Pᴀʀᴀ ᴍɪ ᴏ ᴘᴀʀᴀ ɴᴀᴅɪᴇ ᴍᴀ́s [ℬ𝒶𝓀𝓊𝓉ℴ𝓰𝒶]

05

Toga recibía llamadas a diario del rubio, esta lo evitaba e ignoraba sus llamadas. Incluso llegó a llamar a Uraraka para hablar con la rubia. Se negó tantas veces como pudo a hablar con él pero este no se cansaba. Mientras salía a comprar encontró a la peliverde, iba con quién parecía ser su madre, quería ayudar a Bakugo a que volviera a estar con ella, se sentía culpable por qué su relación se hubiera roto así, pero quería que fuese capaz de dejar su asqueroso orgullo de lado para la rana. Suspiró y se acercó a ella.

-Tsuyu-Llamó la rubia.

Esta se giró a mirarla y le sonrió.

-Himiko, ¿que tal? Kero
-Bien, ¿y tú?
-Bien, vengo con mi madre a comprar kero
-Me alegro, oye... ¿Podría hablarte de algo importante en privado..?-Preguntó apartando la mirada.

Esta asintió después de mirar a su madre y se alejaron un poco.

-¿Como vas después de terminar tú relación con Bakugo..?-Preguntó sin mirarla.
-La verdad es que bien, me da pena porque realmente quería que funcionase, pero me hizo darme cuenta de que si no era por eso ibamos a terminar por otra cosa kero
-Ya...
-¿Por qué?

Toga no respondió, una parte de ella se negaba a ayudarlo por su odio hacia él, pero si culpa la obligaba a hacerlo.

-¿Te gusta Bakugo? Kero
-¿¡Eh!? ¡No no!-Respondió negando con la cabeza rápidamente.
-No pasa nada si te gusta, no me voy a enfadar contigo, el y yo ya no somos nada, no soy quien para decidir por tí ni por él kero
-¡No, no, no me gusta!-Insistió la rubia.

Tsuyu asintió y Toga suspiró.

-El te echa de menos...-Dijo.

Tsuyu no respondió e inclinó levemente su cabeza.

-¿Te lo ha dicho a tí? Kero
-Si... Porque soy una idiota, no se controlar lo que bebo y estando borracha le dije que podría ayudarlo a reparar vuestra relación...
-Oh... Pues... Lo siento, pero creo que no vas a poder ayudarle kero
-Lo imaginaba, pero me sorprendió mucho que acudiera a mí varios días después de decírselo y que se negase...
-Imagino que porque sabe que somos amigas kero
-Quizá...
-Bueno, pues que lo sepa, no quiero volver a intentarlo, ahora mismo estoy bien sola, y creo que realmente no necesito a nadie kero

Toga no estaba satisfecha con su respuesta y asintió poco convencida. Ambas se despidieron, la madre de la peliverde la llamaba para que la ayudase y se fue. Sacó su teléfono, antes de llamarlo se quedó viendo la pantalla callada y suspiró.

B:

¿Toga?

T:

Lo he intentado, y me ha pedido que te diga, que no lo intentes, está bien sola y que por ahora no busca tener una relación con nadie, lo siento

B:

Lo imaginaba...

T:

No puedo hacer más

B:

Ya...

T:

Debiste haber cambiado antes con ella, creo que tuviste muchos años para cambiar lo que eres...

B:

...

T: