Ryujin
Estaba en la cancha en la que habíamos quedado antes de la hora. Decidí entrar en calor y pasar drills que puedo intentar sola. Había propuesto las 12:30 pensando que __ iba a necesitar almorzar antes de jugar, pero como me acababa de despertar decidí aprovechar el tiempo.
Estaba practicando tiro cuando veo una mano intentar interponerse. La pelota entró en la red de todos modos, pero__ estaba decepcionada por no haberlo logrado incluso cuando tenía la guardia baja.
La saludé riéndome ligeramente ante su intento, me encantaba que estuviera buscando eso, que su meta fuera frenarme. Era competitiva sin dudas y, aunque estaba completamente confiada de mi técnica, sabía que ella comprendía que era mi punto fuerte y por eso intentaba ir en contra; lograr algo que casi nadie logra.
Poco después dejó de estar indignada y sonrió conmigo.
Estoy segura de que aunque no hubiera hecho eso yo estaría sonriendo igual, después de lo que pasó ayer simplemente estaba feliz de verla, por saber que estaba bien y de buen humor.
―Antes de empezar a entrenar...― __ me miró como si no supiera qué esperar de esa frase― ¿Cómo te fue ayer?
―En la escuela todo bien, estuve en el almuerzo con unos compañeros del grupo de lectura y sus amigos. Sólo faltaba uno de los chicos, por lo que me contaron está en el equipo masculino de básquet. ¿Yeonjun, puede ser?― Me preguntó. Choi, se podía decir que lo conocía. No éramos amigos como tal, pero nos habíamos cruzado varias veces y jugar 1v1 contra él es bastante entretenido.
―Sí, sé quién es. Juega de alero―. Asintió, intentando absorber toda la información posible―. ¿Cómo te fue con Yuna?
―¿Preocupada?― Dijo en modo de chiste, pero decidí ser sincera y contarle un poco, con mucha menos intensidad lo que había pasado ayer―. Ay, Ryu, perdón. Si hubiera sabido te lo hubiera contado antes para que te quedaras más tranquila. De hecho fue bastante gracioso―. __ se acercó a mí posando sus manos en mis antebrazos como hacía cuando yo dejaba las mías en sus caderas, lo cual hice de manera automática. Depués caí en lo que había dicho. ¿Gracioso? ¿Cómo era posible que estar con Yuna fuera gracioso después de todo lo que pasó entre ellas?
―¿Te acordás del audio que te mandé, contandote sobre el trabajo y que probablemente iba a estar ocupada?― Obvio que me acordaba del mensaje que había llevado mis nervios al mismísimo infierno―. Yuna actúa diferente cuando alguien te nombra o cuando estás ahí; estoy completamente segura de que lo hace de manera inconsciente. Me parece muy tierna.
¿Cuán ciega había estado a esas cosas?
No es que fuera algo nuevo, yo también actúo diferente cuando estoy con __ que cuando estoy con otras lobas y no lo hago a consciencia.
Pero tal vez debería ponerle más límites. Yuna no era de mi interés, tal vez lo habría sido antes de mi peque, pero no pienso mirar a nadie más hasta, al menos, saber qué me pasa.
¿Y en qué momento una beta había empezado a parecerle tierna? Preferí no pensar más en eso.
―Bueno, me alegra que todo haya ido bien y que no te haya incomodado. ¿Lista para jugar?
―Nací lista.
―Vamos a practicar primero tiro saliendo del pique, sos buena en tiro estático pero tenés que acostumbrarte a sacarlo en movimiento. Vamos a seguir con catch and shoot y triples. En el medio, bandejas―. __ había estado demostrándome que estaba de acuerdo con el entrenamiento hasta que dije eso último y resopló―. Sólo por eso vas a entrar en calor con bandejas―. Dió vuelta los ojos―. Dale, voy atrás tuyo.
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High heels - Ryujin y tú [Omegaverse]
Fiksi Penggemar"Los tacos altos pueden ser mortales para la indiferencia y el autocontrol de algunos alfas. Con un olor particular es imposible que no caigan por vos, mi niña, vas a tener que aprender a cuidarte." Todos los derechos reservados. No se aceptan adapt...