IRRESISTIBLE TENTACIÓN [+21]

CAPÍTULO 10 parte 2/2

Bastián.

 Esa chica me hace perder la paciencia estuve toda la mañana enviándole mensajes, no se digno a responder ni un puto mensaje que le cuesta agarrar su maldito celular y escribir una simple respuesta. No es tan difícil ¿No?

Nadie nunca me ignoro como lo hace ella y eso me molesta mucho pero a la vez me fascina que no me la ponga fácil, ella cree que teniendo esa actitud conmigo va a hacer que yo me aleje pero esta totalmente equivocada lo único que logra es que la deseé aún más.

El que vaya a esa fiesta en vez de venir conmigo me enerva la sangre de solo imaginarla en ese lugar rodeada de hombres hace que me vuelva loco y me duele la cabeza, nadie puede tenerla, es mía desde la primera vez que la vi solo que ella no lo sabe pero me voy a encargar de que hoy sepa a quien le pertenece.

Voy a empezar con ofrecerle un acuerdo, solo con eso me voy a asegurar que el único que la pueda tocar sea yo, nadie más y con el pasar del tiempo voy a buscar como mantenerla a mí lado con o sin un acuerdo de por medio.

Me quedo mirando a un punto fijo de mi oficina pensando todo lo que le voy a hacer a Maddison Lombardi y siento que alguien toca la puerta.

-Adelante -digo a quien sea que este del otro lado.

-Permiso señor Di Marco -es mi secretaria que entra con cara de preocupación- La señorita Sabrina insiste en verlo, le dije que usted estaba ocupado como me dijo pero se niega a irse.

Paso una mano por mi cabeza astiado de la insistencia de esta mujer, me llamo, mando cien mensaje y a todos les respondí que no estaba interesado en verla pero al parecer eso no le bastó y sigue jodiendo.

-Hazla pasar -ordenó, mi secretaria asiente y sale por la puerta.

Pasa un rato y vuelven a abrir la puerta no tengo ni que mirar quién es, porque ya lo sé.

-Cariño, te estuve llamando -me dice acercándose a darme un beso en la comisura de los labios- ¿Porque no me respondes?.

-¿Sera porque te dije que no estaba interesado en verte? -le respondo mirándola fijamente- O es que no te quedó claro.

-Solo te estás haciendo el difícil -me dice acercándose lentamente a donde estoy sentado- Pero déjame recordarte como la pasábamos antes de que tomes esta actitud.

Se sienta encima de mi, empieza a desabotonarme la camisa, por un momento pienso en darle lo que quiere y de paso me saco el enojo que tengo por culpa de esa rubia de ojos grises.

Agarro su cintura y ella empieza a comerme la boca, le sigo el beso, me levanto y la empotro contra el escritorio ella gime cuando me acerco a su cuello, le bajo el cierre del vestido y se lo quito dejándola en ropa interior.

-Ba-Bastian -dice en un hilo de voz- cojeme por favor.

Cuando me desprendo el pantalón quedando en bóxer, me preparo para embestirla y automáticamente algo me frena, en mi cabeza vuelve a aparecer Maddison, mis ganas por ella son mucho más grande de lo que pensé y eso me enfada muchisimo ya que nunca sentí algo así.  

Es una sensación extraña que no puedo explicarla pero no me gusta sentirme así, nunca sentí más que deseo por una mujer y estoy seguro que siento lo mismo por ella al igual que con todas.

Rápidamente me hago para atrás y dejo a Sabrina totalmente confundida, no puedo continuar así, ya me enoje y se me fueron las ganas.

-¿Que paso ahora? -pregunta Sabrina acercándose a mi.

-Nada, solo vete no tengo ganas de ver a nadie ahora -respondo mientras acomodó mi traje.

-No me digas que es por esa puta -rápidamente me doy vuelta molesto por su comentario.