Capítulo 8: Bajo Asedio

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Hace tres años, las hermanas de la desesperación, hundieron el mundo en el caos. Enoshima Junko, la mente principal de todo el plan, había causado la caída de la academia Pico de la Esperanza, utilizando los mismos estudiantes contra esta.

Cuando la oscuridad cayó y el Team Despair, del cuál Enoshima era la jefa, se dispuso a causar desesperación, finalmente nació la luz. Una resistencia, llamada Hope Resistance. Un grupo de personas que salvaron la última persona definitiva, una ex estudiante de Pico de la Esperanza. Debido a que la mayoria de los estudiantes no habian logrado graduarse antes del comienzo de la tragedia, se los consideraba aún cómo tales y se le asignó la tarea de salvarlos a la última aún en libertad.

¿Pero cuánto puede luchar la esperanza contra la desesperación?

— Al fin y al cabo, la desesperación es sólo algo necesario para que la esperanza brille aún más.

Aquél albino que hasta ese momento había estado leyendo un libro, habló a la nada, antes de levantar su mirada y observar la situación afuera de la ventana del carro con una sonrisa.

—★—

En las últimas horas, Yoshie había estado vigilando con gran atención la situación en la academia Saishu del mundo virtual. Su modificación de recuerdos para Tsumugi funcionó, tanto que realmente creía ser una estudiante definitiva.

— ¿Quién se hubiera imaginado que un día tendría esta oportunidad?

Una gran sonrisa de satisfacción surgió en sus labios, mientras apoyaba su espalda en la silla, estirando ligeramente sus brazos.

Tsumugi Shirogane probablemente era la segunda persona que más odiaba, pues Enoshima Junko era la primera. Por su culpa, había perdido a su familia. Nunca se lo perdonaría.

Cuando los robots Monokuma atacaron a su familia, acabando con ellos, creyó que sólo había sido mala suerte, una broma de mal gusto de parte del destino. Sólo más adelante descubrió que la misma Shirogane ordenó la eliminación de su familia. Aún no sabía exactamente porqué, pero saber la razón no borraría lo ocurrido.

Observó la hora en el computador y, luego de hechar un rápido vistazo a la situación de su amiga en aquel mundo digital, decidió ir a comer algo. Claro que llevó consigo el celular que usaba Alter Ego para hablarle, por si acaso.

Cómo siempre, una vez salió del cuarto cerró la puerta a llave. Se miró alrededor, notando algunos de sus compañeros de la resistencia caminar por el pasillo bostezando. Los saludó con la mano y un movimiento de cabeza, antes de ponerse en camino hacia el comedor.

Una vez llegó a su destino, se sorprendió un poco de que no hubiera más gente en el lugar, pues usualmente estaba lleno de otros miembros de la resistencia. Supuso que estarían ocupados con el asunto del regreso de Munakata Kyosuke. Con los estudiantes definitivos bajo el control de Junko, sin duda había que tener mucho cuidado.
Suspiró un poco mientras pensaba aquello, viendo que había arroz con pollo listo para ser comido sobre la mesa de la cocina. Sólo tenía que calentarlo.

— Ah, Nishimura. Aquí estabas.

— ¿Hm?

Yoshie volteó a ver quién había dicho su nombre y se encontró con uno de los jefes de la resistencia. Su superior y uno entre los primeros en reunir la resistencia en un lugar seguro y darle confianza sobre Harumi.
También era uno de los pocos que poseía muchas creaciones de Miu Iruma, al ser familiar de una de las compañias a quién la inventora cedió sus creaciones.

Seguía pensando que fue muy estúpido de parte de la inventora definitiva.

— Señor, buenos días. ¿Puedo ayudarle en algo?

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