Too Close {HinaKage Omegaverse}

Fourteen.

Hinata había sentido la mirada juzgona de sus compañeros, no es como que no estuviera acostrumbado, pero esta vez era diferente.

¡Lo veían como si hubiera matado a alguien!

Pero no tenía tiempo de pensar en ello, había sentido que Tobio estaba molesto, Hinata desconocía que había hecho, no hecho, dicho, no dicho o siquiera si él tenía la culpa.

Pero no importaba, ¡Su novio no se sentía bien, era su deber arreglar eso!

El azabache le había dicho sus preocupaciones a Yamaguchi, el Omega pecoso se están aguantando las ganas de decirle, "te lo dije".

No quería que se sintiera peor de lo que ya se sentía.

-Ay, Kageyama... ¿Estás seguro de lo que viste?- Dijo. Claro que Kageyama estaba seguro.
-Mhm.- Dijo sin levantar la cabeza del pupitre.

-Es que... Mm... Estoy casi seguro que a Miya le gusta Shoyo todavía...- Continuó. Tadashi acarició su cabellera azabache.
-Tal vez... Lo malinterpretaste. No quiero decirte que creas que Hinata es la persona más fiel, digo... Por algo hay rumores, pero... Tal vez deberías preguntarle.-

-¡Tobi!- Escucharon desde la puerta. El par de Omegas levantaron la cabeza, viendo al Alfa pelirrojo ahí, parado en el marco de la puerta.

-¿Quieres almorzar conmigo?-

El Omega seguía sintiéndose mal, preguntándose si debía decirle algo a Hinata.

¡Eso es lo normal, Hinata era su pareja, debía de haber comunicación!

El pelirrojo lo estaba abrazando, acariciando su cabello negro y soltando feromonas para hacer sentir seguro al menor. Al adolescente no se le había ocurrido otra manera de hacer sentir mejor a su pareja.

Kageyama pensó por unos segundos, tal vez... Tal vez si debía de decirle algo. Que no le gustaba lo cercano que era Atsumu con él, que no le gustaba que lo agarrara de la cintura, que no le gustaba saber que de los dos, el que menos conocía a Hinata era él, su novio.

-S-Shoyo...- Lo llamó. El Alfa agachó la  cabeza.
-¿Sí, Tobi?- El Omega se ruborizó por el sobre nombre.
-Uhm... B-bueno...- Trató de hablar. Hinata lo seguía viendo fijamente.

Y el teléfono del Alfa vibró. Le había llegado un mensaje.
Lo vió, leyó el nombre y volvió a guardar su teléfono sin abrir el chat.

-¿Quién es...?- Preguntó Tobio.
-Tsumu. Me pregunta algo, pero no importa. ¿Qué decías?- El Omega de pronto se sintió cohibido.

Era Atsumu. Otra vez, Atsumu.

-N-no, no era nada importante... ¿M-me sigues abrazando?- Le pidió, el Alfa sonrió antes de asentir. Tomó al Omega entre sus brazos nuevamente, no sin antes besar sus labios y frente.

Hinata llevó a Tobio a su práctica, acarició su mano y antes de despedirse, le besó profundamente.

-Vengo por tí después.- Le dijo antes de sonreír. Tobio asintió y le devolvió la sonrisa.

El Alfa se dió la vuelta y se marchó. A casa de Atsumu.

Eso último, Tobio lo desconocía.