SELENOSIS AFABLE 1 ||YOONMIN||

CAPÍTULO 24 " Nuevas Sensaciones YOONMIN"

Para Jimin no existía lugar más placentero que su cama, en el cual podrían fácilmente dormir cuatro personas, le daba paz y tranquilidad. Sus pensamientos eran  invadidos por Lee Yoongi y  en  los millones de calificativos que acompañaban su nombre, porque había pasado una semana desde que casi protagonizaban una escena porno, en plena vía pública, a la luz del día y parecía que de la noche a la mañana se lo hubiese tragado la tierra, no lo había llamado o al menos enviado un estúpido mensaje.

Había llegado al punto de odiarse a sí mismo e insultarse, por permitir que un hombre lo descontrolará y lo llevará a tales extremos, odiaba sentir cómo poco a poco se iba apoderando de sus emociones y el no podía hacer nada por detenerlo.

Lee Yoongi se había convertido en un chip que se había instalado en su cerebro y que no permitía que sus pensamientos se detuviesen. ¡No! era más que eso, No podía permitirle tanto poder.

-No seré yo quien te llamé, ni mucho menos necesito tu presencia. — .

Yoongi paso Todo el día de fiscalía a tribunales y de tribunales a la torre Lee,  apagaba el ordenador cuando su móvil vibró sobre el escritorio .

-Buenas noches fiscal. —saludó sin poder ocultar el cansancio en su voz.

-Buenas noches  Lee,  salió  un  caso  para  ti,  hombre  de  unos cuarenta y cinco años, amordazado, maniatado, varias heridas con arma blanca y dos disparos, ya la policía técnica está en la escena del crimen, te envió la dirección exacta al correo. —la voz del fiscal general, evidenciaba el mismo cansancio que la de él, pero al menos este se iría a su casa a descansar y a él le tocaba abrir un caso a las nueve menos cuarto.

-Perfecto enseguida salgo al lugar de los hechos. — le hizo saber al tiempo que rodaba la silla y se ponía de pie.

—Estaré mañana a las siete en fiscalía con el caso.

Al llegar al estacionamiento, Mr Kim y Mr Wang  lo esperaban, además del personal de seguridad, eran los únicos en la torre, se fue hasta la caseta de seguridad y pidió las llaves de uno de los autos de la firma y se retiró deseándoles buenas noches a los hombres.

-Hoy nos sale madrugada muchachos. —acotó.
Jimin terminó su rutina en el gimnasio y por primera vez aceptó cenar con Kai, su instructor de Tae Bo y boxeo, lo hizo sin titubearlo ya que cuando se lo pidió, precisamente pensaba en Lee yoongi y en su arrogante desaparición del planeta, ya había perdido la cuenta de las veces que lo había mandado a la mierda, pero este no se movía un ápice de sus pensamientos, por lo que decidió buscar un nuevo método.

He pospuesto hasta las reuniones con Seo Joon por ese imbécil porque no sé qué le tiene que no puede verlo y ahora ni señales de humo, pero está muy equivocado si cree que cuando aparezca estaré ahí para él.. .no señor, apenas terminé esta cena llamaré a Seo Joon y me concentraré en mi negocio que es lo que verdaderamente importa, lo demás puede irse al diablo. -cavilaba.

-¿Qué tipo de comida prefieres? —preguntó.

-No soy exigente, pero por aquí cerca hay un lugar donde venden comida muy deliciosa. —.

-Me parece perfecto, pero tienes que aceptarme otra salida para llevarte a comer comida thailandesa, hecha por mí. —

-Lo pensaré. —respondió.

-¡Jimin! —la voz del hombre que la llamaba hizo que el estómago se le encogiera, el grito fue detonante para que el sistema nervioso se descontrolará y los latidos del corazón se instalaran en su garganta.
Volvió medio cuerpo y vio a Lee yoongi bordeando un auto blanco, con su traje gris, era el hombre más elegante que alguna vez hubiese visto, al menos en persona, caminaba hacia él con decisión y aplomó, lo que lo obligó a tragar en seco, sintió las mejillas arrebolársele por lo que se llevó las manos a estas tratando de disimular.