Madre adolescente, madre joven, enamorada ingenuamente, aprende de sus errores, surge de sus cenizas y encuentra realmente un hombre que valga la pena.
#1 en PauloDybala 27/03/24
#1 en Phoebetonkin 30/03/24
#2 en Leandroparedes 30/03/24
#1 e...
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―¿Y qué te dijo la tonta esa? ― Su ex cuñada preguntó mirando hacía Julieta que estaba riéndose levemente por algo que Alicia dijo, Camila volteó y solamente saco un suspiró resignado.
― ¿Que pensas que me dijo? Que sus hijos no están locos, pero parece que es una retrasada, deja todo lo duro en los hombros de su hijo de 4 años, 4 años. No tiene ni 5 años ese nene y tiene toda la responsabilidad familiar en sus hombros, ya quisiera yo que Gio sea así de maduro. ― susurró, quería que su hijo fuese maduro, no que se sintiera comparado con su hermano menor, su ex cuñada suspiró y miro hacía su sobrino que seguía en vida con Mateo Messi.
― Y no sé... ¿Y si hablamos con Paulo? Se que Lean se va a re enojar, pero parece que aquella minita no sabe ni lo que quiere. ― le dijo fastidiada, realmente nunca le cayó bien ni Julieta ni Pilar, las dos eran cuernos de diferentes mujeres, para ella, su cuñada siempre sería Camila, la primera y la original.
― No sé, boluda. No quiero que después se arme bardo por mi culpa, de última tendríamos que hablar con Valen, pero no me siento cómoda hablándole a un nene de 4 años como si fuera el adulto responsable de su familia. ― Camila suspiró resignada mientras veía de reojo a sus hijos jugar con las hijas de Di María.
― Pero parece que lo es. Su mamá parece que sigue siendo aquella minita de 18 años que lo único que aprendió fue que Lean no va a cambiar más, Paulo no es ni su familia de sangre, Lotte parece que no sabe absolutamente nada y bueno, Cande ni sabe hablar todavía. ― Hablo la hermana de paredes mientras era oída atentamente por su ex cuñada.
― Y Leandro sigue siendo aquel pibe pelotudo... ― Un silencio se formó entre ellas dos hasta que vieron como un ángel caído del cielo a Tini, la chica estaba sonriendo y hablando con su padre mientras portaba aquella camiseta del número 7.
Rodrigo.
Aquel nombre paso por su mente en un click mágico. Rodrigo era el segundo papá de Valentino, era su padrino y era su tío, aquel con el que jugaba para bardearlo, lo sabían por que en las reuniones, el jugador no se cansaba de decir que el hijo de Leandro parecía más un adolescente que un nenito.
― Y si le pedimos ayuda a Rodri... ― Confirmó más bien Camila Galante con esperanzas, su ex cuñada miró hacía Valentino con pesar y asintió lentamente.
Rodrigo no era el mejor amigo de Julieta, pero era el mejor amigo de Lean y de incluso, de Paulo. Sí tal vez hablaban con él, él podría llegar a Paulo y Paulo llegaría a la mente trastornada de Julieta, era su única esperanza para por lo menos saber que Valentino iba a alivianar su carga.
― Sos una genia, cami. ― Le dijo su ex cuñada con una sonrisa gigante, ella no demostraba ser tan apegada a sus sobrinos, era verdad, pero no dejaban de ser sus sobrinos, y le preocupaba que todo lo que estaba sucediendo fuese un evento negativo para el futuro de Valentino.
― Ya sé. ― Jodió Camila riéndose mientras veía a Tini con ojos brillosos. Era la única esperanza que les quedaba.
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