Capítulo XV

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Viernes, 7 de enero

Me levanté a las cinco de la mañana, salí a correr un rato, me duché y fui a terminar de guardar todo en las maletas para volver a Hogwarts.

Me despedí de Cissy y Lucius, y subí al carruaje junto con mi hermano, Sirius y Regulus, en el otro iban Tom, Mattheo y Draco. Estuvimos hablando casi todo el viaje, así que se nos hizo rápida la llegada.

Cogímos nuestras maletas y nos dirigimos al interior del castillo. Al fondo vi a Pansy y Blaise así que me acerque a ellos.

- ¡Clary! - gritó Pansy y vino corriendo a abrazarme, se lo devolví y después abracé a Blaise.

- ¿Cómo han ido las vacaciones?- les pregunté

- Bien, pero seguro que no tan interesantes como las tuyas - dijo Pansy

- Ni me lo recuerdes - le respondí rodando los ojos

Los demás llegaron y nos dirigimos al gran comedor para el comunicado de Dumbledore.

- Alumnos por favor tomen asiento - dijo - Espero que sus vacaciones hayan ido genial, y hayan vuelto con fuerzas para retomar el curso. Primero deciros que las clases empezaran mañana en el mismo horario de siempre, así que aprovechad el día de hoy para acabar de recargar energías. Y segundo hoy se incorpora con nosotros un nuevo alumno. ¡Denle la bienvenida a Alexander Rosier!

No puede ser, no era suficiente con uno, que ahora son dos.

Miré a mi hermano y este me devolvió la mirada transmitiéndome que él tampoco sabía que era lo que ocurría. Se suponía que Alexander estaba en Durmstrang, que hacía entonces en Hogwarts.

Le pusieron el sombrero seleccionador y como era de esperar salió Slytherin. Así que se sentó con nosotros, justo enfrente mío, al lado de Sebastian.

- Hola Lestrange

- Qué haces aquí Alexander - respondí

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- Qué haces aquí Alexander - respondí. Alexander era el hermano mayor de los Rosier, Félix el mediano y Ruby la pequeña. El problema es que este es el peor de los tres, y su actitud no ayuda en absoluto.

- ¿Qué pasa, no te alegras de verme? - contestó este vacilando

- Para nada - contesté con una sonrisa falsa

- Pues qué pena, porque yo sí tenía ganas de volver a verte.

- Por qué estás aquí - dijo Sebastian

- Tranquilo Sebastian, no es de mí de quien tenéis que preocuparos - respondió con una sonrisa

Mi hermano y yo intercambiamos una mirada, y luego hicimos lo mismo con los Riddle.

Alexander se rio.

- ¿Qué es lo que te hace tanta gracia?- le preguntó Mattheo con una expresión seria

Bloodline | Mattheo RiddleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora