Día a día ツ 2° Temporada

Celos

- Applejack.- Soltó el chico acercándose a la rubia y extendiéndole la mano.

- Tú!- Contestó la ojiverde aceptando la palma y levantándose con su soporte, las demás observaban aún en el suelo confundidas, Rainbow algo molesta.- No volví a saber de tí luego del tremendo rumor que se esparció. Donde estabas?!.- Le reclamó.

- Bueno...- Caminó hasta posicionarse frente a Rainbow con una mirada desafiante y extendiendo su mano para levantarla.- Las malas lenguas causan daño.- Fingió ser victima y Adagio rió para sus adentros.- Me sentí mal por aquellos rumores y me sentí sin ganas de asistir.- Rascó su cabeza con una sonrisa gentil.- Temí por lo que fueran a decir los demás, lo siento.

La peliarcoíris rechazó descortés, escupiendo a un costado del césped, seguido de apartar con su mano la del chico y ponerse de pie por si misma, con cierta expresión de enojo.

Applejack desvió su vista algo tensa por la actitud de la deportista y la incómoda situación.- Cierto... Tú también fuiste víctima.- Contestó, mirando a la peliarcoíris.

- Bueno.- Interrumpió Twilight poniéndose de pie junto a las demás.- Ahora tenemos otras priorid- Fue interrumpida por una fuerte cachetada por parte Sunset, el mundo pareció detenerse por unos instantes mientras los rostros de sorpresa se hacían presentes.

La risa de Adagio comenzó a hacerse más sonora mientras descendía.- Lo extrañas, verdad?- Le dijo a Sunset con una sonrisa desafiante.- Ese poder.

- No!- Gritó Twilight al notar lo que sucedía, la magia de Adagio, corrompía a la ex villana. - Sostuvo las mejillas de la pelirroja.- Sunset mírame! Resiste!

Pinkie tomó la mano de la hechizada.- Por favor!- Gritó.- Eran realmente extraños esos momentos donde actuaba muy seria.

-B-Basta!- Gritó Sunset sujetando su propia cabeza.- No puedo, lo siento!

Adagio reía con fuerza.

- Rainbow!- Gritó la ojiverde a su novia, en señal de que aprovechase que la enemiga no estaba en el aire y se encontraba distraída.

La peliarcoíris se abalanzó rápidamente sobre el objetivo y antes de que pudiese contarlo, se encontraba sujetada por la deportista y por el lazo de Applejack.

- Siempre llevas eso contigo?- Preguntó Rarity asombrada.

- Es conveniente, no?- Contestó la ojiverde sonriente.

- Pero qué! Como?!- Gritó con frustración y enojo, liberando por error a Sunset de su encantamiento.

- Sin mi velocidad no seré un carro, pero soy genial.- Contestó con orgullo.- Y mí manzanita lo sabe.- Observó al castaño con migraña en un ojo.- Porque ella también lo es.

-Esto es excelente.- Soltó Twilight, acariciando su mejilla.

- Realmente voltearon la situación en un segundo queridas.- Halagó la modista.

-Si aún no sabemos cómo extraer su magia.- Comentó la vaquera.

- La retendremos hasta averiguarlo.- Culminó la peliarcoíris con una sonrisa triunfante, chocando los cinco con su novia y notando la pesada mirada de Caramel.

- Eso sería secuestro.- Comentó Celestia llegando a la escena.

- Por eso la mantendremos... "Castigada" en la dirección, con ayuda de ustedes.- Siguió Luna, "transformando" la situación y guiñando el ojo.

- Creo que...- Soltó Sunset con voz débil y las demás giraron su vista.- No me siento...- Sus ojos se cerraron y cayó a bruces contra el suelo.

-Sunset!- Vociferaron Twilight y Pinkie al unísono, arrodillándose a la altura de la pelirroja para sostenerla, y segundos después mirarse mutuamente algo incomodas.

La modista notando la tensión, decidió actuar.

- Eh... Queridas, ustedes encarguense de Adagio, yo llevaré a Sunset a la enfermería.

- Estás segura de poder llevarla sola?- Contestó la peliarcoíris.- Fluttershy podría ayu...- Se frenó al refrescar su memoria, ouch, era algo que aún le costaba asimilar...

