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Hacían algunos minutos que habían llegado, estaban teniendo problemas con las habitaciones del hotel, habían pedido una habitación para Bakugo y Toga con camas separadas y estaban todas ocupadas.

-Cuando llamé pregunté por una habitación con camas separadas y me dijeron que sí...-Dijo Masaru confuso a la chica de la recepción.
-¿Quién le atendió?-Preguntó la mujer.
-Fue un hombre, no sé su nombre, pero me dijo que si había una habitación libre...
-Pues lo sentimos, pero parece que según el registro hizo usted dos llamadas, y en la primera alguien ya reservó la habitación que quedaba libre, quizá el chico que le atendió no era consciente de que la habitación ya estaba ocupada... Sentimos el malentendido, como disculpa le descontaremos el pago de esa habitación que le asignaremos durante tres días...

Masaru suspiró y asintió. Miró a ambos rubios mientras la chica buscaba la llave y se rascó la nuca.

-No sé si os importará dormir en la misma cama... Podríais poner una almohada en el medio y ya...-Dijo sonriendo nervioso.

Bakugo suspiró y asintió. A Toga no le importaba en lo más mínimo, pero no iba a demostrarlo, tenía que mantenerse firme y asintió.

-Aquí tienen las llaves, si necesitan cualquier cosa utilicen el teléfono del servicio al cliente para pedir cualquier cosa, está en ambas habitaciones
-Gracias-Respondió Masaru recogiendo las llaves.

Agarraron sus maletas y fueron al ascensor para llegar a sus habitaciones. La habitación de los padres del rubio estaba frente a la de ellos y cuando entraron la rubia se sorprendió.

-Me lo esperaba más pequeño, pero está bien-Dijo dejando la maleta junto a la puerta.
-Si, no está mal...

La rubia dió una vuelta por la habitación curioseando y el rubio la miró.

-Oye...

Toga lo miró y este se rascó la nuca.

-Si te molesta que durmamos juntos puedo quedarme en el sofá...
-No, no, no hay problema, podemos hacer lo que ha dicho tu padre de usar la almohada y ya... Además... Tú necesitas dormir en la cama por tus costillas...
-No importa, quiero que sea lo menos incómodo posible...
-Tranquilo, la almohada y ya

Bakugo asintió y se acercó a la puerta del baño.

-Voy a darme una ducha, odio el olor a hospital...

Toga asintió y se sentó en el sofá a ver su móvil. Mientras el rubio se duchaba el teléfono de este comenzar a sonar sobre la cama y se levantó para verlo. Era su madre, no iba a entrar al baño así que solo llamó a la puerta.

-Katsuki, te llama tú madre
-Respondele tú, pero vamos, menuda gilipollecez que esté en la habitación de enfrente y me llame...

La rubia miró el teléfono y respondió.

M:

Katsuki, ¿vienes con tu amiga a la playa? Se va a hacer de noche dentro de poco y tú padre quiere ver el anochecer

T:

Señora Bakugo, soy Himiko, el ahora está en la ducha, pero se lo diré cuando acabe

M:

Está bien, pero que sea rápido, está a punto de caer el sol

T:

Vale

La mujer colgó y Toga miró el móvil.

Pᴀʀᴀ ᴍɪ ᴏ ᴘᴀʀᴀ ɴᴀᴅɪᴇ ᴍᴀ́s [ℬ𝒶𝓀𝓊𝓉ℴ𝓰𝒶]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora