Tokiwa Asuna, hija de Kamen Rider Zi-O, esta llevando una vida diaria como una humana normal.
Pero ciertos acontecimientos, la llevarán a descubrir su poder y combatir junto con su padre.
Respondiendo a la luz que brillaba a través de un espacio entre las cortinas, Tokiwa Ryuji se despertó.
Ryuji: ... Hmm? ¿Qué es esto…?
Sintiendo un calor extraño en su cuerpo, se sentó sorprendido. Yuna estaba profundamente dormida en su cama.
Este descubrimiento le hizo recordar los acontecimientos del día anterior.
Después de regresar del campo de batalla contra los Noises, Ryuji había llegado y se sorprendió de ver a la Idol en su casa hablando con su hija con ella.
Y trato de coquetear el día de ayer pensando en que podría caer ante ella, pero la jugada había salido al revés.
Ryuji: ¿Supongo que ella se escabullo otra vez aquí?
Luego, recordó la confesión de ayer por la noche.
La persona que tenía delante era, según su propia presentación, su casi sobrina, Yuna Shigemura.
Sin embargo, la verdadera identidad de esta persona no era otra que la niña que había salvado antes en su infancia, a quien había conocido en otra dimensión y cuido de ella hace diez años, Yuna Shigemura.
Ryuji: Yuna ...
Susurrando su nombre, le acarició la cabeza como lo había hecho hace mucho tiempo atrás cuando ella y Asuna eran unas niñas.
Esto trajo a la mente recuerdos alegres del tiempo que una vez había pasado con ella antes de que se fuera.
Ryuji: Qué sentimiento tan extraño ...
Se echó a reír para ocultar su vergüenza.
Al compartir la misma cama, notó claramente su aroma fragante y femenino. Inspirándole algunos sentimientos extraños en él.
Ryuji: Podría hacer algo de lo que me arrepienta si no termino esta situación ...
Advirtiéndose a sí mismo, trató de levantarse lentamente. Frotando sus ojos aparentemente somnolientos, Yuna levantó su cuerpo antes que él.
Yuna: Nn, buenos días ... Ryuji ...
Ryuji: Oye, ¿qué pasa con ese atuendo ...?
Ryuji se sonrojó de un rojo intenso.
Yuna, después de todo, vestía solo una delgada camisa negra. Las dos protuberancias en su pecho solo empeoraron las cosas, él sabía bien el peligro que representaban. Además, su mitad inferior estaba cubierta por solo un par de pantalones cortos blancos y delgados.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Si Asuna se entera de esto, el estaría más que muerto sabiendo como es ella en este tipo de cosas.
Yuna: Bueno, anoche, no podía dormir, salí a la sala, pero no pude, entre aquí, y creo que me quedé dormida así. ... ¡Espera, UWAA-!
