Relatos eróticos breves.

Izaro. Conozco tus fantasías más sucias.

A Izaro. Eres una princesa y eres mi norte, pero hasta tú, sueñas húmedo. Te quiero, hermana.

Debe de ser un sueño, porque es tan real que me estremezco, pero yo no soy así. Ni loca. Me he quedado sola en una fiesta donde no conozco a nadie. Acabo de ver a Ane y Olatz irse, y ellas eran las últimas amigas mías que quedaban aquí. Ni siquiera se han despedido de mí y eso es muy extraño. Debe ser un sueño porque no me ha importado que se fueran, es más, creo que yo les he dicho que me dejarán aquí y que yo iré al hotel después, pero ni siquiera sé bien donde estamos. Hace calor y todo el mundo va vestido de verano, pantalones cortos y camisetas ellos y vestidos muy vaporosos y provocativos las chicas. Hasta yo tengo un vestido veraniego blanco, tan corto que debo tener cuidado al bailar para no enseñar demasiado. Pero el vestido es real, es el que compré hace diez años en Ibiza y que nunca me he puesto porque me parece demasiado explícito. Supongo que estaremos en algún lugar tropical o así, porque estamos en noviembre. Me siento muy bien y creo que he debido beber un par de cervezas. A mi, el alcohol no me sienta bien y por eso casi nunca bebo. Con lo de que no me sienta bien, me refiero a que cuando bebo, me desinhive mucho y a veces he cometido alguna locura. Joder, acabo de ver al chico ese y he recordado algo. Él está en la barra pidiendo y hace unos minutos estábamos hablando los dos y creo que se ha ofrecido para ir a sacar algo de beber. Quizá cuando eso han venido Ane y Olatz para decir que nos íbamos y yo les he dicho que voy a esperar a tomarme una cerveza con ese chico, porque la verdad es que es encantador. Bueno, y monísimo. ¿ Que tendrá?, ¿ veintiocho años?. Quizá alguno menos, pero se ha mostrado amable y me ha parecido muy listo y simpático. Y atractivo, aunque eso a mi no me importa, porque tengo novio y él es el único hombre del mundo para mi. Si, Ander, mi novio es guapo y tiene un cuerpazo que a mi me encanta, pero además coincidimos en muchas cosas y nos llevamos genial. A ver, que somos pareja desde los quince años y tenemos treinta y cuatro ya. El secreto está en no discutir nunca y si se discute, en tener una reconciliación temprana y fogosa jajaja. Hasta eso funciona genial entre Ander y yo. Tenemos sexo de calidad todas las semanas al menos un par de veces. Así que el chico este, no me va a enseñar nada a mi, pero si estoy esperándole es porque me ha caído muy bien y me apetece seguir charlando con él. Ahí viene con dos botellines. Se llamaba Carlos, al menos eso me parece.

Carlos-. Toma Isaro. Tu cerveza.

Yo-. Es Izaro. Gracias Carlos, eres encantador.

Carlos-. Que va, pero reconozco que estoy encantado de estar contigo. Me pareces la mujer más completa de toda la discoteca.

Yo-. ¿ Que quieres decir con que soy la más completa?.

Carlos-. Bastante bien lo sabes. Eres preciosa y tienes un cuerpo fantástico. Eres simpatica y abierta y además estás hablando conmigo. Y sobre todo te mueves como una bailarina.

Vaya, es verdad que hemos estado los dos bailando antes y ni me acordaba casi. Pero tengo que dejarle las cosas claras a Carlos antes de que se confunda conmigo.

Yo-. Carlos, sabes que tengo novio, ¿verdad?.

Carlos-. Tu sabes que yo también. Solo estamos hablando, tomando una cerveza y bailando. Relájate y disfruta.

Eso me gusta más. No quiero que nadie se piense que soy una provocadora, así que si Carlos sabe que conmigo no va a tener nada hoy, me tranquiliza. Bailemos entonces. Estoy fluyendo, me dejo balancear por la música latina que inunda el ambiente. La cerveza está fría y entra muy bien, suave pero amarga. Me gusta y creo que me está ayudando en mi fluir. Creo que a él también porque baila igual que yo, imita mis movimientos y los acompaña. Estoy empezando a sudar, menos mal que esta canción es más lenta y así puedo descansar un poco, porque hace calor, tengo mucho calor. Carlos casi me pide permiso para tocarme y poder bailar más agarrados, más cercanos esta balada y ese detalle me ha conmovido. Es todo un caballero, pero él también está sudado. Espera, ¿ que hace?. Se ha quitado la camiseta y con ella se ha secado el sudor.