El día que ocurrió

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El día que ocurrió.

El oficial de policía había pedido a Gongyoo y a Jungkook que volvieran a la casa, en unos minutos estaría con ellos, Gongyoo tomó a su hija por los hombros para alejarla de la escena y Namra, sintiéndose un estorbo en ese momento, esperaba a lo lejos, cuando Jungkook llegó a su lado, la chica intentó detenerlo, pero el pelinegro pasó de largo y se sentó en el sofá, mirando un punto en el espacio, ya no lloraba, pero eso no quería decir que no se sintiera perdido y roto.

Choonhee lloraba en los brazos de su padre sin control y Gongyoo sólo acariciaba su espalda y trataba de consolarla, pero no había palabras para hacerlo. El llanto del pequeño Taegguk resonó en la casa y la mujer sólo pudo aferrarse más a su padre para que éste no se atreviera a soltarla, Jungkook no se movió de su lugar y Namra tenía la suficiente distancia emocional con la familia de su esposo como para tomar el control de la situación y eso hizo, la chica se apresuró a atender al bebito, quién seguramente había despertado asustado por el ruido de las sirenas, los gritos y las luces.

De pronto llamaron a la puerta y Choonhee no pudo más que llorar a gritos.

Jungkook se levantó del sofá y abrió la puerta para atender al oficial, éste supo que no era un buen momento para entrar y el pelinegro salió y cerró la puerta detrás de él.

-Necesito hacer unas preguntas. -dijo el oficial con calma.

-Hágalas. -Pidió Jungkook completamente serio.

-¿Qué parentesco tiene con el occiso? -preguntó sin mirar a Jungkook, listo para anotar en su libreta. Jungkook no respondió. -¿Señor? Necesito que un familiar o su esposa...

-Cuñado. -dijo. No se atrevía a hablar en pasado de Taehyung.

-Bien, ¿Sabe usted si sufría de depresión o consumía drogas?

-No. -Respondió Jungkook.

El interrogatorio no fue largo, pero era tan doloroso para Jungkook. El oficial terminó informándole que debían ir a identificar el cuerpo para poder proceder con los servicios funerarios en caso de que fueran a realizarlos y muchos otros trámites que debían hacer, el pelinegro asintió entendiendo o eso pretendía, no tenía cabeza para nada, pensaba en todo y al mismo tiempo sentía una espesa nube gris en el cerebro, pero se lo debía. Lo mínimo que podía hacer era hacerse cargo porque Choonhee no sabría qué ropa le gustaría usar ni tampoco qué flores querría, Choonhee no sabía nada.

Jungkook volvió a la casa para hablar con su padre y decirle que iría con el oficial, no dio muchos detalles o al menos no lo recordaba, Gongyoo se encargaría de llamar a los padres de Tae o eso asumió el pelinegro porque para cuando se dio cuenta estaba identificando el cuerpo de Taehyung.

-Es él. Kim Taehyung. -dijo frente a la plancha donde yacía su chico. El forense le dio unos minutos para que se despidiera y todo se sentía tan surreal. Ni siquiera podía hablar porque no sabía qué decirle. ¿Vete tranquilo? ¿Me quedaré y cuidaré de Taegguk? ¿Qué se supone que se dice en esos momentos? La tristeza que sentía en su ser se transformó en rabia. ¿Por qué lo hiciste? ¿Porque no quise volver contigo?

Lo hiciste para lastimarme. Porque yo te lastimé primero por lastimarme. 

Porque ambos nos lastimamos. 

Perdóname.

Estaba tan metido en su debate que ni siquiera sintió que había pasado una hora ahí, sólo observándolo y cuando el forense entró de nuevo, Jungkook sintió que su pecho se estrujaba. -No me pude despedir. -dijo con un hilo de voz. - No le pude decir cuánto lo amo.

Stigma [KookV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora