Imagina a Yuuji dando vueltas en la cama porque extraña a su dulce bebé, piensa en lo cálido que eres, en cómo lo acaricias mientras duermes... a veces incluso lo muerdes porque eres algo tan necesitado incluso cuando estás descansando.
Yuuji no puede evitar que incluso el más mínimo pensamiento en ti haga que su polla se contraiga en sus pantalones cortos de baloncesto. Destellos tuyos encima de él, debajo de él, aferrándote a él por tu vida, llaman la atención sobre su longitud: goteando y sonrojado, manchando el interior de sus tonificados muslos. El deportista de cabello rosado se siente como un pervertido cuando toma su teléfono y se desplaza hasta tu chat, presionando reproducir en la última nota de voz que le enviaste antes de irse a la cama.
'Te extraño, vuelve a casa pronto. ¿Kay Yuuji? Prácticamente puede escuchar el puchero en tu voz, la misma dulce voz que tienes cada vez que está a punto de hacerte correrte o está a punto de deslizarse en ese pequeño y estrecho agujero. Yuuji se siente como un bicho raro, deslizando su mano áspera más allá de su cintura para bombear su resbaladiza polla, repitiendo tu voz una y otra vez para ayudarlo a correrse. Te imagina llorando y atrapado contra su pesado cuerpo mientras pasa un pulgar por la hendidura pegajosa de su cabeza de pene.
Cierra los ojos con fuerza cuando dices su nombre. "Oh, joder, cariño, también te extraño..." gime en el aire de la noche, apretando el bajo de su eje mientras recuerda las muchas veces que gemiste su nombre mientras él te follaba el coño en carne viva. Es tan desagradable, tan asqueroso, convertir una nota de voz inocente en material para masturbarse.
pero te extraña y no se atrevería a despertarte para ayudarlo a bajar cuando tenga un partido mañana :((
Eso es hasta que llega un nuevo mensaje tuyo, un texto simple y dulce de "Realmente te extraño, Yuuji", con una foto atrevida de tus tetas desnudas adjunta.
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