La noche se cierne sobre la ciudad, con destellos adornando el oscuro espacio que se expande a millares de distancia.
Apoyada sobre la baranda del tejado, mantengo la mirada perdida en el jardín, pensando y preguntándome si aquello era real.
Han pasado varias semanas desde que terminó el año escolar y la verdad, fue algo que muchas chicas, al igual que yo, celebramos. Ruby apenas logró graduarse y ahora podemos estar seguras que el siguiente año las cosas serán mejores.
Mis ojos todavía permanecen expectantes, admirando la bella escena que le brindan calidez a mi pecho.
—Christine Heeler ¿Qué haces aquí? —Escuché a mis espaldas— Deberías estar conversando ahí abajo con los demás.
En mi cara se dibuja una sonrisa mientras lo veo posarse junto a mí.
—Lo sé, solo vengo a admirar la vista por un rato. ¿Y tú?
—Acabando de ayudar a Bandit con la barbacoa. No fue tan difícil como pensé.
—Te lo dije.
—Parece un paisaje de ensueños ¿No?
—Si... Sigo sin creer que todos estén aquí.
—¿Por qué no? Literalmente tienes las pruebas al frente.
—No sé, es que... Me sorprende.
Jean ríe un poco mientras se permite admirar la vista al igual que yo. Todos mis amigos de la infancia, reunidos finalmente junto con algunos otros como Seth y Ashley.
—Me sorprendió que Coco fuera una vieja amiga tuya.
—A mí me sorprende que Mackenzie no hubiera avisado antes que los había encontrado. —Mis ojos van estudiando a cada uno de ellos: Chloe, Jack, Indy, Rusty, Snicker, los Terriers, Winton, coco, Winie y demás, todos conversando plácidamente— Ha pasado un largo tiempo desde que los vi. —Continúe— Y vaya que las cosas cambiaron.
—Si... —Nuestros ojos no evitaron fijarse en los de cierto familiar junto con un Retriever— Mira a esos dos, me pegunto por cuanto tiempo mantuvieron en secreto su relación.
—La pregunta es ¿Cuándo se supone que nos lo iban a decir?
—Verdad, si Bingo nunca los hubiera pillado besándose estos dos nunca se hubieran atrevido hablar.
Chucky se vuelve a Muffin para plantarle un tierno beso que es bien recibido por la Heeler, es más, prefiere continuar explorando aquellos labios a pesar de no ser la primera vez que los probó.
—Oooow, míralos. —Mencioné con el corazón enternecido.
—Y no son los únicos. —Llevé mis ojos a donde apuntaban los suyos, encontrando a Mackenzie y Honey platicando mientras preparaban todo para el Karaoke.
—Esos dos se complementan muy bien —Comenté mientras la sonrisa de ese par me contagiaba—, no había visto a Honey tan sonriente por mucho tiempo.
—¿Y cómo van las cosas entre ustedes?
—Pues... Honey me perdonó. Obvio, no es como que confié tanto en mí, pero, me esforzaré por hacerlo. ¿Y que hay de tu padre? ¿Cómo va?
—Mejorando cada día. El asistir al psicólogo fue su mejor decisión. Lo veo con más energías y con más ánimos.
Sonrió mientras entrelazo su brazo con el mío.
—Me alegra mucho saber que lograron enmendar las cosas.
—A mi también. —Dijo mientras tomaba mi mano con suavidad— A la vez, me alegro mucho por ustedes.
—Gracias... Me duele pensar que malgasté gran parte de la secundaria haciendo estupideces en vez de pasarla con mi familia, sobre todo con papá.
—Lo hecho, hecho está. Al menos te diste cuenta, muchos otros tardan en hacerlo.
—¡LUCKY! —escuchamos. Rápidamente, fijamos nuestras miradas en donde estaba el escándalo y nos encontramos a Judo aferrándose al labrador dorado. A mi no me engaña, puedo notar un claro rubor en Lucky mientras corresponde al abrazo de la eufórica Chow Chow.
A ambos se nos escapó una carcajada.
—Judo le tiene un gran aprecio a ese chico.
—Así es. Sigo preguntándome que tan borracha estuvo esa noche como para confundirte con él.
—Ni idea. Pero me alegro por ella.
Ambos desviamos las miradas al cielo, apreciando aquel astro que se alzaba sobre nuestras cabezas y que acariciaba nuestros cuerpos con su luz tenue y agradable.
—Por cierto... Le comenté a papá y a mamá sobre nuestra idea.
—¿La del año sabático?
—Si. —Asentí— Ya que cursaremos el ultimo año el mes que viene, tendremos tiempo para recolectar algo de dinero y poder hacer un viaje.
—¿Y que dijeron ellos?
—Les pareció buena idea, sobre todo si es en Canadá.
—¿Enserio? ¿Cómo así? —Preguntó con emoción.
—Porque te tengo a ti pues. Vas a ser mi guía angelical durante el viaje.
—¡Oh si! —Exclamó, me da ternura verlo tan emocionado como un niño— Hay varios lugares y cosas de los que no te puedes perder: esquiar, patinar, ver excursiones, cruzar el puente colgante de Capilano y visitar los jardines victoria. Obvio, es caro, pero tenemos un año completo para reunir algo de dinero.
—¿Y dónde nos hospedaremos?
—Mi tío nos podría ayudar con eso.
—¿Cuál de los dos?
—Mi tío Josh. A Sparki ni lo tomo en cuenta, odio a ese sujeto.
—Sin rencores. —Bromeé.
El bufó mientras se acurruca en mí.
—¿Y qué te parece la idea? —Preguntó.
Lo pensé por un par de segundos mientras apreciaba las estrellas que yacían sobre nuestras cabezas. Nuevamente, surge en mi el deseo de tocar una.
Lo miro fijamente a los ojos, aquellos que me hipnotizan y son deslumbrados por la luna. Con una amplia sonrisa, respondo:
—Me parece fantástico.
Me di el placer de juntar mis labios con los suyos para dejarnos caer en el bello y fascinantes movimientos de nuestros labios: lentos y llenos de amor.
—¡Oigan! —Exclama Mackenzie a todo el público— El Karaoke está listo ¿Quién va primero?
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Cambios
FanfictionEl cambio , es una transición física y mental que todos pasamos, vamos conociendo y explorando nuevos conceptos al punto de ver que, el mundo en el que vivimos, se expande con cada cosa que aprendemos. Reflexiones y pensamientos de nosotros mismos q...