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Toga trataba de dormir, no podía quitarse de la cabeza la idea de que estaría sola toda su vida. Giró su cabeza viendo la chaqueta del rubio colgada en una percha y se bajó de la cama. Agarró una de las mangas y la miró. Suspiró cerrando los ojos y agarró la chaqueta para llevársela a la cama. No tenía ni idea de por qué sentía la necesidad de dormir abrazando la chaqueta de una persona que se supone que odiaba.

Cuando despertó al día siguiente aún abrazaba la chaqueta y la miró.

-Himiko, ¿estás despierta?-Preguntó Uraraka desde el otro lado de la puerta.
-Si-Respondió.
-Bien, ven rápido, he preparado el desayuno
-Vale

Se incorporó quedando sentada en el borde de la cama frotando sus ojos y volvió a mirar la chaqueta. Frunció el ceño y se levantó para después salir de la habitación.

-¿Que tal has dormido?-Preguntó la castaña.
-Bueno... Podría haber sido peor...
-¿Por qué?
-No pude dormir cuando quise
-Te entiendo, también me ha pasado muchas veces pensando en las misiones o cosas así, ¿sabes? Ya sé que necesitas-Dijo sonriendo ampliamente.
-¿Que?
-¡Una cita en un spa!
-Eso es muy caro, no tengo dinero para ello
-Pero yo si
-No es necesario Ochako...
-¡Por su puesto que lo es! Un spa te ayudará mucho a deshacerte de ese estrés que tienes, te lo prometo

Toga no estaba convencida pero terminó aceptando solo por ver su cara de ilusión cuando se lo mencionó. Cuando acabaron de desayunar la castaña salió a una cita con el peliverde y dejó a la rubia prepararse para ir al spa. Mientras preparaba su mochila comenzó a sonar su teléfono y lo miró. El rubio la llamaba y cerró los ojos unos segundos.

T:

¿Que?

B:

Sólo quería saber cuando me devolverás la chaqueta

T:

Ahora tengo que salir, te la llevaré

B:

Bueno, pues te espero en mi casa

T:

Como quieras

Colgó la llamada, agarró la chaqueta y su bote de perfume. Cuando presionó el botón varias veces miró la chaqueta.

-¿Esto le molestará..?-Pensó mirando ahora el bote de colonia.

Se encogió de hombros y salió para ir a casa del rubio. Cuando llegó este la recibió con su típica camiseta negra de tirantes y sus pantalones largos negros.

-Toma-Dijo la rubia mirándolo.

Bakugo miró la chaqueta y luego a ella. Se apartó un poco indicándole que pase pero esta se negó.

-No entraré, tengo cosas que hacer
-Sólo serán unos minutos
-No tengo tiempo
-¿Por qué tanta prisa?
-Tengo una cita en un spa, ¿algo más?
-Si, hablé con Asui
-Bien por tí
-Me contó que si que habías hablado con ella...
-Ya te lo dije
-Ya, me ha dicho exactamente lo mismo que me dijiste tú, que no quería estar con nadie más...
-Ya, te lo mereces-Respondió.

Bakugo la miró callado y Toga apartó la mirada.

-Tienes razón...

Pᴀʀᴀ ᴍɪ ᴏ ᴘᴀʀᴀ ɴᴀᴅɪᴇ ᴍᴀ́s [ℬ𝒶𝓀𝓊𝓉ℴ𝓰𝒶]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora