¿Qué pasaría si tu novio te descubre gimiendo el nombre de tu compañera de grupo?
¿Qué tan inocentes y vírgenes creen que son los idols?
¿Existe una razón especial por la cual los idols disfrutan tanto el Hiatus?
JenLisa
Chaesoo
Escenas + 18
GxG
No...
Mensajes de texto, correos o cualquier tipo de lectura.
—Deja de reírte Lisa. —se quejó la coreana mientras arrastraba sus pies sobre la arena.
—Solo estoy revisando las fotografías.
—No le encuentro lo gracioso. —cruzó los brazos.—Esa expresión de horror no me ayuda en nada. No sé en qué momento se teocurrió sacar la cámara para tomarme fotos mientras moría de miedo Lalisa.
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—No podía desaprovechar la oportunidad.
—Pude morir.
—Jennie, primero hubiera muerto el caballo de lo fuerte que estabas apretando su cuello, pobrecito animal.
—No le hubiera apretado el cuello si la tonta de mi novia no le encantará hacer travesuras. —aun con los brazos cruzados sobre su pecho, giró el rostro hasta el mar. —Lo peor de todo es que tenemos que regresar caminando a la casa.
—Es el precio que hay que pagar, seguramente pensaron que nos queríamos robar los caballos.
—No es justo.
—No puedes quejarte, además, no solo te hice gritar del susto. —le guiño el ojo para recordarle lo sucedido al llegar a una cueva después de dejar a los caballos en la orilla de la playa.
—Esa parte si me gusto. —se sonrojó.
—Lo ves. —río mientras caminaban rumbo a la casa de playa.
—Ya me cansé. —después de 5 minutos la coreana paro en seco al percibir el cansancio en sus piernas. —Tampoco me he recuperado totalmente de nuestras sesiones de amor.
—Su transporte Madame. —si bien era cansado caminar sobre la arena, la castaña se inclinó frente a Jennie para que pudiera subir en su espalda.
—Extrañaba esto. —sin esperar mucho, pasó sus brazos por el cuello de Lisa quién al sentir el cuerpo de la coreana en su espalda se incorporó para seguir con el camino a casa.
—Es mi forma de pedir disculpas por el susto que pasaste. —riendo, comenzó a caminar nuevamente hacia la casa con Jennie sobre su espalda.
—En ese caso, debes de compensarme con más cosas.
—¿Más? Pensé que los dos orgasmos dentro de la cueva cubrirían la cuota.
—Hubiera sido suficiente si al salir hubiéramos encontrado los caballos. —le susurró en el oído.
—De acuerdo, pero creo tener la forma perfecta de compensarte. —comentó viendo el cielo estrellado.
—No sé si emocionarme o tener miedo nuevamente.
—Confía en mí Nini.
—Lo hago Lili, pero te conozco.
Trascurrieron 10 minutos más entre bromas sobre el rostro de Jennie y su miedo, la pareja divisó la terraza de la casa. A pesar del cansancio la tailandesa incrementó la velocidad para poder ingresar a la residencia. Sin importarle mucho, subió rápidamente por las escaleras en dirección a la habitación principal aún con Jennie en su espalda, al ingresar al dormitorio se acercó a la gran cama, colocándose de espaldas postrando a su novia sutilmente sobre el colchón.
