Capítulo 7

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Todos y cada uno de los gritos, insultos y hasta los pequeños murmullos cesaron ante mi repentino arrebato contra el Alpha. Yo misma estaba totalmente sorprendida de lo que había hecho.
El rostro de Oleg seguía volteado y una marca roja se extendía por su mejilla.
La pequeña muchacha, quien tenía el rostro lleno de pánico, comenzó a llorar mientras se encogía más en su lugar.
Nadie hablaba. Nadie se atrevía siquiera a respirar.
Yo simplemente no entendía como no estaba muerta.

Se sentía como si hubiesen pasado años hasta que por fin, Oleg levantó la vista encontrándose con la mía.
Quizá lo más aterrador fue, es y será su expresión vacía y fría.

Levantó de sus cabellos a la pobre muchacha, quien solo soltó una grito ahogado, para entregarla a quien yo suponía era su Beta.

-No la maten, aún.- No despegó su mirada de la mía mientras se acercaba a mi con pasos lentos pero muy tensos.

Se detuvo frente a mi y levantó su mano a la altura de mi rostro. Cerré fuertemente mis ojos y me preparé para un golpe que jamás llego.

Lo que si hizo fue halarme del cabello para acercarme a su rostro. No dije ni hice nada, yo sabia que era valiosa para Oleg pero no quería saber cuanto.
Quizá lo suficientemente poco como para asesinarme ahí mismo, frente a toda su manada.

-Loba, no debiste hacer eso.- Susurro tan suavemente que por un momento creí que lo había imaginado.

-Alpha, Y-Yo...

-Cállate, o acabarás con mi paciencia, no te golpeó porque yo si te respeto como Luna.- Murmuró con los dientes apretados.- Pero ya te enseñaré respeto.

Toda mi piel se erizo por sus palabras, por supuesto que sabía de lo que estaba hablando y el solo pensarlo me hacía querer llorar.

Él quería estar con mi Loba, pero en esas circunstancias quizá nos mataría.
Mi Loba era virgen y era como empezar de nuevo, es otro cuerpo, otra yo que no merece lo que Oleg pensaba hacerle.

Me llevo con él, casi a rastras, al bosque.
Cuando por fin me dirigió la mirada de nuevo su rostro no podía estar más rojo de la ira.

-¡Quisiera asesinarte!.- Grito Oleg, haciendo que mi cuerpo temblará.- No lo haré, no ahora, si como Loba no me das un cachorro, por lo menos uno, te mataré, Loba maldita.

Sus palabras me hirieron, convirtiendo mi miedo en coraje.

-Seré una Loba maldita.- Escupí, sorprendiendole de que todavía quisiera decir algo más.- Pero soy justa. No daño a inocentes, eso es de cobardes.

Me miró fijamente con el ceño fruncido. La corta distancia que nos separaba quedó en la nada cuando el se acercó a mi en un segundo.
Su mirada retando a la mía, pero no me iba a retractar y mucho menos a disculpar.

-Tú no sabes por qué estaba siendo juzgada.

-No pudo ser tan grave como para que fuese humillada de esa manera. ¿Robo algo? Lo pagare yo, Oleg. Como sea, pero...

No pude continuar, sus palabras me dejaron helada, no había forma de pagar algo como eso.

-Es la amante de un sucio Vurdalak.*- Sus palabras estaban teñidas de cólera. Y yo lo podia entender.

-Y-Yo no...

-¿No lo sabías? Ya no importa, Loba. Lo que hiciste frente a mi manada no puede ser perdonado.

Sus palabras fueron tan frías y duras que por poco y me echo a llorar ahí, en ese mismo momento.

-Alpha, de haberlo sabido yo no hubiese interferido. ¿Saben al menos si es que esa bestia no la obligó?.- Quizá mi error no pudiese ser borrado, pero para ella tal vez había esperanza.

-Se le encontró junto a él y aunque quiso llevarla consigo lo logramos detener. No necesitamos más pruebas.

-Alpha Oleg, pudo o no haber sido forzada. La condenan sin siquiera saberlo.

-Obligada o no tiene que morir.- Exclamó molesto, alejándose de mi, pasando las manos por su cabello y susurrando maldiciones a Luna.

-¿Porqué? ¡Eso no puede ser justo!

-Loba, Cállate, no sabes nada.

-Lo sabría si te dignaras a hablar conmigo y no solo a mantenerme en tu cama.

Estaba furiosa y el también. Y esto no acabaría bien.

-¡Está Embarazada de ese Monstruo!.- Grito Oleg, tan fuerte y tan claro que tal vez todo el bosque lo sabría.

Yo lo había visto antes, en la manada de Mijail, ella había sido forzada y su Mate tuvo que matarla, pues con ella llevaba a uno de ellos.

-Un bebé jamás será una amenaza, Oleg.- Mi voz salió calmada y se podría decir que hasta triste, jamás estuvo de acuerdo con que ella fuese asesinada.

-No lo es ahora, pero lo será después.- Gruño dándome la espalda.

-Solo debemos de criarlo como uno de nosotros, es solo un bebé, Oleg. Uno como él tuyo.- Susurre caminando hacia él y abrazandolo por la espalda.

Rápidamente se dio vuelta y me sonrió.

-Aún no hay nada, pero hoy lo habrá.- Dijo, llevándome aún más adentro del bosque, con la luz de la Luna sobre nosotros.

Hoy sería la noche, lo presentía.

****

No se si lo recuerdan pero Vurdalak es Vampiro en Ruso.

Saludos y un beso a todas y todos.
Gracias por leer. ♡

Luna por Elección (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora