud del problema.

-Hermione, ¿sabes que te estás mintiendo a ti misma?-

-¿Qué?-

-Te gusta Malfoy.-

Casi como por reflejo, Hermione se puso de pie al instante, miró a Harry con una expresión sorprendida, replicó:

-¡No lo hago! Harry, ¡sabes que esto es imposible!-

Harry simplemente la fijaba con una expresión tranquila, como si ya hubiera esperado su reacción, mientras Hermione empezaba a dudar de la vida, él bromeó:

-¿Sabes que Ron te llama "idiota de relaciones" a tus espaldas?-

-......-

-Escucha, sabes que esto también es muy difícil de aceptar para mí, así que no voy a bromear con esto. Digamos que yo debo odiarle más que tú es quedarse corto, pero tampoco llega al punto de odio. Tú también te das cuenta que usar odio para explicar que te importa, es muy inverosímil, ¿no es así?-

-Pero yo......debería odiarle.-

Hermione sintió que su propia voz estaba un poco entrecortada, murmuraba en voz baja en respuesta a las palabras de Harry, pero parecía más bien que lo decía para sí misma.

-Sin embargo no lo estás.-

-¿Qué debería hacer, Harry?-

Era la primera vez que Hermione sentía tan indefensa frente a Harry, ella en el pasado siempre tenía una solución para cualquier asunto que encontraba, y ahora ella siente como una pecadora, la traidora de Harry.

Qué desagradable es esto, ¿por qué Malfoy? Él siempre ha sido el archienemigo de tu mejor amigo, has olvidado cómo te insultaba con "sangre sucia", ¿o has olvidado cómo él hizo daño a Hagrid y Buckbeak?

-Sinceramente, odio a Malfoy con pasión, tú lo sabes,- Harry encogió de hombros, -Pero confío en ti, respeto cada decisión que tomas, yo creo que deberías hablar con Malfoy.-

Ella sabe que Harry nunca la obliga a nada, a pesar de que se tratara de Malfoy, quien había odiado durante seis años. A pesar de que no hace tanto sospechaba que él sea un mortífago, tampoco tiene ninguna retórica drástica, sólo decía "Deberías hablar con él".

Aunque......aunque cada conversación que ella tuvo con Draco, todas parecían peleas.

-Harry, gracias.- Hermione agradecida le dio un abrazo a Harry, -Este asunto, ¿podemos ocultarle a Ron por ahora?-

Harry asintió: -Esto es lo que también espero. Sabes que por la tarde hay partido de Quidditch, él ya está bastante nervioso, no quiero decirle nada más que afecte a su estado de ánimo......-

-Oh, oh, mira quién es éste, ¡escondiéndose aquí y husmeando!-

Apenas Harry y Hermione se fueron, Peeves al parecer ya encontró diversión, gritó en voz alta a la persona que se escondía detrás del pilar de la biblioteca, excitándose aún más al ver ese característico cabello rubio platinado y los ojos azules grisáceos que la miraban con amargura y resentimiento:

-Oh, te reconozco, te reconozco......¡eres un Malfoy!-

-Realmente maldita sea.- Murmuró Draco en voz baja, en este instante está muy tentado de lanzarle un encantamiento acallador a la criatura desenfrenada frente a él, para que pueda comportar obediente por un rato.

-Cállate, Peeves.-

Aguantó el impulso de agitar la varita hacia un poltergeist, -Si me reconoces entonces debes saber que mantengo muy buenas relaciones con Barón Sanguinario, no me importaría hablar un momento con él sobre ti......-

Las bonitas comisuras de labios del adolescente curvaron hacia arriba en un arco no muy amistoso, viéndole le pareció muy peligroso a Peeves, sobre todo tras oír "Barón Sanguinario", sobresaltó hasta alejarse instantáneamente un buen trecho, murmurando por la boca:

-Slytherin malo, los Slytherins realmente son todos malos......-

Originalmente yo ya no era una buena persona, él burló en silencio a sí mismo. Al recordar cuando acababa de llegar acerca, cómo esos dos Gryffindors estaban abrazándose, hablando íntimamente sobre algo, parecían muy felices.

De todos modos, siempre habrá alguien que será el salvador, no es así. Él simplemente tiene que seguir interpretando el personaje del malo y bastaría con eso, esto no le resulta nada difícil.

Miró fuera de la ventana girando la cabeza a un lateral, bulliciosa de alumnos que iban y venían entre el castillo. De pronto recordó de cierto atardecer, tres años atrás, donde alguien le golpeó fuertemente un puñetazo, él hasta ahora aún puede sentir el dolor.

Distancia | Dramione |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora