CAPÍTULO 13 Reacciones Inimaginables

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Justo como el día de ayer, fui recibido amablemente por la Sra Laila (Ama de llaves), ya estaba casi listo el espacio y me encantaba como estaba quedando, me subí a la escalera de metros, mientras los trabajadores me pasaban los instrumentos y yo los colocaba en el lugar apropiado.

-Yoongi: entraba al lugar con las manos en los bolsillos, cuando me encontré con un espectáculo que me desconcertó completamente, al ver a Jimin sobre una escalera, con ropa ligera, y la camisa desabotonada, despertando reacciones a mi cuerpo que poco podría esconder si seguía admirándolo, en ese instante fue consciente que los hombres que lo ayudaban, se encontraban igual o peor que yo, pues las miradas de ellos iban más allá, eran lascivas. Sin poder evitarlo, nuevamente sentí esa sensación de angustia - ira que lo invadió la noches anterior, cuando lo vi en el restaurante con el hombre que más odiaba.

-Joven Jimin, bajé de ahí inmediatamente. —le exigí cómo si el fuese de mi propiedad.

-¿Disculpe? — preguntó con sarcasmo.

-Que se baje le he dicho, dejé eso así. —le pedí moderando un poco la exigencia, ante las miradas atónitas de los trabajadores.

-No tengo porque hacerlo, es mejor que me deje trabajar y regresé cuando yo le diga, ahora por favor le pido retírese, que solo está interrumpiendo mi trabajo y desconcertando a mis trabajadores. —me dijo sin bajar un solo escalón.

-No soy yo quien los está desconcertando, joven. —le hice saber al tiempo que estiraba las manos y sin permiso lo tome por la cintura para bajarlo.- Cuando lo baje, adherí su trasero a mi cuerpo y me rozó hasta que lo puse de pie en el suelo, pero aún estaban tan cerca que podía sentirlo, sentí sus nalgas. Todo pasó muy rápido y no sabía a ciencia cierta si lo hice intencionalmente o no, solo era consciente de las miles de emociones que nos azotaban sin piedad y seguía aferrado a mis manos que cerraban su cintura.

Acaricio con su trasero, mi pecho, abdomen y pene y sentía que me iba a morir, a estallar, aun lo sentía pegado a mi y una pulsación de una inevitable erección nos hizo salir del trance de placer en el que nos encontrábamos, siendo conscientes que habían personas a nuestro alrededor, por lo que él se soltó abruptamente.

-¡Esta usted loco señor Lee! —exclame, pero sin la fuerza de voluntad para mirarle a la cara.

- Mis pensamientos no entendían lo que  acaba de suceder, mientras mi cuerpo pedía que ese instante fuera infinito.-El fuego del placer se apoderaba de mi con su cercanía.

-Loco está usted joven Jimin—dije dándome media vuelta y encaminándose.

-Dele las indicaciones a sus trabajadores, lo espero en la sala de inmediato-le dije.

-¿Esto es en serio?- me pregunte.

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SELENOSIS AFABLE 1  ||YOONMIN||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora