CAPITULO 4

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Había pasado algunos días desde que Sergio y Raquel se vieron por primera vez después de siete años separados, el no podía dejar de pensar en ella, en lo perfecta y hermosa que estaba, algo en su mirada de ella había cambiado, ya no era la misma de antes, era una mujer madura...

Tenía muchas cosas en la cabeza

Maggie le había pedido perdón a Raquel por haber dejado a los niños solos, ella había ido al baño y luego no los vio, ella no le dijo a su tía ni a Maggie que se había encontrado a Sergio.

Raquel sintió mariposas en el estómago cuando lo vio, por una parte pensó que el había cambiado pero seguía siendo el mismo hombre de antes, ella no podía dejar de pensar en él, algo se removió en su corazón pero no podía decir con sinceridad que era.

Sus hijos cada días más se parecían a Sergio en el carácter, el estilo de la caminata, entre otras cosas, hasta cuándo tenía que fingir que todo estaba bien, para ellos pensaba que su padre se encontraba en una misión en la luna.

Tenía que dejar de pensar mucho...

***

El día tan esperado había llegado para Sergio y Raquel, ya que ellos no sabían que trabajarían a la par con el señor Palencia para el hotel tan esperado que él quería reconstruir.

Ese día Alicia estaba nerviosa, iba a ver a Raquel ese día porque ya sabía que trabajarían juntas pero su amiga no, estaba comiéndose las uñas, que su marido lo noto.

-¿Que tienes mi pelirroja? -Andrés beso el hombro de Alicia que salto de un brinco. -¿Nerviosa?

-Un poco, nada de lo normal, quiero que este proyecto salga bien y que no haya malos entendidos, debo llevarme bien con el paisajista, bueno... No sé si sea él o ella.

-No creo que sea para tanto linda, debo irme dejar a Vic a la escuela, no quiero que se nos haga tarde. -Beso a Alicia, cuándo Andrés salía de la cocina se tropezó con un juguete de su hija que cayó y se golpeó fuerte la espalda.

Alicia no tuvo más remedio qué llevarlo al hospital y la niña le pedía disculpas a su padre, no podía enojarse con ella, con su pequeña no. Ali tuvo que mandarle un mensaje a Sergio diciendo que estaba en el hospital con Andrés, eso sería que tenía que ir a la junta del proyecto.

Dios, Raquel me va a matar...Dijo Alicia en su mente.

***

Sergio llegó al restaurante saludo y se sentó con el señor Palencia, dijo que no tardaba en llegar la paisajista famosa en Europa.

-¿Así que es mujer?-Dijo Sergio.

-Si, ¿Hay algún problema? -Pregunto el señor Palencia.

-Nada, no he dicho nada malo.

Entre charla y charla pasaron 10 minutos y el señor Palencia observó que venía Raquel, ella venía tan sonriente que no se había dado cuenta del hombre que estaba sentado de espalda, cuando el señor Palencia le señaló que venía la paisajista él se dio la vuelta y se quedó en shock, vio que era Raquel, ella se detuvo al reconocerlo cerró los ojos respiró y terminó de dar los pasos que le quedaban para estar frente a ellos.

-Buenos días... disculpn la tardanza. -Dijo ella sin mirar a Sergio.

-No se preocupe señorita Murillo, le presento al señor Sergio Marquina, el es el arquitecto dueño de su empresa a quién les estoy confiando el proyecto, aclaro que estaba esperando a la señorita Sierra, pero tuvo un contratiempo.

-Ya nos conocemos señor Palencia, sin embargo es un placer trabajar con ella. -La miro a los ojos y le dio una sonrisa.

Raquel no podía creer que trabajaría de nuevo con Sergio, ella pensó que sería con Alicia, aunque no hablarán mucho, y sobre todo el no acepta este tipo de proyectos tan grandes, pero si tuvo un contratiempo iba a pasar con mucho tiempo juntos, lo que menos quería era volver a revivir esos sentimientos que solo él podía lograr que ella sintiera.

HERIDAS DE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora