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Narrador Tails
Era la mañana, me estaba levantado para ir a clases, juro que no extrañaba levantarme a estas horas. Hice lo que hacía normalmente para ir a la escuela, al igual que Cream. A partir de hoy, se han terminado las vacaciones, las extrañaré, aunque quedan las de invierno, pero para ello, debo de pasar todo lo que conlleva las clases.

Una vez que Cream y yo estuvimos listos, salimos de la casa y Vanilla nos llevó a la escuela. Cuando llegamos, ambos nos bajamos y con esto, en teoría, empezaría nuestro primer día de clases. Cream se fue a dirección de primaria y yo, al lado de secundaria.

Entré a la escuela, pero no podía ignorar el hecho de que mi mochila pesaba demasiado, y, honestamente, ya quería morirme. Al final del día no me llevé todo, pues, ¿quién usaría todos los libros y libretas en el primer día? Yo creo que nadie o eso es lo que pienso... Al final, solo dejé todos los libros en mi casa, pues es obvio que solo usaré las libretas.

Y ahí estaba yo, dentro de la escuela, como en el año pasado, había alguien que te decía en que salón te tocaría. Me acerqué a la persona, le dije mi nombre y me dijo que fuera al salón que estaba al frente de nosotros. Fui en dirección a ese salón y pensé: ¿qué ese no era el salón de 1°A? Cuando llegué, vi un papel pegado al lado... izquierdo de la ventana, que decía: "Español 2° y 3°". Espera, espera, ¿ya no es salón fijo? El año pasado cada grupo tenía su propio salón, pero, parece que en este año todo será en un distinto salón.

Entré al salón y ahí estaba la maestra que da Español a tercero y segundo. Recuerdo que solo vino una vez a dar clase y eso era porque no había venido uno, aunque realmente no recuerdo su nombre. Me senté en la primera banca que vi disponible y esperé a que iniciara la primera clase de todo segundo. Ahora me pregunto, ¿Sonic estará aquí? No volteé a ver más lejos, así que no sé si Sonic estará aquí o no.

Luego de unos minutos, dieron el toque de que ya era hora de iniciar las clases. Vi como la maestra se paró, lo más probable es que vaya a dar la bienvenida o lo típico que se hace al iniciar un año nuevo.

—Muy buenos días, chicos —dijo la maestra, que aún no me sabía su nombre—. Soy la Miss Maggie y soy su maestra de Español.

Así que su nombre es Maggie, bien, ahora tengo que aprendérmelo. Ella seguía hablando y diciendo lo típico que se hace en un día de primera clase. Luego empezó a repartir agendas y nuestros horarios, era la hora de la verdad de si había Japonés o no. Sé que las probabilidades son mínimas, pero todavía tengo un poco de esperanza a que, tal vez, había clases de Japonés en este año nuevo. Recibí mi agenda y mi horario y... Lo observé, chequé el lunes, el martes, el miércoles, el jueves y el viernes y nada no había ninguna mención de Japonés. Así que la Yuriko se fue de la escuela, quisiera que me dijera la razón exacta, pero, sé que eso no es posible...

—Como pueden ver en sus horarios, ahí dice que cada clase se va a dar en un salón distinto. El año pasado, nosotros los maestros nos cambiábamos de lugar, ahora les toca a ustedes ir al salón de la materia que dice su horario. —Mis pensamientos fueron interrumpidos por la maestra, quien dio un detalle importante—. También, en este año el gobierno implantó un nuevo programa, ¿recuerdan que todo era por bimestre? Pues en este año, será por trimestres, que en total serían tres en todo el ciclo. De hecho, primero de secundaria, ya tiene el nuevo programa al ciento por ciento, pues ya tienen Formación Cívica y Ética e Historia; en cambio ustedes, los libros siguen con el plan pasado por lo que veremos determinada cantidad de lecciones por parcial. Otra cosa, como ahora es por trimestres, la directora y nosotros los maestros, decidimos los dividir los trimestres en dos, así no se les hará tan pesado, las calificaciones no se registran hasta su segundo parcial y estos dos se promediarán. Estos son algunos cambios que ahora estarán a partir de ahora.

¿Trimestres? Vaya, parece que hay una enorme reestructuración en todo esto. Ahora tendré que estudiar una vez más que en el año pasado, esto no me va a gustar nada. En cuanto a los demás, tendré que adaptarme a todo y a la ausencia de Japonés, ahora es cuestión de tiempo para saber si Sonic seguirá conmigo o no.

—Miss, ¿sabe en qué salón está la clase de Historia? —Mis pensamientos fueron interrumpidos por un compañero que había preguntado donde estaba la siguiente clase.

—Es en el único salón que está en el piso de arriba de allá. —Señaló la maestra la ubicación del salón.

—Gracias.

Luego de un rato, la clase de Español terminó. Por lo que todos se pararon de su asiento y se iban saliendo del salón. Seguí a todos para no perderme. Cuando llegué al salón, me senté en una de las bancas de hasta adelante que era la segunda fila de bancas. El maestro de la clase, era el Profe. Hernán, eso no me sorprende, ese dato ya lo sabía desde el año pasado.

La clase comenzó y el maestro dio la típica introducción de incios de clases, luego mencionó los proyectos de su clase que eran los cortos y la Expohistoria, en la que este año sí participaremos, al igual que primero debido a que ya tienen Historia.

Luego de una rato, la clase terminó, era la hora de saber si Sonic seguía conmigo o no. Todos se salieron, y, ahí estaba Sonic, quien se me quedó viendo con una sonrisa.

—Cuánto tiempo sin vernos.

—¡Sonic!

—¿Qué cuentas?

—Que tenemos que irnos.

—¡Oh sí! —Me paré de mi lugar, tomé mi pesada mochila y Sonic y yo salimos del salón y bajamos por las escaleras, ahora estábamos abajo—. ¿Y qué clase tenemos?

—Ah, si no mal recuerdo, Inglés.

—Oh Inglés.

—¿Sabes dónde está el salón?

—No, ¿y tú?

—Yo tampoco...

—Mira Tails, ahí está el Profe. Robin, vayamos. —Fuimos con el Profe. Robin, cuando llegamos nos saludó.

—Hola Sonic y Tails.

—Hola —respondimos ambos.

—Buscamos el salón de Inglés —respondió Sonic.

—Son de 2°C, ¿no?

—Sí —respondí.

—Ya lo suponía, ahora tengo clase con los de 1°B.

—¿Nos va a dar clases la otra maestra? —preguntó Sonic.

—Sí, su salón está ahí arriba —señaló el lugar.

—Oh, muchas gracias —agradecí.

—Adiós —se despidió Sonic y nos alejemos del Profe. Robin.

—Que malo que hayamos perdido a nuestros compañeros.

—Sí, no hubiera sido por eso, encontraríamos el salón más fácilmente.

—Lo sé. Ahora hay que lamentarnos que nos va a dar la otra maestra.

—Ni me lo digas.

Apuros en el ColegioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora