Park Sunghoon es un agente federal, pero, tras un incidente en su última misión ha sido relevado y degradado de su cargo, ahora, ha sido asignado a una misión como encubierto donde deberá ser el guardaespaldas del hijo de uno de los senadores más pr...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La misma melodía sonaba por doceava vez, aunque en un inicio le había gustado e incluso transmitido tranquilidad, ahora mismo, solo le causaba angustia. Deseaba dejar de escucharla, porque cada vez que la repetía, indicaba un error más que cometía.
Jake se dejo caer frustrado al suelo luego de intentar imitar los suaves y ligeros movimientos que realizaba su profesora a través de la pantalla del celular. Por más que lo intentara, simplemente no podía ejecutarlos con la misma delicadeza y elegancia, sus movimientos eran más severos e incluso rápidos, no sentía la música del todo y por consiguiente, no lograba seguir la coreografía.
— Debí estudiar arquitectura. —Musito por lo bajo estirando sus piernas, comenzaban a dolerle por los repetidos intentos de imitar los movimientos.
Su carrera de artes escénicas abarcaba diversas ramas. En el semestre que cursaba, estaba viendo danza, no era su fuerte, de hecho, había decidió estudiar aquella carrera porque le interesaba el teatro y quería dedicarse a ello, pero, sabía que era imposible lograrlo sin conocer la historia de la danza, sus bases, principios y formas.
El enfoque de ese semestre, era el estilo contemporáneo. Jake lo admiraba, de verdad lo hacia, pero, él no poseía esa habilidad de transmitir con su cuerpo mediante la danza sus emociones o sentimientos. Era rígido, demasiado para eso.
Por ende, había decidido quedarse durante el fin de semana en el campus para poder practicar tanto como le fuera posible. La mayoría de estudiantes solía abandonar el lugar desde el viernes en la noche y retornar el domingo en la tarde, incluso el a veces se iba y otras se quedaba, no siempre tenia un lugar al que ir.
Dirigió su vista hacía el reloj que yacía sobre la enorme pared llena de espejos, en el marcaba las 5:53 pm. Suspiro cansado y se levanto sin mucho esfuerzo del suelo.
— Buen trabajo Jake, quizá mañana puedas avanzar más que hoy. —Se animo tomando su celular y botella del agua para salir del lugar, iría de vuelta a su dormitorio.
El celular vibro un par de veces en su mano, sin querer dejarlo pasar por alto, contesto la llamada entrante al ver que se trataba de Christopher.
— ¡Hey, jaku!
— Chris, creí que me había librado de ti por unos días.
— No tienes que fingir, sé bien lo mucho que me extrañas.
No mentía, si lo extrañaba. Al ser foraneo con solo una tia lejana cuya casa era lo único a lo que podía considerar hogar en ese lugar, Christopher se había vuelto parte esencial de él, solía llevarlo a su casa o hacer planes con él durante el fin de semana para que Jake no tuviera que quedarse solo en el campus.
— ¿Cómo está el clima por allí?, aquí apesta, todo esta nublado, que tétrico.
— Deja de ser miedoso, Jake. —Chisto divertido al otro lado de la linea. —¿No te dará miedo quedarte solo en tu habitación esta noche?
