Corazón Herido

capítulo 15

Después de unos minutos de espera en la casa de Sebastián llega Oscar junto   la chica que estaba manejando el otro día, y como pueden imaginar, no me acuerdo de su nombre.

Cuando llegamos al colegio salgo mandada a mi casillero para organizar los cuadernos del día y todas esas cosas.  Después de eso me dirijo al salón mientras reviso el teléfono distraídamente.

De la nada me tropiezo con la espalda de alguien. Por eso mi teléfono sale volando directo al suelo. Rápidamente me apresuró a agarrarlo y ver si sigue vivo o no.

Cuando pongo mi mano sobre el teléfono otra mano se posa sobre la mía. De un salto de paro, deshaciendo el contacto. Entonces veo de quién se trata.

Resulta ser Luca, el chico popular o el chico malo del colegio.

Verán, aunque no me relaciono con nadie del colegio, me entero de muchas cosas. Con respecto a Luca, puedo decir que todo el instituto lo conoce. Es mejor conocido como el chico inalcanzable, por el que todas las chicas babean, se mueren, y se vuelven locas por estar a su alrededor. En este punto de mi vida, pensó que es ridículo hacer esas cosas por un chico.

— Parece que se te callo algo — me dice en su clásico tono de chico super lindo y popular estirandome el teléfono — Soy...

— Se quién eres — le cortó bruscamente — más de medio instituto te conoce.

— Ok princesa, tranquila.

Por alguna razón, me siento rara por como me llamo, no me gusta como suena esa palabra en su boca.

Pero, como se su teatrito de chico atento y esas estupideces, le pasó por un lado, siguiendo con mi camino.

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Ya las clases terminaron, gracias al cielo y es viernes, mañana es sábado, lo que quiere decir que hoy tengo maratón de películas o de series, una de ambas.

Como me vine con los dos estúpidos, me regreso con los mismos. En esta ocasión, decidimos irnos caminando.

Ahora mismo están peleando por no se que, pero no les presto mucha atención, lo que se, es que me llevan a mi casa, caminando, al menos no estoy sola, y eso es lo único relevante para mí.

— ¡Juliette! — Oscar me chasquea los dedos al frente de la cara para llamar mi atención — dile a el que yo tengo la razón.

— ¿Ah?, me perdí, ¿En que momento pase a ser parte de la conversación?

— Lo que pasa es que este idiota prefiere y dice que al Real Madrid es mejor que el Barcelona — reclama Oscar ofendido, como si eso fuera la peor blasfemia del mundo — por favor dile que eso no es así.

— Deja lo mentiroso, no hay nada como el Real Madrid — espeta Sebastián ofendido.

Entonces se pusieron otra vez a pelear como críos por tener la maldita razón.

— A ver a ver — les digo a ambos, poniendo una mano al frente de cada uno — es ridículo que peleen de ese forma por ver quién es mejor, pero desde mi opinión profesional — les digo haciéndome la importante — el Barcelona es lo máximo — suelto con una sonrisa al ver cómo reaccionan.

Oscar me dio su aprobación chocando los puños. En cambiooo... Sebastián se cruzó de brazos como un niño pequeño y me pone mala cara, como si le hubiera quitado su chuchería favorita.

— No puedo creer que le vallas al Barcelona. Esperaba que tuvieras mejores gustos.

— No, aquí la cosa es al revés — le dije señalando a ambos con mi dedo — la de lo buenos gustos soy yo, y esperaba más de ti, pero como le vas al Real Madrid — digo haciendo un gesto para que se valla — te puedes ir, ahora me cae mejor Oscar — digo  exagerando la situación.