‣ 004

137 31 6
                                    

୨୧┈┈୨🎪୧┈┈୨୧

Sunoo y Jungwon se encontraban en el patio trasero, completamente concentrados en decorar para la fiesta de cumpleaños de Daniel. Mientras tanto la madre de Sunoo había ido a recoger a Daniel, quién estaba completamente ajeno a la sorpresa que le esperaba.

—Esto va a quedar genial, Sunoo. Daniel se va a emocionar mucho cuando vea todo esto. —comentó Jungwon, admirando el trabajo en equipo que estaban haciendo.

Sunoo asintió con una sonrisa, agradecido por tener a Jungwon a su lado para ayudarlo.

—Sí, definitivamente. Y aún falta colgar la piñata y colocar las mesas con la comida. ¿Puedes ayudarme a traer las sillas?

Jungwon asintió, dejando los globos a un lado y ayudando a Sunoo a llevar las sillas hacia el área donde se celebraría la fiesta.

Juntos, colocaban las sillas en círculo alrededor de las mesas decoradas con manteles festivos y servilletas de colores. Sunoo se aseguró de que todo estuviera perfectamente alineado mientras Jungwon inflaba algunas serpentinas y las colgaba de los árboles cercanos.

—Creo que ya casi estamos listos. Solo faltan la piñata y la comida. ¿Podrías traer la piñata que se encuentra en la cocina, Jungwon? —pidió Sunoo

Jungwon asintió y corrió hacia la cocina mientras Sunoo se ocupaba de colocar los últimos detalles en las mesas. Cuando Jungwon regresó con la piñata, se unieron para colgarlas estratégicamente, asegurándose de que estuvieran al alcance de los niños.

—¡Perfecto! —exclamó Sunoo, admirando el resultado final—. Creo que todo está listo para la fiesta. Gracias por tu ayuda, Jungwon.

Jungwon sonrió, contento de haber sido parte de la preparación.

—De nada, Sunoo. Ha sido divertido. Ahora, solo nos queda esperar a que llegue Daniel.

Los dos amigos se dieron un choque de manos, emocionados por la fiesta que habían preparado con tanto esmero para el pequeño Daniel.

Después de media hora, mientras Sunoo y Jungwon afinaban los últimos detalles en la decoración del patio trasero, escucharon el sonido del motor del auto que se aproximaba. Rápidamente, se miraron emocionados, reconociendo que la madre de Sunoo estaba llegando con Daniel.

—¡Creo que están llegando! —exclamó Sunoo, emocionado, mientras se dirigían hacia la entrada para dar la bienvenida a la a Daniel.

El sonido del motor se hizo más fuerte, y pronto el auto se detuvo frente a la casa. La madre de Sunoo y Daniel salieron del auto con sonrisas radiantes.

—¡Sunoo! ¡Jungwon! —gritó Daniel mientras se acercaba, agitando su mochila.

Los dos amigos se prepararon para recibir al joven cumpleañero. Daniel llegó corriendo y se lanzó hacia Sunoo, atrapándolo en un abrazo entusiasta.

—¡Feliz cumpleaños, Daniel! —exclamó Sunoo devolviendo el abrazo con cariño.

Jungwon se unió a la felicitación.

—¡Feliz cumpleaños, pequeño! ¿Cómo fue tu día en la escuela?

Daniel se separó del abrazo, con los ojos brillando de emoción.

—¡Fue genial, y todos mis amigos están emocionados por la fiesta! Pero... hubo un chico nuevo en la escuela hoy, y quería invitarlo, pero ya se había ido cuando vinieron a recogerlo.

Sunoo y Jungwon intercambiaron miradas de comprensión.

—Oh, eso es una pena. Pero seguro habrá muchas otras oportunidades para que juegues con él. ¿Cómo se llama? —preguntó Sunoo, mostrando interés.

¡Un Payaso Como Novio! ୨୧ SunkiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora