Pensar

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Harry permanecía allí, en la penumbra de la habitación, sus pensamientos revoloteando en su mente mientras observaba a Megan dormir pacíficamente. La experiencia había sido diferente a lo que esperaba, y aunque no había sido tan incómodo como temía, tampoco había sido exactamente lo que había imaginado.

Se sentía un poco confundido por sus propias reacciones y emociones durante el encuentro. Había momentos de placer y conexión, pero también una sensación de desconcierto y reflexión. Se preguntaba si había hecho lo correcto al acceder a la experiencia, y si afectaría su relación con Megan de alguna manera.

Sin embargo, en ese momento, lo más importante era el amor que sentía por Megan. Sabía que juntos podrían superar cualquier obstáculo, incluso este ¿no es asi? No debe porque tener dudas, va a ser asi.

Porque así era como Harry lo veía: Megan era el amor de su vida. Desde el momento en que se conocieron en la universidad, su conexión había sido instantánea. Recordaba con cariño cómo habían empezado a compartir almuerzos y a acompañarse a las clases, construyendo una amistad sólida que eventualmente floreció en amor.

A medida que los años pasaban, su relación se fortalecía. Harry se graduó y encontró un trabajo en una oficina de abogados, mientras Megan continuaba con sus estudios en periodismo. A pesar de las demandas de sus carreras, siempre encontraban tiempo para estar juntos, apoyándose mutuamente en cada paso del camino.

Ahora, con casi cuatro años de noviazgo a sus espaldas, Harry miraba hacia el futuro con optimismo y esperanza. Sabía que habría desafíos por delante, pero estaba seguro de que juntos podrían superar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino. Estaba ansioso por los próximos pasos en su relación: mudarse juntos, quizás casarse algún día y, eventualmente, comenzar una familia.

En ese momento, Harry se sentía agradecido por tener a Megan a su lado, y estaba decidido a hacer todo lo posible para hacerla feliz y construir un futuro juntos.

Nada ni nadie podía cambiar el curso de su vida con Megan. Aunque la experiencia había sido inesperada y desafiante, se dio cuenta de que su amor por Megan era inquebrantable y que juntos podrían superar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino.

Decidió que el trío sería solo un episodio en su relación, una experiencia que compartirían juntos y que no definiría su futuro. Estaba seguro de que, con el tiempo, podrían superar cualquier duda o conflicto que surgiera a raíz de ella.

Lo más importante para Harry era su relación con Megan y el amor que compartían. Estaba decidido a concentrarse en eso y en construir un futuro sólido y feliz juntos, dejando atrás cualquier preocupación o incertidumbre que pudiera haber surgido del trío.

TRIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora