La manzana podrida

Capítulo nueve: Bebamos juntos

Capítulo nueve: Bebamos juntos

Había amanecido, Lucifer se despertó estirando sus brazos lo más que podía, bostezo y se tallo un poco los ojos. Miro detenidamente sus manos, aun no podía creerse que había bailado junto a Alastor, le había tomado la mano y peor aún que le haya gustado, en el momento en que el demonio de la radio perdió el equilibrio y tuvo que atraparlo por instinto y sus ojos se conectaran, sintió algo particular, una coneccion especial, un...

No, no, no, no, no era posible -Lucifer sacudió su cabeza.

El rey del infierno se levanta de su cama y se dirige a un mini bar, era temprano, muy temprano, él lo sabía, pero necesitaba algo fuerte para olvidarse de esa escena y ese sentimiento que presenció en ese momento, mientras se servía un café con whisky estaba pensando en los ojos rojizos muy intensos del demonio, sus orejas suaves... la sonrisa tan auténtica que con tan solo pensarlo le hacía sonreír.

Mierda -dijo Lucifer cuando empezó a escurrir el whisky de la taza de café, se había distraído y estaba haciendo un desorden en toda la mesita que se estaba sirviendo.

Agarra una servilleta y limpia el desastre, cuando terminó, se acercó su taza de café con whisky, tomó una gran inhalada saboreando su delicia y cuando estaba a punto de juntar sus labios con la taza...

¡Papá! -gritó Charlie abriendo la puerta.

¡Ahh! -gritó Lucifer tirando su taza al suelo.

¿Ah? Lo siento, debí tocar -dijo Charlie acercándose

No, no te preocupes -dijo Lucifer desilusionado, tronó sus dedos y desapareció su desorden.

Charlie tenía una sonrisa de oreja a oreja.

¿Ahora que tramas dulzura? -preguntó Lucifer

¿Por qué piensas qué tramo algo? -preguntó Charlie

Porque eres mi hija y te enseñe bien -dijo Lucifer divertido

¿A no disimular? -preguntó Charlie divertida

Lucifer y Charlie sueltan una risa.

¿Qué pasa? -preguntó Lucifer

La actividad de ayer, la del baile, fue grandiosa ¿verdad? -preguntó Charlie

¿Ah? Ahh, si, si, claro -dijo Lucifer

¿Crees que Alastor y tu ya son mejores amigos? -preguntó Charlie

Lucifer se ahoga con su propia saliva- Charlie, no creo que asi funcione -dijo el rey

Mmm ¿Por qué no? -preguntó Charlie

Ahh, siento interrumpir -dijo Vaggie entrando a la habitación

No lo haces -dijo Lucifer sonriendo

Charlie, ha llegado un cliente -dijo Vaggie

¿Qué? ¿En serio? -preguntó Charlie emocionada

Mmm, está abajo esperándote... ¿Ah? -Vaggie ya no pudo decir nada ya que Charlie salió corriendo hacia la entrada principal, mira al rey quien solamente le sube los hombros, como indicando "así es ella" y Vaggie también imita esa acción, para después despedirse y cerrar la puerta.

...

Lucifer se enlista, se perfuma y comienza a bajar las escaleras, en la entrada principal, se encontraba absolutamente todos, Husk limpiando algunas copas, Angel bebiendo, Niffty buscando insectos, los minions con Alastor, quien estaba sentado leyendo un periodico y Charlie y Vaggie atendiendo al nuevo huésped.

Lucifer y Alastor por un momento cruzaron miradas, pero rápidamente voltearon hacia otro lado.

Ah, Ah, su majestad -dijo el nuevo huésped haciendo una reverencia

No hay razón para las formalidades -dijo Lucifer.

Exacto, no lo hagas que te ves patético -dijo Alastor.

¡Alastor! -regaño Vaggie.

"Parece que alguien está celoso" -pensó Lucifer sonriendo.

¿Por qué estás tan enojado? ¿Alguien se despertó de mal humor? -preguntó Lucifer burlonamente

No, toda mi mañana fue espectacular, pero al ver tu cara ya se ha arruinado -dijo Alastor doblando su periodico y dejando aun lado.

Tanto Lucifer como Alastor se miraron con odio y cierta rivalidad, se sentía una descarga eléctrica a sus alrededores.

Ahhh, yo mejor me voy -dijo Ángel al ver la tensión de los dos individuos.

Te acompaño -dijo Husk.

Angel tomó en brazos a Niffty y se fue del hotel con Husk a su lado.

Bien, bien, vamos a enseñarte el hotel -dijo Charlie jalando el brazo para guiar al nuevo huésped. Vaggi los sigue también.

Lucifer y Alastor se encontraban completamente solos en la sala principal.

Tsk, ¿Por qué no te vas a molestar a alguien más? Su majestad -dijo Alastor.

¿Qué es lo que te sucede? ¿Te levantaste con el pie izquierdo? Bambi gruñón -dijo burlonamente Lucifer.

Acaso ¿Quieres pelear? -preguntó Alastor levantándose del sofá.

Tal vez fue solo el viento, una magia desconocida, una pequeña broma de alguien o azares del destino, pero la radio que estaba sobre una mesa de la sala se prende y se escucha una melodía.

¿Pero qué demonios? -preguntó Alastor

Ohhh, esa es una buena -dijo Lucifer

Quien diría que el patético rey tuviera buenos gustos -dijo Alastor

Ohhh, y quien diría que un animalito pudiera deleitarse con los placeres del hombre -dijo Lucifer con una gran sonrisa.

Grrrr -Alastor empezó a gruñir, quería matar a Lucifer.

Oh, Ohh, Bambi se ha enojado, quiere morderme -dijo Lucifer

Tsk, no tengo tiempo para esto -dijo Alastor empezando a alejarse.

Oye espera, no te rajes, ¿Por qué no tomamos unas copas? -preguntó Lucifer señalando el bar de Husk completamente desatendido.

¿Por qué quería beber contigo? -preguntó Alastor

¿Por qué no? ¿Tienes miedo? -preguntó Lucifer sacando un pequeño frasco de sus bolsillos, tenía un aspecto terrible, morado y algo verdoso, claro que era veneno. Lucifer muestra una sonrisa maquiavélica- ¿Cuánto podrá aguantar el bambi?

Más que tu -dijo Alastor caminando hacia la cantina.