Todas desviaron las miradas con cierta tristeza e incomodidad, incluyendo a Fluttershy, quién se había mantenido en silencio todo el tiempo, abrazando sus propios brazos con inseguridad.

- Yo...-Suspiró.- Vamos.- Dijo la modista a la amarilla, tomando uno de los brazos de la pelirroja y poniéndolo sobre su hombro, siendo seguida por la otra, quién hizo lo mismo del otro lado y se alejaron en silencio.

- Adagio, quién sonreía por la incomodidad de las chicas, cayó nuevamente en cuenta de su posición, sus ojos se posaron en Caramel, suplicando ayuda, sin embargo, a su juicio, ellos habían hecho un trato, el había cumplido y ella le había pagado... No le debía nada.

*Flashback*

- Recuerda, vas al mundo pony le das ésto a dos cambiantes.- Dijo pasándole dinero.- Los seres de los que te hablé, les muestras estás dos fotos.- Le dió dos fotografías, una de el mismo y otra de Applejack.- Les pides que los imiten y que se besen.

- Bien.- Contestó el castaño con molestia.-  Pero conste que solo porque necesito el dinero y sé que Applejack se recuperará de eso. Todos volverán a amarla en poco tiempo.- Desafió.

Adagio lo miró con disgusto y reto.

Caramel cambió  su expresión de molestia por una sonrisa maliciosa.- Y ya no tendrá a esa pequeña amenaza de colores detrás de ella olfateandole el trasero.

- Si verdad? Ha de olerle a flores.- Contestó la rubia y ambos rieron estrechando la mano. - "Por fin nos estamos  entendiendo"...- Pensó para si misma.

- Pero jamás saldrá de tí que yo te ayudé, de acuerdo?-

*Fin del Flashback.*

Adagio suspiró.

Mientras todos caminaban tras Celestia y Luna en dirección al interior del instituto, el castaño se acercó a la ojiverde, quién quedó en medio suyo y la peliarcoíris.

- Es lo normal para ustedes poder faltar a clases por el poder de la amistad?- Susurró y la vaquera rió por lo bajo, Rainbow frunció el seño.

- Pues eso parece.- Contestó la rubia.

- Piis isi pirici.- Murmuró la peliarcoíris para si misma.

- Bueno, creo que no te importaría faltar mañana por los viejos tiempos.- Soltó sacando dos boletos para un evento de rodeo y la peliarcoíris sintió su corazón bombear gasolina por un instante, pero se contuvo.

- Vacas voladoras!- Contestó Applejack tapando su boca con emoción.- Como lo supiste?!-

La peliarcoíris a punto de detener el paso y preguntar si en serio pensaba ir, se limitó a respirar profundo, Caramel por alguna razón, siempre le cayó mal, quizás porque antes de que ella y la rubia se hicieran pareja, ellos eran muy cercanos, algo en el le causaba inseguridad, pero jamás lo admitiría, nisiquiera a sí misma, además, su mirada siempre la retó.

- Como no voy a saberlo?- Contestó sonriente.- Era nuestro pasatiempo favorito antes de que me abandonaras.- Bromeó.

- No digas eso tonto.- Contestó golpeando ligeramente su hombro y riendo.

- Toma.- Soltó Rainbow cortando las risas de ambos y aventando con fuerza y un visible enojo a Adagio hacia Caramel.- Sostenla tú.

- Oye!- Gritó Adagio enojada y las demás giraron.

- Rainb!- Soltó Applejack siendo interrumpida.

- Yo iré a la enfermería, allá seré más útil.- Se marchó.

- La rubia quedó atónita.

- Espera, Rainbow Dash!- Gritó Celestia, siendo ignorada por la peliarcoíris, suspiró.- Ustedes realmente hacen lo que quieren eh?- Se resignó, sintiendo la mano de su hermana en su hombro. - Continuemos.- Soltó.

- Luego les castigaré.- Exclamó Luna.

- Pinkie...- Comentó Twilight algo tensa y la otra giró hacia ella en respuesta, algo neutra, pero con una sonrisa gentil.

- Podemos hablar luego de resolver lo de Adagio? A solas?- Colocó su mano sobre el hombro de la pelirrosa.

- Claro.- Sonrió con nerviosismo.