34. Electric Touch

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(Isabella's Version)

—No puedo creer que nos convencieras de hacer esto —Isabella suspiró, tomando el mentón de su primo para mantenerlo quieto mientras ella dibujaba con un delineador azul sobre sus párpados.

—¿Qué? A todos nos hace falta salir —Juani se encogió de hombros con una amplia sonrisa, dejándose manipular por ella hasta que terminó con el trazo.

—Sí, pero no luego de pasar toda la noche en vela trabajando —ella hizo una mueca en señal de desacuerdo, tomando su distancia una vez que el maquillaje estuvo listo—. Ya quedó.

Para ese punto, ya había maquillado a Mely, Marcus y Juani porque, gracias a este último, estaban siendo obligados a salir de fiesta junto a algunos de sus amigos del cast de la sociedad. Ninguno tenía demasiados ánimos (más que su primo) debido a que terminaron de filmar más o menos hasta las seis de la mañana y no llegaron a casa sino hasta las ocho y media, casi nueve, por lo que a penas y habían podido dormir durante la tarde, o al menos en su caso, pues le resultaba imposible descansar cuando ya era de día.

—Che, no me odies demasiado, te hace falta despejarte un poco —el chico la observó con un puchero—. Además, hace años que no salimos juntos... y tu primera joda en España la tuviste con Enzo, así que, técnicamente me lo debes.

Juani la señaló con el dedo, ante lo cual Isabella negó con una sonrisa. Si ponía las cosas de esa manera, no podía negarse a nada.

—Tienes un punto ahí, creo que ya no me puedo zafar tan fácil —la castaña soltó un falso suspiro de resignación, logrando que su primo la mirara mal.

—Oh, la peor parte de todo no es que nos haga salir de fiesta luego de estar sin dormir, es que justo se le haya ocurrido mencionar el asunto frente a Malena cuando era obvio que se iba a querer colar al plan —Mely salió del baño de la habitación con la nariz fruncida y recargó su brazo sobre el hombro de Juani.

La castaña no pudo evitar sonreír al verlos juntos, pues ambos llevaban el mismo tipo de delineado, sólo que Mely en rosa neón, sin contar que también parecían estar combinando prendas de tonos y estilos muy similares. Mientras que Juani llevaba unos pantalones cargo azul eléctrico con una musculosa blanca, Mely estaba usando una falda cargo rosa con una remera del mismo azul, la cual se transparentaba y dejaba a la vista su top blanco.

En ese instante, quedaba más que claro que no había mejor persona para complementar la curiosa personalidad de su primo que una chica que tuviera el mismo estilo extravagante y alegre forma de ser que él. Al verlos así, hasta podía pasar por alto el comentario que la pelirroja acababa de hacer.

—¡No pensé que fuera a querer venir! —Juani se excusó levantando las manos, ante lo cual las dos chicas respondieron rodando los ojos.

—En fin, tú —Mely fijó la mirada en Isabella, quién se señaló a sí misma con confusión.

𝐎𝐮𝐫 𝐂𝐢𝐧𝐧𝐚𝐦𝐨𝐧 𝐆𝐢𝐫𝐥 ; Enzo Vogrincic y Matías RecaltDonde viven las historias. Descúbrelo ahora