30

7 1 1
                                    

Narrador Tails
Era lunes, estaba en la misma semana en la que el viernes ya empezaría los exámenes y empezaríamos con el examen de Matemáticas. La verdad es que me sentía listo para todos los exámenes, a excepción del que ya muchos sospechan, el de Física.

En estos momentos me encontraba en la clase de Física, resolviendo ejercicios, acababa de empezar la clase. Ahora, muchos recordarán de que dije que al día siguiente le iba a preguntar. Ese día fue un viernes, y, la verdad es que no me animé, pero hoy sin falta le preguntaré al maestro sobre el tema.

Luego de pensarlo unas veces, me armé de valor y fui al escritorio del maestro. Cuando llegué, lo saludé y él me correspondió el saludo, luego de eso le empecé a preguntar sobre el primer ejercicio que había dejado sobre ese tema en la guía.

Luego de eso, el se me quedó viendo, debo de decir que me sentía muy nervioso, no sabía si sí iba a responder mi duda sobre el tema, me quería morir en estos pequeños segundos, microsegundos o lo que haya sido antes de responderme.

Para mi suerte, él respondió sin decir nada, puse la mayor atención que pude para poder entender el ejercicio. Observé como me explicaba y respondía con una sonrisa, yo solo quería que al fin entendiera este tema, no me importaba más.

Cuando acabó de explicarme el ejercicio, agradecí y le di una reverencia para después regresar a mi lugar a seguir resolviendo la guía.

Como seguía en el tema de conversiones, no le di más importancia. Solo estaba feliz de que al fin ya tenía idea de cómo se resolvía un ejercicio de este tema.

Pasaron las horas, me encontraba sentado en mi banca de siempre, se supone que Sonic se va temprano así que, por lo general, a esta hora estoy solo. Pero, de la nada, vi como él venía hacia mi banca.

«¿Por qué estará regresando? ¿Acaso no han llegado por él? Quién sabe, solo él sabrá», pensé, pero fui interrumpido por su repentino llegar, ahora estaba a lado de mí.

—Hola Tails.

—¿¡Sonic!? ¿Qué haces aquí? ¿Qué no deberías de haberte ido ya? —pregunté estaba sorprendido que se haya ido a sentar conmigo.

—No han llegado por mí, así que regresé.

—Qué raro, ¿te han dicho algo por el móvil?

—No.

—Ya veo... ¿De qué quieres hablar mientras llegan por ti? —continué.

—No lo sé, ¡ah sí! —se interrumpió a sí mismo, se veía que se le ocurrió algo de la nada—. Es sobre un pequeño secreto.

—¿Secreto? —¿Qué será lo que me quisiera contar? Debe de ser algo que no me haya dicho antes y se haya animado de valor ahora qué no tiene nada que contar.

—Sí, jamás se lo había dicho a nadie, es sobre un proyecto que tengo.

—¿Proyecto? ¿De qué?

—Es una pequeña historia que hice para mí mismo.

—¿Historia? —pregunté, no tenía ni la más mínima idea de a lo que quería llegar.

—Sí, es una historia de suspenso que trata de zombis, algo así de un tipo de futuro apocalíptico.

—Ah ya veo.

—Llevo escribiéndola hace ya un tiempo, pero jamás se lo había dicho a alguien.

—¿Desde cuándo la estás escribiendo?

—Desde la segunda mitad que estábamos en primero —respondió y sacó su móvil, para después mostrarme su historia.

—Es esta, se llama «Más y más zombis» —agregó y me mostró la portada de su libro.

—¿Dónde la estás escribiendo?

—Ah en esta página llamada TikalStory.

—¿TikalStory?

Sí, ahí hay de todo, como te digo la conozco hace poco —me respondió, después de eso se iluminó mi cabeza y se me ocurrió preguntarle algo sobre ese tema.

—¿Ahí hay historias tipo Luisley? —pregunté acerca de una pareja de Mario de un juego que había jugado hace mucho en mi móvil, pero nunca lo terminé. Estaba claro que Sonic sabía de lo que hablaba. Para lo que sigan sin entender, hablaba de la pareja de Luigi y el príncipe Peasley.

—Tails... —respondió, pude ver como puso una cara extremadamente larga ante mi pregunta, veía que sus ojos estaban entreabiertos, sé que estaba juzgándome ahora mismo con la mirada.

—¿Sí hay o no? —volví a preguntar, ya había llegado demasiado lejos para no continuar con esto.

—Sí, las hay y muchas... —respondió, aunque ante de dar su respuesta, se notaba que su expresión me decía «no puedo más contigo».

Luego de eso escuché que me nombraron por micrófono, al parecer esta vez me iba a ir primero que Sonic. Qué día tan extraño.

Llegué a mi casa, subí a mi cuarto y fui a buscar la aplicación que Sonic me había dicho sobre su historia. Una vez que la encontré, instalé TikalStory, esperé a que se terminará de descargar, y, una vez instalada, tuve que crearme una cuenta y eso fue lo que hice.

Luego de haber creado la cuenta para TikalStory, me puse a buscar la historia de Sonic que se llamaba «Más y más zombis», no la leí, pero la guardé para tiempo después. Luego de eso, busqué a lo que verdaderamente había instalado la aplicación, buscar historias de Luisley. Para mi sorpresa, estaba la página repleta de ese tipo de cosas, parecía que tenía una mina sobre esta pareja.

Estaba por leer una, pero, algo me detuvo, por lo que poco que he explorado de la página, parece que todo mundo puede saber que es lo qué estás haciendo y leyendo. Sé que soy un usuario más y nadie sabe quién es el que estás detrás de esta cuenta, de todas maneras no quería que mucha gente supiera.

Así que fui a buscar algo más «normal», por lo que busqué algo sobre Mario, encontré una historia de Luigi y Daisy, así que me puse a leer aquella historia en vez de la otra, además de que hallé una historia de noticias sobre Mario, la guardé para leerla después.

Después de eso, Vanilla nos habló a mí y a Cream para comer.

Sonic me había adentrado a un mundo que jamás se me ocurrió tocar, un mundo que hizo que este año fuera más especial que el pasado.

Apuros en el ColegioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora