Huelva,un finde y miradas

siempre de una boda sale otra

Llegó el día, Marina está muy nerviosa, no paraba de dar vueltas de un lado al otro, las hermanas Gómez estaban con ella la intentaban tranquilizar.

-Y si no llega? Y si se arrepiente de casarse y no me lo dice por vergüenza?

- Y SI? Y SI? vamos él está loco por ti, cómo nos va a venir? No será que estás muerta de miedo?

- Luisi, estoy muerta de miedo, de nervios, no sé qué va a pasar.

- Vamos amiga, todo va a salir bien, os casais y después de la fiesta tendréis una luna de miel increíble, ok? Está vez era la mayor de las Gómez la que daba ánimos a la novia.

La casa había quedado genial, todo relucía y habían puesto un altar en el jardín, frente a el sillas blancas puestas en dos filas de cuatro en cuatro para que todas sus  familiares presenciaran el gran momento.

Los invitados ya estaban sentados en sus sitios, cada uno mirando lo nervioso que estaba el novio esperando a Marina, que se hacía derogar un poco, la espera estaba matando al chico, intentaba disimular pero era imposible.

La música empezó a sonar lo que indicaba que la novia llegaba, Marina caminaba despacio hacia el altar que habían puesto en el jardín,.

Fede tenía una sonrisa de oreja a oreja, se le movían los pies solos en el mismo sitio, el padre de Marina la acompañaba hasta la altura del novio, cuando llegó se dieron la mano, se miraron embobados hasta que el juez empezó a hablar.

Buenas tardes a todos el mundo, estamos aquí para que está pareja contraigan matrimonio, todos los invitados sentados ya con la mirada puesta en el altar viendo como sus amigos se daban el si quiero rodeados de personas que los querían y que estaban felices por ellos.

El juez habló relativamente poco para dejar paso a las personas que querían hablarles a la pareja.

Luisi comentaba que estaba feliz de acompañar a su amiga, que le encantaba ver lo bien que estaba su amiga con Fede.

- Espero que seáis muy felices los dos, que os cuidéis y os respeteis pero sobre todo esperamos todos tener sobrinos rápidos decía riendo.

La mayor de las Gómez se unió a su hermana. - Después de estas bonitas palabras,QUE NO MPIECE LA FIESTA!!!!

Todos empezaron a celebrar, entre bailes, risas, brindis y alegría mucha alegría, que más se podría pedir?

La música sonaba, los familiares y amigos bailaban alrededor de los recién casados, todos lo pasaban en grande.

Luisita no dejaba de mirar lo bien que se veía su hermana con Nacho, pensando que sin lugar a dudas serían la próxima pareja en darse el " si quiero".

La rubia notó los brazos de su chica rodearla por la cintura

- Te ves tan guapa cuando sonríes así, eres la mas bella de toda la fiesta y yo sin lugar a dudas la más afortunada de todos los aquí presentes, por tener a la mejor novia del mundo.

La rubia se dio la vuelta entre los brazos de la morena mirándola a los ojos subiendo una de sus manos y enredarla entre los rizos de la morena para atraerla a ella y besarla, con amor mucho amor, susurrándole en sus labios que la afortunada era ella por tener la mujer que quería a su lado cuando creía que tendría que estar sola en la boda de sus amigos, la morena se mordió el labio y atrajo otra vez a la rubia para besarla otra vez.

La música sonaba y Luisita al escuchar una de sus canciones favoritas sonreia.

La rubia pronto cogió la mano de su chica para llevarla a bailar junto a todos sus amigos, dándolo todo en el baile.

Marina llamó la atención de todos.

- Un momento por favor, ha llegado el momento de tirar el ramo 💐, todas y todos los que quieran cogerlo ponerse detrás, la persona que lo caja será quien se case la siguiente.

Todos se pusieron para acceder a el, sin saber que pasará.

Marina cogió el ramo, se dio la vuelta como para tirarlo, pero paró volviendo a dar la vuelta y caminando directa hacia la rubia que no entendía nada.

- Espero que esté sea el ramo que quieras llevar en tu futura boda, dijo Marina dándole el ramo a una rubia que no entendía nada, haciendo señales para que se diera la vuelta.

Luisi se volvió para encontrar a una morena de rodillas muy muy nerviosa con una sonrisa en la cara y mostrándole una caja roja abierta con un anillo. La rubia se tapo la boca y empezó a temblar.

- Cariño, se que puedes pensar que es muy rápido pero estoy segura de hacer lo que más deseo en el alma. Quiero, si tú me lo permites entrelazar nuestros dedos y caminar por la vida unidas con nuestro amor, viendo cada día como sonríes y como sacas ese carácter que me encanta y que a veces me vuelve loca, deseo que seas lo último que roce mis dedos, mi piel cada noche y ver cada amanecer junto a ti, desde el primer momento que te vi me jure que si habia un mínimo de posibilidad de estar a tu lado, primero como amigas, después como novias y ahora si tú me dejas como mujer y mujer lucharía siempre por verte cada sol y cada luna, porque nos hagamos felices la una a la otra. TE QUIERO RUBIA, NADA ME HARIA MAS FELIZ QUE SER TU ESPOSA.

Luisi no salía de su asombro, reia de los nervios y a la misma vez lloraba de felicidad.

- Amor, claro que sí, nada me haría más feliz que estar a tu lado en los largos caminos de la vida.

Mientras las chicas se besaban y todos aplaudían la música sonó con una canción perfecta para la ocasión.

Hasta aquí el capítulo de hoy, espero que os guste.

Perdón por las faltas de ortografía ❤️