Esta mañana llegué un poco más tarde al trabajo, con un dolor de cabeza lamentable y junto a Isidoro. Se encargó de que estuviera lo más cómoda posible en su casa, y me hizo el desayuno. Ni siquiera estuvo bromeando en toda la mañana, cosa que era extraña en él. Se le veía preocupado.—Conway va a hacer una reunión en diez minutos —me contó Navarro mientras me subía a su coche para ir a comisaría.
Mientras me pongo de servicio, un nuevo alumno, Albertito, entra en la sala de armamento.
—Buenos días, subinspectora —saluda el alumno. Yo sonrío y saludo.
—Buenos días, Alberto. ¿Listo para otro día de éxitos?
—¿Yo? Siempre, Falcon —se ríe.
Veinte minutos más tarde, toda la malla estaba reunida en la sala de siempre.
—No quiero que nadie vaya solo, todos en binomio —dice Conway de brazos cruzados.
Llegó a los oídos del superintendente el percance del día anterior en la fiesta, y resultó que no fui la única policía afectada por un pinchazo. Según Castro, otros tres compañeros también acabaron con los síntomas que tuve yo en el hospital. Y Conway está seguro de que solo fue un aviso a la LSPD. Tiene el presentimiento de que algo está por venir, y aunque me cueste aceptarlo, yo también lo presiento.
—Al más mínimo indicio de secuestro se manda QRR —dice Conway— Quiero máxima seriedad a partir de ahora. Desde el momento en que entráis al cuerpo tenéis una bala entre ceja y ceja, que no se os olvide, y ahora más que nunca tenéis que ser conscientes.
—Protejed a vuestros compañeros, son vuestra familia y nadie se queda atrás —da un paso al frente Noah Holiday.
—Cada veinte minutos pediremos un reconocimiento por radio, y todos contestaréis por orden de zeta —dice Freddy— En el momento en que falte un compañero se activa la alerta roja, ¿entendido?
—En alerta roja no debe haber ningún civil por las calles —aclara Gustabo— En caso de que lo haya, se puede disparar y cachear sin orden de registro. El simple hecho de estar por la calle es nuestra tarjeta verde para proceder como si fuera un delincuente.
Los compañeros asienten, y una vez se ha asignado a la malla por binomios, comienza el patrullaje. De nuevo, Freddy, Noah, Gustabo, Gordon, Isidoro y yo somos llamados para hablar sobre el operativo que tendrá lugar en pocos días.
Ya está casi todo organizado: cada pareja irá a una tienda distinta, separadas unas de las otras, y nos vestiremos como civiles. Cada uno tendrá un coche de incógnito en un sitio apartado al que iremos a pie, y con el coche iremos a un punto acordado. A partir de ahí, cada binomio irá caminando hasta una posición donde tendremos la distancia justa para escuchar, y estaremos separados unos de los otros rodeando la zona de quedada.
En cuanto a los agentes ocultos, estarán más distanciados y harán función de tiradores. A la mínima amenaza contra los agentes de incógnito, dispararán a matar.
—¿Todo entendido? —pregunta Conway.
—10-4 —decimos mis compañeros y yo.
—Compañeros, ¿ese QRR? —pregunta un agente por radio.
Todos los presentes miramos el último aviso, y en efecto, Filadelfo Casanova ha mandado un QRR.
—¡Acaban de llevarse a Albertito! —grita Filadelfo por radio— ¡Dos camachos negros, en mi última 10-20! ¡Eran un montón de personas vestidas de negro, se lo han llevado!
Oigo los sollozos de Fila y de pronto se me hiela el cuerpo. El primer policía secuestrado.
Nos ponemos en marcha sin tardar una milésima de segundo. Tenemos que recuperar a Albertito con vida.
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A million little times [ꜰʀᴇᴅᴅʏ ᴛʀᴜᴄᴀᴢᴏ]
FanfictionFreddy Trucazo × Olivia Falcon Fanfic basado en personajes de la serie SpainRp. En esta historia no se romantizan ni shippean a los streamers, sólo y únicamente a sus personajes. La mayoría de personajes (menos la protagonista) NO han sido creados...