Winchester Soul ━━ the vampire diaries, supernatural

Seis; Destrucción de los hombres

KOL MIKAELSON

—Vaya, vaya. Ya era hora. —Recibí a Rebekah con un tono burlón.

—Fuera de mi camino. —Bramó intentando empujarme.

—No llegaste a dormir, qué escándalo. —Mi hermana pareció irritada por mi tono de voz. —Espero que no sea por ese plebeyo, ¿Matty, se llama?

Molestar a Rebekah es una de mis tantas pasiones. Ver como se irrita por cualquier cosa que le diga con ese tono burlón me divierte demasiado.

—Si no cierras la boca te voy a tirar todos los dientes. —Amenazó y me reí.

—No, por favor no. No los podré usar en mi cita de hoy con tu amiguita Lorelai. —El rostro de Rebekah ardió en furia y miré atentamente a Klaus que borraba cualquier rastro de diversión de su rostro.

—¿Qué dices, hermano? —Preguntó levantándose del sofá para acercarse a nosotros.

—Llegas a hacerle algo, Kol, y te mato. En serio. —Rebekah me apuntó con su dedo mientras se acercaba a mi de forma amenazante. Solté una risa burlona.

—Vaya, ¿Esa imagen tienen de mi? —Llevé mi mano a mi pecho ofendido y Klaus me escaneó con su seria mirada. Reí internamente.

¿No les dije? Amo molestar a todos mis hermanos, no solo a Rebekah. Con ella es más divertido porque es la que más se molesta pero Klaus no se queda atrás. Una vez le hice una broma y me encerró en un ataúd por un siglo. Está loco.

Durante el baile logré notar que Klaus estaba muy interesado en Lorelai y cuando le pregunté me negó todo, por lo que decidí pedirle el número a Lorelai y programar una cita. De esa forma Klaus herviría de furia, me amenazaría para que me aleje y así podría burlarme de él por una cuantas décadas.

—Me voy, tengo que llegar temprano a mi cita. —Me mofé de Klaus con la mirada y escuché a Rebekah amenazándome, pero no le hice caso.

No iba a hacerle daño de ningún tipo a la chica, eso no estaba en mis planes. Me caía bien después de todo, además es preciosa.

Sentado en una de las mesas cerca del gigante ventanal del Mystic Grill, vi llegar un auto negro algo antiguo pero bellísimo. De este bajó Lorelai agitando su cabello con el viento y sonreí de lado. Preciosa.

LORELAI WRIGHT

—¿En serio irás a una cita con Kol Mikaelson? —Caroline preguntó enojada.

—Pues claro, prometió pagar todo y además estoy aburrida. —La rubia bufó.

—¡No puedes ir! —Gritó y la miré haciéndome la confundida.

—¿Por qué te comportas así? ¿Qué te hicieron los Mikaelson?

—¡Ellos mat- —Se tomó unos segundos para inspirar aire. —Nada, déjalo. Ve con el Mikaelson ese, no me importa. Solo cuídate. Cualquier cosa rara que veas, mándame un mensaje y estaré allí en dos minutos.

Reí. —¿Dos minutos? Estamos algo lejos del Grill.

—Te sorprenderías de las cosas que puedo hacer. —Fruncí el ceño. Carajo, no por favor.

—Buenos tardes, estrellita. Hoy estás preciosa. —Halagó Kol a penas tomé asiento frente suyo. Reí.

—Tú no estás tan mal. —El vampiro puso una mano en su pecho ofendido.

—¿No "tan mal"? —Dijo con la ofenda clara en su voz. —¡Soy hermoso! —Me burlé.

—No te voy a subir el autoestima de esa manera.